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sebem escribió:Kololsimo escribió:Hubo una época en que el bernabéu no era "mayoritariamente" así, pero con la desaparición del gallinero, el tema de los asientos, Florentino y los galácticos, el pijerío puro que traía todo esto...pues la gente se lo toma cómo ir al teatro. Que si, que la afición del madrid casi siempre ha sido de animarse en base a lo que haga el equipo, pero viendo partidos de los 80 y 90 el ambiente del estadio era uno muy distinto.
Te han jodido con el killzone 3 ¿no? Me ha parecido verte por otro lado.
Kololsimo escribió:sebem escribió:Te han jodido con el killzone 3 ¿no? Me ha parecido verte por otro lado.
xDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD
Internet es un pañuelo...me han jodido pero bien.
Lit escribió:En cuanto a lo que la gente haga en el estadio, en serio, me parece andar dandole vueltas siempre a lo mismo, la gente paga su entrada o abono y hace lo que le da la gana, punto. Si anima o no anima, es problema suyo, si pita o no pita, tambien. No entiendo a son de que, tienen que venir otros a decir lo que tienen o no tienen que hacer en el campo.
Rokzo escribió:Lit escribió:En cuanto a lo que la gente haga en el estadio, en serio, me parece andar dandole vueltas siempre a lo mismo, la gente paga su entrada o abono y hace lo que le da la gana, punto. Si anima o no anima, es problema suyo, si pita o no pita, tambien. No entiendo a son de que, tienen que venir otros a decir lo que tienen o no tienen que hacer en el campo.
Que cada uno haga lo que le de la gana con su asiento, eso está claro, pero igual que es libre para hacer lo que le de la gana yo soy libre para criticar esa actitud. El fútbol no es el teatro, por mucho que los piperos se lo tomen así, y es el tipo de aficionado que el equipo menos necesita, no veo por qué no puedo criticar esa actitud, igual que criticaría la actitud de los jugadores si van andando durante todo el partido.
Lit escribió:Rokzo escribió:Lit escribió:En cuanto a lo que la gente haga en el estadio, en serio, me parece andar dandole vueltas siempre a lo mismo, la gente paga su entrada o abono y hace lo que le da la gana, punto. Si anima o no anima, es problema suyo, si pita o no pita, tambien. No entiendo a son de que, tienen que venir otros a decir lo que tienen o no tienen que hacer en el campo.
Que cada uno haga lo que le de la gana con su asiento, eso está claro, pero igual que es libre para hacer lo que le de la gana yo soy libre para criticar esa actitud. El fútbol no es el teatro, por mucho que los piperos se lo tomen así, y es el tipo de aficionado que el equipo menos necesita, no veo por qué no puedo criticar esa actitud, igual que criticaría la actitud de los jugadores si van andando durante todo el partido.
Yo no he dicho que no se pueda criticar esa actitud, simplemente digo que no entiendo que haya gente que pretenda decir que es o que no es adecuado en un campo de futbol.
¿Que hay gente que se lo toma como ir al teatro?, vale, frase hecha, pero vale.....¿Y? ¿Que ocurre que te crees mejor que ellos o algo por el estilo?
sebem escribió:Y Guardiola preparando la espantada por si no ganan la champions ¿no?
Frase hecha pero real como la vida misma, no es que me crea mejor que ellos, es que opino que me parece una estupidez ir a un campo a mandar a la gente callar porque le molestan mientra come pipas, es mi opinión y punto, no digo que ni tengan derecho a ir, ni que se deberían prohibir las pipas de los estadios ni nada por el estilo, digo que esa es el tipo de afición que menos necesita un equipo y el tipo de aficionado más prescindible de todos, ya está.
Y por cierto, generalmente los que se creen mejores que tú y que te miran por encima del hombro son los piperos, con derecho a mandar a callar a la gente y demases.
Lit escribió:No, real no, en el teatro no se comen pipas, de ahi la frase hecha. Pero bueno......¿Vas mucho al Bernabeu?
Segundo, a mi, jamas nadie me ha mandado callar, nunca, de manera que algunas teorias fallan al respecto. Y sobre si ese tipo de aficion es la que necesita un equipo, pues hombre, es la aficion que paga su entrada o abono, ¿Lo haces tu?
mi_novia_PS2 escribió:Es igual... Ahora hay buen ambiente en el foro y no voy a decir nada.
Yo respeté hasta que vi que se me dejó de respetar.
Un saludo.
Rokzo escribió:Depende del teatro, los que son al aire libre sí pero va, sí, tienes razón, frase hecha
Yo si pudiera permitírmelo, iría todos los fines de semana al Bernabeu, pero si ahora tu argumento va a tirar por si el que paga más o paga menos tiene más o tiene menos derechos, entonces mejor dejamos el tema. Para mí el pipero no es un buen aficionado, si para ti sí por el simple hecho de pagar su entrada o abono, bueno, opinión totalmente respetable, igual que la mía, ¿No?
Lit escribió:Rokzo escribió:Depende del teatro, los que son al aire libre sí pero va, sí, tienes razón, frase hecha
Yo si pudiera permitírmelo, iría todos los fines de semana al Bernabeu, pero si ahora tu argumento va a tirar por si el que paga más o paga menos tiene más o tiene menos derechos, entonces mejor dejamos el tema. Para mí el pipero no es un buen aficionado, si para ti sí por el simple hecho de pagar su entrada o abono, bueno, opinión totalmente respetable, igual que la mía, ¿No?
No, no va por ahi. Va simplemente con que una persona paga su entrada (me da igual si es la mas cara o la mas barata) y hace en el campo y apoya al equipo como cree oportuno. Mi padre, por ejemplo, se sienta en el asiento, abre los ojos como platos y no se mueve, esta totalmente centrado en el partido y casi ni habla ("Vamos", "Mira la banda", "Ahora", vamos en plan Robocop) no es de gritar ni de cantar y sin embargo, por dentro, esta histerico.......bueno, un dia le van a secuestrar a mi madre y no se entera
Y yo no he dicho que el pipero sea buen aficionado, digo que es un aficionado, y como tal hace lo que cree oportuno en el campo, donde no voy a entrar es en si es mejor o peor, simplemente, merece tanto respeto como cualquier otro. Y repito, ¿Que me gustaria que el Bernabeu fuese una olla a presion?, pues claro, pero no lo va a ser nunca......de eso, puedes estar seguro.
Rokzo escribió:Joe, pero tu padre no es un pipero hombre, nada que ver xDD
No digo que todo el estadio tenga que gritar al unisono para que lo considere una buena afición, es más por la gente que, como ha comentado el anterior usuario que le ha pasado, tú vas a animar y ellos te miran mal, esa gente es la que yo considero "piperos", pero no a gente como tu padre
Estadio Santiago Bernabéu, un domingo cualquiera. Las mocitas madrileñas van alegres y risueñas porque juega su Madrid. Junto a las mocitas llega al estadio un hombre acompañado de su hijo: Juan Pípez, de unos cuarenta años, lleva siendo socio literalmente toda la vida, cuando su padre le sacó el carnet con ocasión de su bautizo. También él ha inscrito hace poco a su hijo Toñín, de diez años, y le lleva por primera vez al fútbol. El niño abre los ojos asombrado ante el sublime espectáculo de los anillos de gradas uno encima del otro, que van llenándose de gente poco a poco.
- ¡Hala, papáaa, qué grande!
- Sí, hijo, muy bonito.
Para Juan no es un espectáculo tan grande, claro. Empezó a venir teniendo unos ocho años y su asiento de abono ya es para él casi como el sillón de su casa: un lugar familiar, rutinario; casi tiene marcada la huella de su culo. Antes de ocupar las localidades, padre e hijo cumplen con el ritual obligatorio: Comprar los refrescos y, sobre todo, las pipas, una enorme bolsa de pipas. No son de la marca Facundo, la favorita de Juan, pero le servirán.
- Papá, ¿por qué compras una tan grande?
- Sirven pa echar el rato.
- ¡Pero papá, si vamos a ver nada menos que al Madrid!
- Sí, bueno, pero mientras no pasa nada...
El partido es contra un equipo de mitad de la tabla, en teoría un rival bastante asequible para el Madrid. Da comienzo el encuentro. En las gradas reina el silencio más absoluto, sólo roto por el "cric cric" de las pipas de Juan y de muchos otros socios que le rodean, y por los gritos de un grupo de mozalbetes con pancartas alojados en el lejano fondo sur. Toñín está algo extrañado.
- Papá, ¿por qué nadie anima?
- Verás, hijo, es que esto es el Bernabéu: Aquí la gente es muy entendida y viene a disfrutar del espectáculo, no a dar gritos.
En ese momento el árbrito pita una falta algo dudosa en contra del Madrid. Juan reacciona como un resorte:
- ¡¡Arbitro, cabrón, hijo de la gran putaaaaaa!!- exclama, mientras esputa algunas cáscaras de pipas. El niño se queda desconcertado.
- Bueno, papá, pero yo puedo animar, ¿no?
- Sí, hijo, anima lo que quieras.
Dicho y hecho, Toñín empieza a arengar a sus ídolos con gritos entusiastas. Alguno de los socios de las cercanías le mira de reojo con cierto desdén, mientras sigue masticando sus pipas. Pero no son sólo pipas lo que se consume en la grada: Algunos socios, más viejos que Juan, llevan un enorme puro entre sus labios. Éste degusta un bocadillo de chorizo; aquel una bota de vino. Otros no llevan nada: Sólo observan el partido con aire indiferente (menos cuando el árbitro pita en contra). Dan la impresión, sobre todo los más mayores, de llevar allí años, muchos años, casi desde que Don Santiago fundara el estadio, y de que en algún momento se quedaron congelados en el tiempo, en una de tantas temporadas.
Van pasando los minutos y el Madrid no consigue marcar ni imponerse claramente en el juego. El contrario se está resistiendo.
- Papá, parece que les cuesta marcar.
- Si es que son unos golfos, joder, no meterle ninguno a esta mierda de equipo.
- Tendríamos que animarles a ver si juegan mejor, ¿no?
- Sí, bueno... ¡Es que con la mierda de partido que están haciendo se te quitan las ganas de animar, coño!
Llega el minuto 30 de la primera parte y aún no hay goles. Desde algún punto de la grada se escuchan unos silbidos, que pronto se amplifican y se extienden por todo el estadio.
- Ah, ahora silbamos al otro equipo para ponerles nerviosos, ¿verdad?
- Qué va, hijo, estamos pitando a los nuestros, que son unos inútiles. ¡¡Golfos!! ¡Sinvergüenzas!
- Pero papá, si es nuestro equipo, y además son estrellas del fútbol mundial.
- ¡Sí, estrellas para cobrar y para irse de juerga por la noche, pero luego no dan un palo al agua! ¡¡Fiiiiiiiii!!
- ¡Pero si son muy buenos, y además hemos traído a un entrenador que ha ganado muchos títulos!
- ¿Ese? ¡El más golfo de todos! ¡Menudo amarrategui está hecho! ¡Hoy venía una encuesta en el Marca que le rechazaba el 65% de la afición!
- ¿Han hecho una encuesta aquí en el estadio?
- No sé, hijo. ¡¡Y encima no ha puesto a Fulánez, Mengánez y Zutánez!!
- Pero papá, es que Fulánez lleva siete años en el equipo y nunca consigue ser titular, y Mengánez y Zutánez sólo han jugado en el Castilla y nadie sabe cómo serán-, responde inocentemente Toñín, olvidándose de la declarada debilidad de su padrepor Fulánez.
- ¡Claro, si no les dan oportunidades cómo van a asentarse en el equipo!
Los pitos descentran aún más al Madrid, y se llega al descanso sin goles en el marcador. Los silbidos se hacen aún más intensos y acompañan a los jugadores en su camino hacia el vestuario. Padre e hijo salen a los pasillos del estadio, en obras desde hace 25 temporadas. Juan mastica el bocadillo de calamares que le ha preparado su mujer, y mientras esquiva una gotera del techo farfulla: "¡Como no salga Fulánez me voy a cagar en todo!" Toñín camina junto a su padre con su bocata de choped. Mientras esquiva unos sacos de cemento que andan por ahí tirados, piensa que esto de ver el fútbol en directo es algo complicado.
Empieza la segunda parte y ambos vuelven a su asiento. A Juan aún le queda una buena reserva de pipas. Se llega al minuto 15 y el equipo aún no ha conseguido reaccionar. Vuelven a escucharse algunos silbidos. El entrenador decide realizar algunos cambios. Entran Fulánez, el ídolo de Juan, y Perengánez, jugador llegado esta temporada que ha destacado en un equipo pequeño y sobre el que existen dudas de que tenga suficiente categoría para jugar en el Madrid.
Parece que los cambios han calmado los ánimos. El equipo empieza a funcionar mejor y el juego parece más hilado. Se crea alguna ocasión de peligro. "Claro, jugando con Fulánez...", dice Juan. No obstante, en un momento dado se falla un pase fácil en el centro del campo. Instantes después, un jugador madridista no llega a un balón por escasos centímetros y la pelota sale fuera. Entonces empieza un auténtico concierto de pitos. El estadio es un clamor: "¡¡¡Fueeeera, fueeera, fueeeera!!!"
- Papá, así creo que no ganamos.
Juan está fuera de sí. "¡¡Si es que una vergüenza!! ¡Todos los partidos igual! ¡Me cago en sus muertos! ¡¡Desgraciaaaaaos!!"
Sigue el juego y Fulánez, en posesión de la pelota, da un pase a media distancia, sin demasiada importancia para el juego.
- ¡¡Mírale!! ¡El único que vale!-, grita Juan.
La pelota llega a Perengánez, el del equipo modesto, que intenta un atrevido regate cerca de la esquina del campo. Desgraciadamente no le sale bien y el balón se va por la línea de fondo. Los pitidos se hacen ensordecedores.
- ¡Pero cómo puede jugar ese mierda! ¡¡Vuélvete a tu puebloooo!!
- Pero papá, si ha entrado hace cinco minutos, y al menos lo está intentando.
- ¡Que no, hombre, que no! ¡Que ese tío no vale para el Madrid! ¡Que yo he visto jugar a Santillana, A Stielike, a Míchel y a Laudrup!
- Papá, y a ese de ahí que corre tanto y que no ha hecho nada en todo el partido, ¿por qué no le pita nadie?
- Caray, hijo, es que ese es el capitán. ¡El símbolo del equipo! Y mira qué lucha, qué entrega. Mira, mira cómo va detrás de ese balón que va a salirse del campo. Además, lleva tropecientos partidos con la selección. ¡De lo mejor que tenemos!
- Pero papá, si ese jugador lleva tres años sin hacer casi nada, ¿no? En mi cole nadie lleva su camiseta, y cuando jugamos en el patio nadie se lo pide.
- Naaaa, aunque parezca que esté mal ese cuando menos te lo esperas aparece. ¡Es el más listo de la clase!
El partido sigue avanzando, con los pitidos yendo y viniendo. Un jugador del Madrid agarra claramente a un contrario cerca del área y el árbitro le saca tarjeta amarilla. Los pitidos se hacen más fuertes, pero esta vez dirigidos al árbitro. "¡Hijo de perraaaaa! ¡Me cago en tu madreeeeee!", se desgañita Juan. Toñín cada vez entiende menos.
A falta de diez minutos para el final, el Madrid logra engarzar una buena jugada y por fin marca. Toñín duda un instante cuál debe ser su reacción, pero no caben muchas dudas: el estadio estalla de júbilo.
- ¡¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOL!!!
Juan pega botes y grita como un loco, y Toñín se une a su alegría. Tras el tanto, el Madrid empieza a jugar con mucha más fluidez y a dominar claramente a su rival. Se extienden los gritos por la grada, que esta vez sí anima como un solo hombre: "¡Hale Real Madrid, hale haleeeee!" "¡Madrid! ¡Madrid!"
- Papá, ¿por qué animan ahora y antes no?
- ¡Hombre, es que ahora juegan como Dios manda!
Llega el final del partido, y el estadio prorrumpe en aplausos. Finalmente la cosa ha acabado bien. Padre e hijo, esquivando unos cuantos escombros que se encuentran por los pasillos, se dirigen a la salida. Juan parece bastante animado.
- No ha estado mal el partidito. ¡Porque ha sacado a Fulánez, que si no...! ¡Ahora, como no espabilen la semana que viene se van a cagar estos hijos de puta!
Toñín está pensativo nuevamente. Está contento por la victoria de su equipo, sin duda, pero no ha acabado de entender la experiencia recién vivida. Si supiera que a su padre le pasó lo mismo la primera vez que fue al campo estaría más tranquilo. Pero bueno, al fin y al cabo, piensa Toñín, es el Santiago Bernabéu, y esta es la afición más entendida del mundo. No debe ser tan fácil convertirse en un experto del fútbol. Para ir desentrañando todos estos secretos, la próxima vez seguramente animará menos y comerá más pipas.
Publicado por El Socio en 4:01 AM
capellista escribió:Historia de un pipero:Estadio Santiago Bernabéu, un domingo cualquiera. Las mocitas madrileñas van alegres y risueñas porque juega su Madrid. Junto a las mocitas llega al estadio un hombre acompañado de su hijo: Juan Pípez, de unos cuarenta años, lleva siendo socio literalmente toda la vida, cuando su padre le sacó el carnet con ocasión de su bautizo. También él ha inscrito hace poco a su hijo Toñín, de diez años, y le lleva por primera vez al fútbol. El niño abre los ojos asombrado ante el sublime espectáculo de los anillos de gradas uno encima del otro, que van llenándose de gente poco a poco.
- ¡Hala, papáaa, qué grande!
- Sí, hijo, muy bonito.
Para Juan no es un espectáculo tan grande, claro. Empezó a venir teniendo unos ocho años y su asiento de abono ya es para él casi como el sillón de su casa: un lugar familiar, rutinario; casi tiene marcada la huella de su culo. Antes de ocupar las localidades, padre e hijo cumplen con el ritual obligatorio: Comprar los refrescos y, sobre todo, las pipas, una enorme bolsa de pipas. No son de la marca Facundo, la favorita de Juan, pero le servirán.
- Papá, ¿por qué compras una tan grande?
- Sirven pa echar el rato.
- ¡Pero papá, si vamos a ver nada menos que al Madrid!
- Sí, bueno, pero mientras no pasa nada...
El partido es contra un equipo de mitad de la tabla, en teoría un rival bastante asequible para el Madrid. Da comienzo el encuentro. En las gradas reina el silencio más absoluto, sólo roto por el "cric cric" de las pipas de Juan y de muchos otros socios que le rodean, y por los gritos de un grupo de mozalbetes con pancartas alojados en el lejano fondo sur. Toñín está algo extrañado.
- Papá, ¿por qué nadie anima?
- Verás, hijo, es que esto es el Bernabéu: Aquí la gente es muy entendida y viene a disfrutar del espectáculo, no a dar gritos.
En ese momento el árbrito pita una falta algo dudosa en contra del Madrid. Juan reacciona como un resorte:
- ¡¡Arbitro, cabrón, hijo de la gran putaaaaaa!!- exclama, mientras esputa algunas cáscaras de pipas. El niño se queda desconcertado.
- Bueno, papá, pero yo puedo animar, ¿no?
- Sí, hijo, anima lo que quieras.
Dicho y hecho, Toñín empieza a arengar a sus ídolos con gritos entusiastas. Alguno de los socios de las cercanías le mira de reojo con cierto desdén, mientras sigue masticando sus pipas. Pero no son sólo pipas lo que se consume en la grada: Algunos socios, más viejos que Juan, llevan un enorme puro entre sus labios. Éste degusta un bocadillo de chorizo; aquel una bota de vino. Otros no llevan nada: Sólo observan el partido con aire indiferente (menos cuando el árbitro pita en contra). Dan la impresión, sobre todo los más mayores, de llevar allí años, muchos años, casi desde que Don Santiago fundara el estadio, y de que en algún momento se quedaron congelados en el tiempo, en una de tantas temporadas.
Van pasando los minutos y el Madrid no consigue marcar ni imponerse claramente en el juego. El contrario se está resistiendo.
- Papá, parece que les cuesta marcar.
- Si es que son unos golfos, joder, no meterle ninguno a esta mierda de equipo.
- Tendríamos que animarles a ver si juegan mejor, ¿no?
- Sí, bueno... ¡Es que con la mierda de partido que están haciendo se te quitan las ganas de animar, coño!
Llega el minuto 30 de la primera parte y aún no hay goles. Desde algún punto de la grada se escuchan unos silbidos, que pronto se amplifican y se extienden por todo el estadio.
- Ah, ahora silbamos al otro equipo para ponerles nerviosos, ¿verdad?
- Qué va, hijo, estamos pitando a los nuestros, que son unos inútiles. ¡¡Golfos!! ¡Sinvergüenzas!
- Pero papá, si es nuestro equipo, y además son estrellas del fútbol mundial.
- ¡Sí, estrellas para cobrar y para irse de juerga por la noche, pero luego no dan un palo al agua! ¡¡Fiiiiiiiii!!
- ¡Pero si son muy buenos, y además hemos traído a un entrenador que ha ganado muchos títulos!
- ¿Ese? ¡El más golfo de todos! ¡Menudo amarrategui está hecho! ¡Hoy venía una encuesta en el Marca que le rechazaba el 65% de la afición!
- ¿Han hecho una encuesta aquí en el estadio?
- No sé, hijo. ¡¡Y encima no ha puesto a Fulánez, Mengánez y Zutánez!!
- Pero papá, es que Fulánez lleva siete años en el equipo y nunca consigue ser titular, y Mengánez y Zutánez sólo han jugado en el Castilla y nadie sabe cómo serán-, responde inocentemente Toñín, olvidándose de la declarada debilidad de su padrepor Fulánez.
- ¡Claro, si no les dan oportunidades cómo van a asentarse en el equipo!
Los pitos descentran aún más al Madrid, y se llega al descanso sin goles en el marcador. Los silbidos se hacen aún más intensos y acompañan a los jugadores en su camino hacia el vestuario. Padre e hijo salen a los pasillos del estadio, en obras desde hace 25 temporadas. Juan mastica el bocadillo de calamares que le ha preparado su mujer, y mientras esquiva una gotera del techo farfulla: "¡Como no salga Fulánez me voy a cagar en todo!" Toñín camina junto a su padre con su bocata de choped. Mientras esquiva unos sacos de cemento que andan por ahí tirados, piensa que esto de ver el fútbol en directo es algo complicado.
Empieza la segunda parte y ambos vuelven a su asiento. A Juan aún le queda una buena reserva de pipas. Se llega al minuto 15 y el equipo aún no ha conseguido reaccionar. Vuelven a escucharse algunos silbidos. El entrenador decide realizar algunos cambios. Entran Fulánez, el ídolo de Juan, y Perengánez, jugador llegado esta temporada que ha destacado en un equipo pequeño y sobre el que existen dudas de que tenga suficiente categoría para jugar en el Madrid.
Parece que los cambios han calmado los ánimos. El equipo empieza a funcionar mejor y el juego parece más hilado. Se crea alguna ocasión de peligro. "Claro, jugando con Fulánez...", dice Juan. No obstante, en un momento dado se falla un pase fácil en el centro del campo. Instantes después, un jugador madridista no llega a un balón por escasos centímetros y la pelota sale fuera. Entonces empieza un auténtico concierto de pitos. El estadio es un clamor: "¡¡¡Fueeeera, fueeera, fueeeera!!!"
- Papá, así creo que no ganamos.
Juan está fuera de sí. "¡¡Si es que una vergüenza!! ¡Todos los partidos igual! ¡Me cago en sus muertos! ¡¡Desgraciaaaaaos!!"
Sigue el juego y Fulánez, en posesión de la pelota, da un pase a media distancia, sin demasiada importancia para el juego.
- ¡¡Mírale!! ¡El único que vale!-, grita Juan.
La pelota llega a Perengánez, el del equipo modesto, que intenta un atrevido regate cerca de la esquina del campo. Desgraciadamente no le sale bien y el balón se va por la línea de fondo. Los pitidos se hacen ensordecedores.
- ¡Pero cómo puede jugar ese mierda! ¡¡Vuélvete a tu puebloooo!!
- Pero papá, si ha entrado hace cinco minutos, y al menos lo está intentando.
- ¡Que no, hombre, que no! ¡Que ese tío no vale para el Madrid! ¡Que yo he visto jugar a Santillana, A Stielike, a Míchel y a Laudrup!
- Papá, y a ese de ahí que corre tanto y que no ha hecho nada en todo el partido, ¿por qué no le pita nadie?
- Caray, hijo, es que ese es el capitán. ¡El símbolo del equipo! Y mira qué lucha, qué entrega. Mira, mira cómo va detrás de ese balón que va a salirse del campo. Además, lleva tropecientos partidos con la selección. ¡De lo mejor que tenemos!
- Pero papá, si ese jugador lleva tres años sin hacer casi nada, ¿no? En mi cole nadie lleva su camiseta, y cuando jugamos en el patio nadie se lo pide.
- Naaaa, aunque parezca que esté mal ese cuando menos te lo esperas aparece. ¡Es el más listo de la clase!
El partido sigue avanzando, con los pitidos yendo y viniendo. Un jugador del Madrid agarra claramente a un contrario cerca del área y el árbitro le saca tarjeta amarilla. Los pitidos se hacen más fuertes, pero esta vez dirigidos al árbitro. "¡Hijo de perraaaaa! ¡Me cago en tu madreeeeee!", se desgañita Juan. Toñín cada vez entiende menos.
A falta de diez minutos para el final, el Madrid logra engarzar una buena jugada y por fin marca. Toñín duda un instante cuál debe ser su reacción, pero no caben muchas dudas: el estadio estalla de júbilo.
- ¡¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOL!!!
Juan pega botes y grita como un loco, y Toñín se une a su alegría. Tras el tanto, el Madrid empieza a jugar con mucha más fluidez y a dominar claramente a su rival. Se extienden los gritos por la grada, que esta vez sí anima como un solo hombre: "¡Hale Real Madrid, hale haleeeee!" "¡Madrid! ¡Madrid!"
- Papá, ¿por qué animan ahora y antes no?
- ¡Hombre, es que ahora juegan como Dios manda!
Llega el final del partido, y el estadio prorrumpe en aplausos. Finalmente la cosa ha acabado bien. Padre e hijo, esquivando unos cuantos escombros que se encuentran por los pasillos, se dirigen a la salida. Juan parece bastante animado.
- No ha estado mal el partidito. ¡Porque ha sacado a Fulánez, que si no...! ¡Ahora, como no espabilen la semana que viene se van a cagar estos hijos de puta!
Toñín está pensativo nuevamente. Está contento por la victoria de su equipo, sin duda, pero no ha acabado de entender la experiencia recién vivida. Si supiera que a su padre le pasó lo mismo la primera vez que fue al campo estaría más tranquilo. Pero bueno, al fin y al cabo, piensa Toñín, es el Santiago Bernabéu, y esta es la afición más entendida del mundo. No debe ser tan fácil convertirse en un experto del fútbol. Para ir desentrañando todos estos secretos, la próxima vez seguramente animará menos y comerá más pipas.
Publicado por El Socio en 4:01 AM
Rokzo escribió:capellista escribió:Historia de un pipero:Estadio Santiago Bernabéu, un domingo cualquiera. Las mocitas madrileñas van alegres y risueñas porque juega su Madrid. Junto a las mocitas llega al estadio un hombre acompañado de su hijo: Juan Pípez, de unos cuarenta años, lleva siendo socio literalmente toda la vida, cuando su padre le sacó el carnet con ocasión de su bautizo. También él ha inscrito hace poco a su hijo Toñín, de diez años, y le lleva por primera vez al fútbol. El niño abre los ojos asombrado ante el sublime espectáculo de los anillos de gradas uno encima del otro, que van llenándose de gente poco a poco.
- ¡Hala, papáaa, qué grande!
- Sí, hijo, muy bonito.
Para Juan no es un espectáculo tan grande, claro. Empezó a venir teniendo unos ocho años y su asiento de abono ya es para él casi como el sillón de su casa: un lugar familiar, rutinario; casi tiene marcada la huella de su culo. Antes de ocupar las localidades, padre e hijo cumplen con el ritual obligatorio: Comprar los refrescos y, sobre todo, las pipas, una enorme bolsa de pipas. No son de la marca Facundo, la favorita de Juan, pero le servirán.
- Papá, ¿por qué compras una tan grande?
- Sirven pa echar el rato.
- ¡Pero papá, si vamos a ver nada menos que al Madrid!
- Sí, bueno, pero mientras no pasa nada...
El partido es contra un equipo de mitad de la tabla, en teoría un rival bastante asequible para el Madrid. Da comienzo el encuentro. En las gradas reina el silencio más absoluto, sólo roto por el "cric cric" de las pipas de Juan y de muchos otros socios que le rodean, y por los gritos de un grupo de mozalbetes con pancartas alojados en el lejano fondo sur. Toñín está algo extrañado.
- Papá, ¿por qué nadie anima?
- Verás, hijo, es que esto es el Bernabéu: Aquí la gente es muy entendida y viene a disfrutar del espectáculo, no a dar gritos.
En ese momento el árbrito pita una falta algo dudosa en contra del Madrid. Juan reacciona como un resorte:
- ¡¡Arbitro, cabrón, hijo de la gran putaaaaaa!!- exclama, mientras esputa algunas cáscaras de pipas. El niño se queda desconcertado.
- Bueno, papá, pero yo puedo animar, ¿no?
- Sí, hijo, anima lo que quieras.
Dicho y hecho, Toñín empieza a arengar a sus ídolos con gritos entusiastas. Alguno de los socios de las cercanías le mira de reojo con cierto desdén, mientras sigue masticando sus pipas. Pero no son sólo pipas lo que se consume en la grada: Algunos socios, más viejos que Juan, llevan un enorme puro entre sus labios. Éste degusta un bocadillo de chorizo; aquel una bota de vino. Otros no llevan nada: Sólo observan el partido con aire indiferente (menos cuando el árbitro pita en contra). Dan la impresión, sobre todo los más mayores, de llevar allí años, muchos años, casi desde que Don Santiago fundara el estadio, y de que en algún momento se quedaron congelados en el tiempo, en una de tantas temporadas.
Van pasando los minutos y el Madrid no consigue marcar ni imponerse claramente en el juego. El contrario se está resistiendo.
- Papá, parece que les cuesta marcar.
- Si es que son unos golfos, joder, no meterle ninguno a esta mierda de equipo.
- Tendríamos que animarles a ver si juegan mejor, ¿no?
- Sí, bueno... ¡Es que con la mierda de partido que están haciendo se te quitan las ganas de animar, coño!
Llega el minuto 30 de la primera parte y aún no hay goles. Desde algún punto de la grada se escuchan unos silbidos, que pronto se amplifican y se extienden por todo el estadio.
- Ah, ahora silbamos al otro equipo para ponerles nerviosos, ¿verdad?
- Qué va, hijo, estamos pitando a los nuestros, que son unos inútiles. ¡¡Golfos!! ¡Sinvergüenzas!
- Pero papá, si es nuestro equipo, y además son estrellas del fútbol mundial.
- ¡Sí, estrellas para cobrar y para irse de juerga por la noche, pero luego no dan un palo al agua! ¡¡Fiiiiiiiii!!
- ¡Pero si son muy buenos, y además hemos traído a un entrenador que ha ganado muchos títulos!
- ¿Ese? ¡El más golfo de todos! ¡Menudo amarrategui está hecho! ¡Hoy venía una encuesta en el Marca que le rechazaba el 65% de la afición!
- ¿Han hecho una encuesta aquí en el estadio?
- No sé, hijo. ¡¡Y encima no ha puesto a Fulánez, Mengánez y Zutánez!!
- Pero papá, es que Fulánez lleva siete años en el equipo y nunca consigue ser titular, y Mengánez y Zutánez sólo han jugado en el Castilla y nadie sabe cómo serán-, responde inocentemente Toñín, olvidándose de la declarada debilidad de su padrepor Fulánez.
- ¡Claro, si no les dan oportunidades cómo van a asentarse en el equipo!
Los pitos descentran aún más al Madrid, y se llega al descanso sin goles en el marcador. Los silbidos se hacen aún más intensos y acompañan a los jugadores en su camino hacia el vestuario. Padre e hijo salen a los pasillos del estadio, en obras desde hace 25 temporadas. Juan mastica el bocadillo de calamares que le ha preparado su mujer, y mientras esquiva una gotera del techo farfulla: "¡Como no salga Fulánez me voy a cagar en todo!" Toñín camina junto a su padre con su bocata de choped. Mientras esquiva unos sacos de cemento que andan por ahí tirados, piensa que esto de ver el fútbol en directo es algo complicado.
Empieza la segunda parte y ambos vuelven a su asiento. A Juan aún le queda una buena reserva de pipas. Se llega al minuto 15 y el equipo aún no ha conseguido reaccionar. Vuelven a escucharse algunos silbidos. El entrenador decide realizar algunos cambios. Entran Fulánez, el ídolo de Juan, y Perengánez, jugador llegado esta temporada que ha destacado en un equipo pequeño y sobre el que existen dudas de que tenga suficiente categoría para jugar en el Madrid.
Parece que los cambios han calmado los ánimos. El equipo empieza a funcionar mejor y el juego parece más hilado. Se crea alguna ocasión de peligro. "Claro, jugando con Fulánez...", dice Juan. No obstante, en un momento dado se falla un pase fácil en el centro del campo. Instantes después, un jugador madridista no llega a un balón por escasos centímetros y la pelota sale fuera. Entonces empieza un auténtico concierto de pitos. El estadio es un clamor: "¡¡¡Fueeeera, fueeera, fueeeera!!!"
- Papá, así creo que no ganamos.
Juan está fuera de sí. "¡¡Si es que una vergüenza!! ¡Todos los partidos igual! ¡Me cago en sus muertos! ¡¡Desgraciaaaaaos!!"
Sigue el juego y Fulánez, en posesión de la pelota, da un pase a media distancia, sin demasiada importancia para el juego.
- ¡¡Mírale!! ¡El único que vale!-, grita Juan.
La pelota llega a Perengánez, el del equipo modesto, que intenta un atrevido regate cerca de la esquina del campo. Desgraciadamente no le sale bien y el balón se va por la línea de fondo. Los pitidos se hacen ensordecedores.
- ¡Pero cómo puede jugar ese mierda! ¡¡Vuélvete a tu puebloooo!!
- Pero papá, si ha entrado hace cinco minutos, y al menos lo está intentando.
- ¡Que no, hombre, que no! ¡Que ese tío no vale para el Madrid! ¡Que yo he visto jugar a Santillana, A Stielike, a Míchel y a Laudrup!
- Papá, y a ese de ahí que corre tanto y que no ha hecho nada en todo el partido, ¿por qué no le pita nadie?
- Caray, hijo, es que ese es el capitán. ¡El símbolo del equipo! Y mira qué lucha, qué entrega. Mira, mira cómo va detrás de ese balón que va a salirse del campo. Además, lleva tropecientos partidos con la selección. ¡De lo mejor que tenemos!
- Pero papá, si ese jugador lleva tres años sin hacer casi nada, ¿no? En mi cole nadie lleva su camiseta, y cuando jugamos en el patio nadie se lo pide.
- Naaaa, aunque parezca que esté mal ese cuando menos te lo esperas aparece. ¡Es el más listo de la clase!
El partido sigue avanzando, con los pitidos yendo y viniendo. Un jugador del Madrid agarra claramente a un contrario cerca del área y el árbitro le saca tarjeta amarilla. Los pitidos se hacen más fuertes, pero esta vez dirigidos al árbitro. "¡Hijo de perraaaaa! ¡Me cago en tu madreeeeee!", se desgañita Juan. Toñín cada vez entiende menos.
A falta de diez minutos para el final, el Madrid logra engarzar una buena jugada y por fin marca. Toñín duda un instante cuál debe ser su reacción, pero no caben muchas dudas: el estadio estalla de júbilo.
- ¡¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOL!!!
Juan pega botes y grita como un loco, y Toñín se une a su alegría. Tras el tanto, el Madrid empieza a jugar con mucha más fluidez y a dominar claramente a su rival. Se extienden los gritos por la grada, que esta vez sí anima como un solo hombre: "¡Hale Real Madrid, hale haleeeee!" "¡Madrid! ¡Madrid!"
- Papá, ¿por qué animan ahora y antes no?
- ¡Hombre, es que ahora juegan como Dios manda!
Llega el final del partido, y el estadio prorrumpe en aplausos. Finalmente la cosa ha acabado bien. Padre e hijo, esquivando unos cuantos escombros que se encuentran por los pasillos, se dirigen a la salida. Juan parece bastante animado.
- No ha estado mal el partidito. ¡Porque ha sacado a Fulánez, que si no...! ¡Ahora, como no espabilen la semana que viene se van a cagar estos hijos de puta!
Toñín está pensativo nuevamente. Está contento por la victoria de su equipo, sin duda, pero no ha acabado de entender la experiencia recién vivida. Si supiera que a su padre le pasó lo mismo la primera vez que fue al campo estaría más tranquilo. Pero bueno, al fin y al cabo, piensa Toñín, es el Santiago Bernabéu, y esta es la afición más entendida del mundo. No debe ser tan fácil convertirse en un experto del fútbol. Para ir desentrañando todos estos secretos, la próxima vez seguramente animará menos y comerá más pipas.
Publicado por El Socio en 4:01 AM
Joe, nunca lo había leído, buenísimo xDDD
mi_novia_PS2 escribió:Aqui ni robos, ni ayudas; simplemente errores arbitrales... El R.Madrid de Mou empezó todo este tema de los robos; y ahora cuando se ven favorecidos, ninguno dice nada. Si estais primeros es por mérito vuestro, pero aqui hay un par de puntos que ya me gustaría a mi que fuesen solo fruto de la calidad futbolística del Madrid.
Si la liga la gana el Madrid, que seguramente si, será "justamente". Pero lo mas feo de todo es que los fundadores del tema de los robos y sus subditos (aficionados) solo se defiendan con: "ellos no hablaban de los árbitros y ahora si" y no diciendo las 4 verdades que antes veían y ahora, casualmente, no.
Y digo algo; poco hablan los que tienen que hablar (técnicos y jugadores del Barça). En comparación con lo que se rajó en su momento, somos unos santos.
Y creedme; este Barça ha demostrado en los terrenos de juego la superioridad tan grande que ha tenido en los últimos 3 años. Que hemos tenido errores arbitrales a favor? Pues si... Pero nosotros demostramos ante el mundo entero que eramos realmente buenos. Ehh... Y mientras otros solo hablaban y hablaban, sin demostrar nada.
Dongoros escribió:Hablando de piperos....
YO prefiero que me de vergüenza la afición del Madrid (piperos) por callados a pasar otra vez por una vergüenza similar como madridista.
http://www.youtube.com/watch?v=PgP1mM8oQwE
Algunos veis el fútbol en el mismo estadio y otros con treintitantos soñamos con poder ver 1 partido del madrid en la vida.
Y no lo digo por nadie, pero ciertamente los piperos dan vergüenza (y el marca más)
eddy escribió:Me gustaria decir algo sobre los q llamais,"los piperos" tan despreciativamente,es muy bonito ver el partidito en casa,via streaming o por la tele de pago y criticar al pubico,q si,q soy el primero q reconoce q es bastante frio normalmente,pero m parece q se merecen algo mas de respeto por vuestra parte,no olvideis q son los dueños del club,ya q son los socios y abonados q mantienen el club q tanto nos apasiona,gastandose ese pastizal en ir cada fin de semana a ver al ekipo,y m parece aun mas meritorio en estos durisimos tiempos de crisis.Mal vamos,si empezamos a dividirnos dentro del club,descalificandonos entre nosotros,todos somos madridistas,cada uno con nuestras ideas,si,pero si no estamos unidos,seremos mas debiles.Dicho esto....
A 13.......AMUNT VALENCIA?
Buscavidas escribió:
¿Alguien me da alguna razón para tener fé hoy contra el Barça?
Sanchez escribió:Por lo que veo,Relaño se hace el tonto y no dice nada de la cagada de ayer en su columna,sobre el tema del Lateral derecho,eso si,hoy dice que es el mejor Madrid que a visto en su vida,que asco de pavo
Paul_Gilbert escribió:eddy escribió:Me gustaria decir algo sobre los q llamais,"los piperos" tan despreciativamente,es muy bonito ver el partidito en casa,via streaming o por la tele de pago y criticar al pubico,q si,q soy el primero q reconoce q es bastante frio normalmente,pero m parece q se merecen algo mas de respeto por vuestra parte,no olvideis q son los dueños del club,ya q son los socios y abonados q mantienen el club q tanto nos apasiona,gastandose ese pastizal en ir cada fin de semana a ver al ekipo,y m parece aun mas meritorio en estos durisimos tiempos de crisis.Mal vamos,si empezamos a dividirnos dentro del club,descalificandonos entre nosotros,todos somos madridistas,cada uno con nuestras ideas,si,pero si no estamos unidos,seremos mas debiles.Dicho esto....
A 13.......AMUNT VALENCIA?
Los que vemos la tele de pago también mantenemos al club, que los ciento y pico millones anuales por mediapro vienen de ahí, y los que se compran las camisetas del club también lo mantienen, y los que lo ven por streaming también lo mantienen por su pijama oficial del Madrid, etc. Si solo tuviera que vivir de las taquillas no fichábamos ni a Oleguer.Buscavidas escribió:
¿Alguien me da alguna razón para tener fé hoy contra el Barça?
El último choque de liga regular que ganamos.
Paul_Gilbert escribió:Todo el erchandising oficial son ingresos, aunque sean pocos, todo suma y si llevas el pijama oficial del Madrid pues también ayudas, o si tienes tazas, llaveros, gorras, camisetas, prendas deportivas, etc
A los que ven el partido por streaming se les llama pijameros por ello, por verlo con el típico pijama o alpargatas del Real Madrid
Xcierto, yo lo tengo jijijiiji.
Segun As, la nueva segunda equipación de España:
Todo sea porque Esparça no vista de blanco
domingo
19 de Febrero 12:00 GRANADA - REAL SOCIEDAD 1ª División
C+ Liga 2 / PPV / Abono Fútbol
domingo
19 de Febrero 12:00 ELCHE - CELTA 2ª División
Canal + 1 / Canal + 1 HD
domingo
19 de Febrero 12:00 LA RODA - REAL OVIEDO 2ª División B Grupo I
CMT / TPA
domingo
19 de Febrero 12:00 RM CASTILLA - MONTAÑEROS 2ª División B Grupo I
RMTV / La Otra / Marca TV
domingo
19 de Febrero 12:00 L´HOSPITALET - TERUEL 2ª División B Grupo III
Aragón TV
domingo
19 de Febrero 12:00 SANT ANDREU - MALLORCA B 2ª División B Grupo III
IB3 / IB3 Internacional
domingo
19 de Febrero 12:00 EXTREMADURA UD - DON BENITO 3ª División Grupo XIV
Canal Extremadura
domingo
19 de Febrero 12:30 CELTA B - VECINDARIO 2ª División B Grupo I
tvG2 / TVC
domingo
19 de Febrero 12:30 GRONINGEN - PSV EINDHOVEN Liga holandesa
C+ Fútbol / C+ Fútbol HD
domingo
19 de Febrero 14:30 UTRECHT - AZ ALKMAAR Liga holandesa
Canal + Fútbol 3
domingo
19 de Febrero 15:00 STEVENAGE - TOTTENHAM FA Cup (1/8 de Final)
Canal + Fútbol 4
domingo
19 de Febrero 15:00 CESENA - AC MILAN Serie A
C+ Fútbol / C+ Fútbol HD
domingo
19 de Febrero 15:00 AS ROMA - PARMA Serie A
Canal + Fútbol 2
domingo
19 de Febrero 15:30 SCHALKE 04 - WOLFSBURG Bundesliga
Sportmanía
domingo
19 de Febrero 16:00 ATHLETIC - MÁLAGA 1ª División
Gol T / C+ Liga
domingo
19 de Febrero 16:00 SEVILLA - GRANADA 2ª División Femenina Gr. 4
Sevilla FC TV
domingo
19 de Febrero 17:00 LUGO - ALCALÁ 2ª División B Grupo I
tvG2 / La Otra / TM Sat
domingo
19 de Febrero 17:00 ORIHUELA - OLÍMPIC 2ª División B Grupo III
Canal Nou 2
domingo
19 de Febrero 17:30 HANNOVER 96 - STUTTGART Bundesliga
Canal + Fútbol 2
domingo
19 de Febrero 17:30 LIVERPOOL - BRIGHTON FA Cup (1/8 de Final)
C+ Fútbol / C+ Fútbol HD
domingo
19 de Febrero 18:00 SPORTING - ATLÉTICO MADRID 1ª División
Gol T / C+ Liga
domingo
19 de Febrero 18:00 MALLORCA - VILLARREAL 1ª División
C+ Liga 2 / PPV / Abono Fútbol
domingo
19 de Febrero 19:00 TOLUCA - JAGUARES CHIAPAS Clausura
Canal Estrellas
domingo
19 de Febrero 19:15 VITORIA SETÚBAL - PORTO Liga portuguesa
RTPI
domingo
19 de Febrero 19:45 LEVANTE - RAYO VALLECANO 1ª División
C+ Liga 2 / PPV / Abono Fútbol
domingo
19 de Febrero 19:45 RECREATIVO - HÉRCULES 2ª División
Gol T / C+ Liga
domingo
19 de Febrero 20:45 PALERMO - LAZIO Serie A
Sportmanía
domingo
19 de Febrero 20:45 UDINESE - CAGLIARI Serie A
C+ Fútbol / C+ Fútbol HD
domingo
19 de Febrero 21:00 SAN LORENZO - ESTUDIANTES Clausura
Canal + Fútbol 2
domingo
19 de Febrero 21:30 BARCELONA - VALENCIA 1ª División
Canal + 1 / Canal + 1 HD
domingo
19 de Febrero 23:00 CLUB AMÉRICA - PACHUCA Clausura
Canal Estrellas
domingo
19 de Febrero 23:10 GODOY CRUZ - RACING AVELLANEDA Clausura
Sportmanía
domingo
19 de Febrero 23:10 UNIÓN SANTA FE - BOCA JUNIORS Clausura
C+ Fútbol / C+ Fútbol HD
mglon escribió:http://www.sport.es/es/noticias/liga-bbva/los-arbitros-hacen-posible-por-adelantar-aliron-blanco-1428501
Los árbitros hacen lo posible por adelantar el alirón blanco
Veltex escribió:mglon escribió:http://www.sport.es/es/noticias/liga-bbva/los-arbitros-hacen-posible-por-adelantar-aliron-blanco-1428501
Los árbitros hacen lo posible por adelantar el alirón blanco
A eso hay que sumarle esto: http://www.sport.es/es/noticias/joan-pi ... on-1428242
"Mourinho es un sinvergüenza de tomo y lomo, un descarado manipulador [...] Esta Liga da asco. Que se la metan donde les da placer".
¿Esto no es llorar?
No entiendo cómo no les puede dar vergüenza. Su fanatismo es de locos.
supermario escribió:Paul_Gilbert escribió:Todo el erchandising oficial son ingresos, aunque sean pocos, todo suma y si llevas el pijama oficial del Madrid pues también ayudas, o si tienes tazas, llaveros, gorras, camisetas, prendas deportivas, etc
A los que ven el partido por streaming se les llama pijameros por ello, por verlo con el típico pijama o alpargatas del Real Madrid
Xcierto, yo lo tengo jijijiiji.
Segun As, la nueva segunda equipación de España:
Todo sea porque Esparça no vista de blanco
Menos mal que los tienen en cuenta. Despues del partido contra Chile, a Puyol le salieron sarpullidos en los huevos por llevar pantalones y calzoncillos blancos. Lo dijo en la entrevista post-partido.
capellista escribió:Historia de un pipero:Estadio Santiago Bernabéu, un domingo cualquiera. Las mocitas madrileñas van alegres y risueñas porque juega su Madrid. Junto a las mocitas llega al estadio un hombre acompañado de su hijo: Juan Pípez, de unos cuarenta años, lleva siendo socio literalmente toda la vida, cuando su padre le sacó el carnet con ocasión de su bautizo. También él ha inscrito hace poco a su hijo Toñín, de diez años, y le lleva por primera vez al fútbol. El niño abre los ojos asombrado ante el sublime espectáculo de los anillos de gradas uno encima del otro, que van llenándose de gente poco a poco.
- ¡Hala, papáaa, qué grande!
- Sí, hijo, muy bonito.
Para Juan no es un espectáculo tan grande, claro. Empezó a venir teniendo unos ocho años y su asiento de abono ya es para él casi como el sillón de su casa: un lugar familiar, rutinario; casi tiene marcada la huella de su culo. Antes de ocupar las localidades, padre e hijo cumplen con el ritual obligatorio: Comprar los refrescos y, sobre todo, las pipas, una enorme bolsa de pipas. No son de la marca Facundo, la favorita de Juan, pero le servirán.
- Papá, ¿por qué compras una tan grande?
- Sirven pa echar el rato.
- ¡Pero papá, si vamos a ver nada menos que al Madrid!
- Sí, bueno, pero mientras no pasa nada...
El partido es contra un equipo de mitad de la tabla, en teoría un rival bastante asequible para el Madrid. Da comienzo el encuentro. En las gradas reina el silencio más absoluto, sólo roto por el "cric cric" de las pipas de Juan y de muchos otros socios que le rodean, y por los gritos de un grupo de mozalbetes con pancartas alojados en el lejano fondo sur. Toñín está algo extrañado.
- Papá, ¿por qué nadie anima?
- Verás, hijo, es que esto es el Bernabéu: Aquí la gente es muy entendida y viene a disfrutar del espectáculo, no a dar gritos.
En ese momento el árbrito pita una falta algo dudosa en contra del Madrid. Juan reacciona como un resorte:
- ¡¡Arbitro, cabrón, hijo de la gran putaaaaaa!!- exclama, mientras esputa algunas cáscaras de pipas. El niño se queda desconcertado.
- Bueno, papá, pero yo puedo animar, ¿no?
- Sí, hijo, anima lo que quieras.
Dicho y hecho, Toñín empieza a arengar a sus ídolos con gritos entusiastas. Alguno de los socios de las cercanías le mira de reojo con cierto desdén, mientras sigue masticando sus pipas. Pero no son sólo pipas lo que se consume en la grada: Algunos socios, más viejos que Juan, llevan un enorme puro entre sus labios. Éste degusta un bocadillo de chorizo; aquel una bota de vino. Otros no llevan nada: Sólo observan el partido con aire indiferente (menos cuando el árbitro pita en contra). Dan la impresión, sobre todo los más mayores, de llevar allí años, muchos años, casi desde que Don Santiago fundara el estadio, y de que en algún momento se quedaron congelados en el tiempo, en una de tantas temporadas.
Van pasando los minutos y el Madrid no consigue marcar ni imponerse claramente en el juego. El contrario se está resistiendo.
- Papá, parece que les cuesta marcar.
- Si es que son unos golfos, joder, no meterle ninguno a esta mierda de equipo.
- Tendríamos que animarles a ver si juegan mejor, ¿no?
- Sí, bueno... ¡Es que con la mierda de partido que están haciendo se te quitan las ganas de animar, coño!
Llega el minuto 30 de la primera parte y aún no hay goles. Desde algún punto de la grada se escuchan unos silbidos, que pronto se amplifican y se extienden por todo el estadio.
- Ah, ahora silbamos al otro equipo para ponerles nerviosos, ¿verdad?
- Qué va, hijo, estamos pitando a los nuestros, que son unos inútiles. ¡¡Golfos!! ¡Sinvergüenzas!
- Pero papá, si es nuestro equipo, y además son estrellas del fútbol mundial.
- ¡Sí, estrellas para cobrar y para irse de juerga por la noche, pero luego no dan un palo al agua! ¡¡Fiiiiiiiii!!
- ¡Pero si son muy buenos, y además hemos traído a un entrenador que ha ganado muchos títulos!
- ¿Ese? ¡El más golfo de todos! ¡Menudo amarrategui está hecho! ¡Hoy venía una encuesta en el Marca que le rechazaba el 65% de la afición!
- ¿Han hecho una encuesta aquí en el estadio?
- No sé, hijo. ¡¡Y encima no ha puesto a Fulánez, Mengánez y Zutánez!!
- Pero papá, es que Fulánez lleva siete años en el equipo y nunca consigue ser titular, y Mengánez y Zutánez sólo han jugado en el Castilla y nadie sabe cómo serán-, responde inocentemente Toñín, olvidándose de la declarada debilidad de su padrepor Fulánez.
- ¡Claro, si no les dan oportunidades cómo van a asentarse en el equipo!
Los pitos descentran aún más al Madrid, y se llega al descanso sin goles en el marcador. Los silbidos se hacen aún más intensos y acompañan a los jugadores en su camino hacia el vestuario. Padre e hijo salen a los pasillos del estadio, en obras desde hace 25 temporadas. Juan mastica el bocadillo de calamares que le ha preparado su mujer, y mientras esquiva una gotera del techo farfulla: "¡Como no salga Fulánez me voy a cagar en todo!" Toñín camina junto a su padre con su bocata de choped. Mientras esquiva unos sacos de cemento que andan por ahí tirados, piensa que esto de ver el fútbol en directo es algo complicado.
Empieza la segunda parte y ambos vuelven a su asiento. A Juan aún le queda una buena reserva de pipas. Se llega al minuto 15 y el equipo aún no ha conseguido reaccionar. Vuelven a escucharse algunos silbidos. El entrenador decide realizar algunos cambios. Entran Fulánez, el ídolo de Juan, y Perengánez, jugador llegado esta temporada que ha destacado en un equipo pequeño y sobre el que existen dudas de que tenga suficiente categoría para jugar en el Madrid.
Parece que los cambios han calmado los ánimos. El equipo empieza a funcionar mejor y el juego parece más hilado. Se crea alguna ocasión de peligro. "Claro, jugando con Fulánez...", dice Juan. No obstante, en un momento dado se falla un pase fácil en el centro del campo. Instantes después, un jugador madridista no llega a un balón por escasos centímetros y la pelota sale fuera. Entonces empieza un auténtico concierto de pitos. El estadio es un clamor: "¡¡¡Fueeeera, fueeera, fueeeera!!!"
- Papá, así creo que no ganamos.
Juan está fuera de sí. "¡¡Si es que una vergüenza!! ¡Todos los partidos igual! ¡Me cago en sus muertos! ¡¡Desgraciaaaaaos!!"
Sigue el juego y Fulánez, en posesión de la pelota, da un pase a media distancia, sin demasiada importancia para el juego.
- ¡¡Mírale!! ¡El único que vale!-, grita Juan.
La pelota llega a Perengánez, el del equipo modesto, que intenta un atrevido regate cerca de la esquina del campo. Desgraciadamente no le sale bien y el balón se va por la línea de fondo. Los pitidos se hacen ensordecedores.
- ¡Pero cómo puede jugar ese mierda! ¡¡Vuélvete a tu puebloooo!!
- Pero papá, si ha entrado hace cinco minutos, y al menos lo está intentando.
- ¡Que no, hombre, que no! ¡Que ese tío no vale para el Madrid! ¡Que yo he visto jugar a Santillana, A Stielike, a Míchel y a Laudrup!
- Papá, y a ese de ahí que corre tanto y que no ha hecho nada en todo el partido, ¿por qué no le pita nadie?
- Caray, hijo, es que ese es el capitán. ¡El símbolo del equipo! Y mira qué lucha, qué entrega. Mira, mira cómo va detrás de ese balón que va a salirse del campo. Además, lleva tropecientos partidos con la selección. ¡De lo mejor que tenemos!
- Pero papá, si ese jugador lleva tres años sin hacer casi nada, ¿no? En mi cole nadie lleva su camiseta, y cuando jugamos en el patio nadie se lo pide.
- Naaaa, aunque parezca que esté mal ese cuando menos te lo esperas aparece. ¡Es el más listo de la clase!
El partido sigue avanzando, con los pitidos yendo y viniendo. Un jugador del Madrid agarra claramente a un contrario cerca del área y el árbitro le saca tarjeta amarilla. Los pitidos se hacen más fuertes, pero esta vez dirigidos al árbitro. "¡Hijo de perraaaaa! ¡Me cago en tu madreeeeee!", se desgañita Juan. Toñín cada vez entiende menos.
A falta de diez minutos para el final, el Madrid logra engarzar una buena jugada y por fin marca. Toñín duda un instante cuál debe ser su reacción, pero no caben muchas dudas: el estadio estalla de júbilo.
- ¡¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOL!!!
Juan pega botes y grita como un loco, y Toñín se une a su alegría. Tras el tanto, el Madrid empieza a jugar con mucha más fluidez y a dominar claramente a su rival. Se extienden los gritos por la grada, que esta vez sí anima como un solo hombre: "¡Hale Real Madrid, hale haleeeee!" "¡Madrid! ¡Madrid!"
- Papá, ¿por qué animan ahora y antes no?
- ¡Hombre, es que ahora juegan como Dios manda!
Llega el final del partido, y el estadio prorrumpe en aplausos. Finalmente la cosa ha acabado bien. Padre e hijo, esquivando unos cuantos escombros que se encuentran por los pasillos, se dirigen a la salida. Juan parece bastante animado.
- No ha estado mal el partidito. ¡Porque ha sacado a Fulánez, que si no...! ¡Ahora, como no espabilen la semana que viene se van a cagar estos hijos de puta!
Toñín está pensativo nuevamente. Está contento por la victoria de su equipo, sin duda, pero no ha acabado de entender la experiencia recién vivida. Si supiera que a su padre le pasó lo mismo la primera vez que fue al campo estaría más tranquilo. Pero bueno, al fin y al cabo, piensa Toñín, es el Santiago Bernabéu, y esta es la afición más entendida del mundo. No debe ser tan fácil convertirse en un experto del fútbol. Para ir desentrañando todos estos secretos, la próxima vez seguramente animará menos y comerá más pipas.
Publicado por El Socio en 4:01 AM
Falkiño escribió:Hay una duda que me corroe de siempre y es el porqué se contemporiza el reglamento. Quiero decir, si una acción es roja lo es en el minuto 1 y en el 90, no entiendo lo de "no sacó la roja porque era el minuto 10 y no quería cargarse/condicionar el partido/eliminatoria" ... Si es de tarjeta es de tarjeta y punto, las reglas no dicen que se pite a partir del minuto X.
Salu2!
Falkiño escribió:Hay una duda que me corroe de siempre y es el porqué se contemporiza el reglamento. Quiero decir, si una acción es roja lo es en el minuto 1 y en el 90, no entiendo lo de "no sacó la roja porque era el minuto 10 y no quería cargarse/condicionar el partido/eliminatoria" ... Si es de tarjeta es de tarjeta y punto, las reglas no dicen que se pite a partir del minuto X.