[EOL Viajero] Nueva Zelanda

Este verano hemos podido realizar uno de nuestros sueños, viajar a Nueva Zelanda. Han sido un total de 28 días de los cuales, 3 los hemos pasado en Seúl, 4 dentro de un avión, y 21 en ruta por Nueva Zelanda. Alquilamos una autocaravana y recorrimos las dos islas enteras con un total de 5070 Km.

Para saber los datos de Nueva Zelanda: http://es.wikipedia.org/wiki/Nueva_Zelanda

Empecemos por la isla Norte:
Aterrizamos en Auckland entre prados verdes y como no, con lluvia (El nombre Maori de Nueva Zelanda es Aotearoa, que quiere decir "tierra de la larga nube blanca", y efectivamente es así). Nos vamos directo a recoger nuestra caravana y partimos hacia el Northland. Allí contratamos una excursión que nos llevaría al Cape Reinga (el punto más al Norte) pasando por las dunas gigantes (de unos 160 mts. de altura) y la “90 Mile Beach”, playa de 90 millas completamente recta, y en que su punto más ancho tiene 6 millas, dicen que para llegar al agua has de andar 6 horas....

Cape Reinga:

Dunas Gigantes:


Volviendo hacia Auckland, paramos en el bosque de Waipoua, donde nos encontramos con el “Tane Mahuta” (el señor del bosque), el árbol más grande de Nueva Zelanda con 51 metros de altura y 14 de diametro y una edad de unos 1500 años, y el “Te Matua Ngahere” (El padre del bosque), con una edad de unos 2000 años

Tane Mahuta:


De Auckland únicamente la vimos de pasada, ya que una avería con la caravana nos hico perder casi un día, y como lo que queriamos ver era naturaleza, prescindimos de Auckland.

Auckland:


De Auckland fuimos a ver las Waitomo Caves, que deben su nombre a las luciérnagas que habitan en ellas, es impresionante ver la cueva iluminada con cientos de miles de luciérnagas en el techo (no se pueden hacer fotos).
Tras la visita nos dirigimos hacia Matamata, donde está la granja en la que se rodó Hobbiton de “el Señor de los Anillos”

Hobbiton:



De Hobbiton a Rotorua, situada en una zona volcánica y con gran influencia Maori. Sólo llegar a Rotorua se puede apreciar la gran actividad volcánica que hay y se empieza a ver fumarolas por todos los lados (incluso de las alcantarillas) y un olor a huevo duro (debido al sulfuro) que lo invade todo. Allí se puede visitar la aldea de Whakarewarewa, donde está habitada por Maoris que nos enseñan su cultura.

Maories:



A pocos kilómetros visitamos el área termal de Wai-o-Tapu. Hay tres posibles recorridos de 30', 45' y 75', pese a que nosotros dedicamos más de 4 horas sin cansarnos de admirar los colores y las formaciones. Algunos ejemplos son la Champagne pool (piscina de 60 m. de diámetro a 70º, llena de burbujitas y de color verde y naranja), Artist's Palette (terraza silícica que cambia de color según el nivel del agua), Primrose Terrace (terraza de cuarzo blanco y amarillo), Devil's Bath (cráter lleno de agua de color verde intenso por el arsénico que contiene)... Es una visita indispensable para hacerse una idea de la zona volcánica de Taupo.

Piscina de Champagne:

Lodo Hirviendo:

Geiser de Lady Knox:


Tras la interesante visitas continuamos nuestro camina hacia el parque nacional del Tongariro declarada patrimonio de la humanidad en 1990. Desde cualquier sitio se pueden admirar los tres volcanes activos, el Ruapehu de 2.797 m., el Ngauruhoe de 2.291 m. y el Tongariro de 1.968 m. Siempre y cuando las nubes te den permiso. El monte Ngauruhoe es el más conocido, ya que allí estaba Mordor. Allí nos levantamos pronto para realizar la Tongariro Crossing, que según los Neozelandeses es el mejor trekking de Nueva Zelanda de un dia. Andamos prácticamente solos, y la sensación de estar en la tierra de Mordor es increíble. Cuando llevamos 1 hora de camino y estábamos a punto de ascender a los lagos Esmeralda, empezó a nevar y tuvimos que volver.

Tongariro:


Acabada la visita al Tongariro emprendimos la ruta hacia Wellington, donde a la mañana siguiente teniamos que coger el Ferry que nos llevaria a la isla del sur.

Isla Sur:

El ferry nos deja en Picton sobre las 12 de la mañana y nos dirigimos hacia Havelock, la capital mundial del mejillón de labios verdes. Allí encontramos un restaurante dónde nos hartamos a comer mejillones cocinados de mil maneras. Con la barriga llena nos vamos hacia Kaikoura, al avistamiento de ballenas.
En Kaikoura nos encontramos con unos paisajes de ensueño: mar, praderas verdes, montañas nevadas...
contratamos una excursión que nos lleva a ver las ballenas, en total pudimos observar a 6, y jugar un rato con los delfines.

Ballenas:

Ballenas, en el fondo Kaikoura:


Dejamos la parte este de la isla y nos vamos a la West Coast, pasando por el Arthur Pass. Aquí me impresiona una cosa como aficionadillo a la meteorología, y es ver como las montañas de los Alpes frenan las nubes impidiendo que lleguen a la vertiente este. En poco menos de un par de Km. tenemos una zona seca en la que apenas caen 300-400 mm al año, a pasar a una zona increiblemente húmeda en la que caen cerca de 7000 mm al año.

El Arthur Pass:


Una vez pasado el Arthur Pass, nos dirigimos hacia Punakaki para observar las “Pancakes Rocks”:


y de allí a los glaciares Franz Joseph y Fox. Decidimos hacer un vuelo en helicóptero para poder observarlos desde arriba:



Pero al aterrizar, yo me quedo con ganas y decido contratar una excursión a pie por los glaciares. Es impresionante encontrarte con la cuevas de hielo que se forman, sentir como hielo cruje bajo tus pies en su avance, el silencio absoluto..........ufffffffff



Acabado el sueño de los glaciares, nos vamos hacia Fiordland, la zona de los fiordos. Allí recorremos la carretera más increíble que jamas hemos recorrido, son 120 Km desde Te Anau hasta el Milford Sound, llenas de cientos de cascadas, montañas verticales de más de 2000 mts, avalanchas a decenas......increible.
Al llegar cogemos el barco que nos dará un paseo por el fiordo. Nos encontramos con día esplendido, raro, ya que llueve más de 200 días al año, llueve tanto que en el mar hay una capa de unos 3 metros de agua dulce, ya que el agua de lluvia, más fría que la del mar, no le da tiempo a mezclarse.





Continuamos hacia la zona más al sur de Nueva Zelanda, los Catlins, es la zona más salvaje y donde se pueden ver pingüinos de ojos amarillos, pingüinos azules, focas, leones marinos, etc.... en estado salvaje. Es cuestión de pasear por algunas playas para verlos.





Allí aparte de vida salvaje, también visitamos el bosque fosilizado, un bosque que fue cubierto por la erupción de un volcán quedando totalmente fosilizado, donde se pueden ver los troncos de los árboles, incluso al tocarlos pueden sentir la madera....los árboles tienen 180 millones de años.....visitamos también algunas cascadas y bosque húmedos.



Dejamos la zona sur para subir hasta el parque nacional del monte Cook, con 19 picos de más de 3000 mts, (incluido el Mt. Cook, el más alto de Nueva Zelanda) y que el 40% de su superfície son glaciares.




Y nuestro viaje se acaba, nos dirigimos hacia Christchurch, la ciudad más grande de la isla sur, donde devolveremos la caravana y cogeremos el avión que nos devolverá a la realidad.

Han sido un total de 21 días en el paraíso, y creo que tardaremos muchos días en asimilar todo lo que hemos visto y vivido. Ahora atrás quedan esos paisajes inolvidables, pero nos hemos prometido volver cuando nuestro bebé (que nacerá en marzo) tenga una edad para viajar.

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