Lo de la ropa parece buena idea si no fuera por:
1. La talla. Salvo que tengas una suerte loca seguramente no aciertes con la talla (y no vale lo de "en la etiqueta pone 1 año").
2. Ellos ya tienen ropa. Todos los padres compran ropa suficiente a sus hijos, además los abuelos siempre se ocupan de traer más ropa a casa.
3. Gustos personales. Acertar con el gusto de los padres es como que te toque la lotería.
4. Los niños crecen muy rápido. Muchísima ropa de niño de esas edades se queda casi sin usar porque el crío crece a velocidad de vértigo. Así que si la ropa que les regales no les gusta mucho o ya tiene algo parecido seguro que ni la estrenan (o casi).
Lo del cheque-regalo de una tienda es sin duda lo más práctico del mundo, pero asegúrate de que es una tienda a la que suelen ir los padres o al menos que les pille muy cerca de casa. Otro tema es que salvo que tengas mucha confianza con ambos padres a uno de los dos (p.ej. a ella si sólo eres amigo de él) le puede parece un poco cutre... vamos que pueden pensar "este tío nos despacha con un cheque-regalo".
En cuanto a regalos pedagógicos, para esa edad suele ser buena idea los juegos de construcción-actividades. No importa mucho si lo coges para un poquito más mayores, así el crío lo usará más tiempo (si es un juguete muy tonto se aburrirá muy pronto). Asegúrate de que no tenga piezas pequeñas que se pueda tragar ni piezas que se puedan perder con facilidad. Olvídate de las cosas de madera: se rompen, sueltan pintura... muchísimo mejor el plástico de calidad. También es de agradecer que el juguete se guarde en sí mismo, vamos que todas sus piezas se metan dentro del propio juguete o que lleve una caja de plástico donde se guarde todo.
A esa edad ya andan con mayor o menor soltura. Mira a ver si los padres tienen algún tipo de juguete para actividades "de andar". Hay "triciclos" (por llamarlos algo) que sirven para que el crío pueda moverse con seguridad (ojo, que los andadores y similares les aburren un montón).
Otra opción es un buen muñeco con alguna actividad incorporada, pero que sea un muñeco "blando" y sobre todo lavable.
Por cierto, no te pases con el tamaño del juguete ni compres nada que obligue a quedarse con el envoltorio para guardarlo (la típica caja de carton enorme). En las casas no suele haber mucho sitio.