Flanders escribió:Nada es para siempre. Esto es así de claro, yo dudo mucho que si muchas veces no aguantamos ni a nuestros padres, ni a nuestros hermanos que son nuestra sangre, vayamos a aguantar a otra persona.
Yo adoro a mi familia, nunca he tenido una sola discusión con ellos
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Pero vamos, el vínculo genético no garantiza que te lleves mejor con tu familia que con alguien que has decidido incorporar a tu vida de forma voluntaria.
Y sí, está claro que de tus padres o de tus hermanos no te enamoras, pero ¿hay algo más grande que el amor a un padre o una madre? Claramente no.
Mis padres saben (y entienden) que por mucho que los quiera, mi prioridad ahora es mi pareja. Es algo natural, las crías abandonan el nido y forman su propia familia. No es cuestión de querer más a unos o a otros, pero está claro que, en cierto modo, mi pareja me importa más. Si no, estaría viviendo con mis padres y no con ella.
Así que eso lo que hay. Claro, que también ese amor es distinto del que se siente por tu pareja, pero pienso que el ser humano no sirve para estar siempre enamorado y feliz.
Al final yo creo que lo que queda es el respeto y el cariño. Ahora bien, ¿amor? Lo dudo muchísimo.
Dependerá del ser humano, yo he sido feliz prácticamente toda mi vida.
Respeto y cariño se siente por una pareja, pero también otras cosas que convierten a tu pareja en lo que es (y no en un simple amigo). Al menos es el concepto que tengo yo de pareja.
Ciertamente, ya no me acordaba de que os vi en aquel hilo