A mí lo que no me gusta es que los diseños de Amano son tan... "suyos" que luego nunca los adaptan como toca en el juego.
En los primeros FF se nota menos porque los sprites no daban para más, pero en FFIX comparas los diseños con lo que sale en el juego y parece que no tenga mucho que ver. Su calidad es indudable, pero no sé, los diseños de Nomura también me gustan mucho, especialmente los post-FFVII, y los plasman mejor en el juego.