El primer Max Payne, desarrollado por Remedy Entertainment y publicado por Take Two en el año 2001, se convirtió en un clásico instantáneo gracias a la unión de un estupendo apartado técnico, una gran jugabilidad que incluía espectaculares tiroteos a cámara lenta al estilo de las películas de John Woo y una ambientación y desarrollo inspirados en el cine noir, las historietas pulp y las novelas gráficas. Su secuela, Max Payne 2: The Fall of Max Payne, fue creada con la colaboración de Rockstar y apareció dos años después repitiendo y acentuando todos los aspectos positivos de la primera parte. La franquicia pasó definitivamente a ser un emblema de los juegos de acción en tercera persona y una de las sagas más recordadas entre las nacidas la generación pasada.
Desde aquella segunda parte han pasado cinco años y medio y dado que Remedy Entertainment se encuentra trabajando en Alan Wake en esta ocasión ha sido Rockstar la encargada de continuar la saga en solitario. En concreto, el equipo a cargo del juego es el establecido en la ciudad canadiense de Vancouver y cuyo anterior trabajo fue The Warriors.
La samba y la alegría de BrasilAunque se consideran seguidores del trabajo de Remedy y piensan dar continuidad a las bases presentadas en los dos primeros Max Payne los desarrolladores de esta entrega no han desaprovechado la oportunidad de darle un nuevo aire a la franquicia. Lo primero que destaca es el cambio de ambientación, dejando a un lado la oscura y lluviosa Nueva York por la colorida y calurosa Sao Paulo.
Este cambio viene inspirado de nuevo por el cine, ya que como se ha visto en las películas Ciudad de Dios y Tropa de Élite los guetos brasileños se han convertido en una localización perfecta para este tipo de historias que concentran criminalidad y corrupción. Tras los hechos de las dos primeras entregas Max Payne está derrotado, se vuelve alcohólico, adicto a los calmantes y tras abandonar la policía decide asentarse en Sao Paulo para huir de sus demonios y dónde comenzará a trabajar en el sector de la seguridad privada.
Poco más se sabe de la historia, salvo que han transcurrido 12 años desde la última entrega y en los que Max Payne ha ido decayendo cada vez más hasta ganarse un aspecto físico totalmente distinto al que conocíamos, más desaliñado y robusto, con barba, con la cabeza afeitada y por lo visto hasta al momento con un vestuario mucho menos elegante. También se conoce que en la actualidad trabaja para una poderosa y adinerada familia de Sao Paulo. Mientras ejerce su labor se verá envuelto en los asuntos turbios de la ciudad y a partir de ese momento dará comienzo una nueva pesadilla para él.
La jugabilidad seguirá centrada en los tiroteos pero incluyendo unas cuantas novedades. La más llamativa a primera vista es la incorporación de un sistema de coberturas que poco a poco se están convirtiendo en algo habitual y casi obligatorio en los juegos de este género. Pero Rockstar sabe que la acción de Max Payne se caracteriza por ser extremadamente estilizada y por presentar tiroteos abiertos y disparos a bocajarro, por tanto no pretende hacer un juego en el que las coberturas sean algo fundamental como ocurre, por ejemplo, en Gears of War.
De este modo, la mecánica de Max Payne 3 no se basará en tomar cobertura, asomarse para disparar y correr hasta la siguiente cobertura, sino que el jugador podrá decidir si cubrirse o no y estas coberturas existirán en los escenarios como un elemento del entorno más y no como puntos claves de la jugabilidad en los que haya que ir de uno a otro. Por otra parte, también podrá uno cubrirse y avanzar al mismo tiempo tomando a un enemigo y utilizándolo como escudo humano.
El regreso del Bullet TimeLa característica principal de Max Payne fueron los tiroteos acrobáticos a cámara lenta que se activaban con el famoso Bullet Time (tiempo bala) y como no podría ser de otra manera volverán a estar presentes en Max Payne 3. La diferencia se encuentra en que dicho tiempo bala que en su día fue toda una sorpresa ha sido acogido durante los años por una buena parte del resto de juegos de acción y ahora es una especie de cliché del género, de modo que esta vez Rockstar quiere que sea más espectacular que nunca.
Para ello han centrado gran parte de sus esfuerzos en las animaciones y han combinado muchas de ellas hechas a mano con otras generadas proceduralmente por el motor Euphoria de NaturalMotion, asegurándose que los movimientos de Max Payne fuesen lo más detallados y realistas posibles. Por otra parte, también ayudarán a incentivar espectacularidad y estilismo una buena cantidad de elementos destructibles que poblarán cada escenario. El motor gráfico del juego es el llamado Rage, herramienta interna de Rockstar que ya fue utilizada en GTAIV.
Continuando con el Bullet Time y con la idea de hacerlo lo más llamativo posible Rockstar ha incluido lo que ellos llaman "Enviromental Bullet Time", que consistirá en momentos prefijados a cámara lenta, como por ejemplo deslizarse por un tejado, y que transcurrirán al estilo de los Quick Time Events vistos en otros títulos pero en los que el jugador dispondrá del control absoluto del personaje y no se limitará a tener que pulsar una secuencia de botones de forma rítmica. Existirán también otros momentos determinados en los que la cámara acompañará el viaje de la bala hasta que impacte en su objetivo.
Por otro lado, Rockstar ha querido aclarar que durante la mayor parte de Max Payne 3 el jugador podrá afrontar las situaciones como mejor le parezca y que aunque los enemigos también poseerán momentos en los que se comportarán a partir de rutinas durante el resto del juego lo harán con una IA propia y bien trabajada.
Con la intención de llevar el combate al límite encontraremos otros dos aspectos interesantes como la posibilidad de disparar desde el suelo o mientras el personaje se esté levantando (sosteniendo la pistola en una mano y utilizando la otra para apoyarse). Y lo que resulta aún más extremo, si estamos en las últimas y justo antes de morir conseguimos asestar un disparo mortal al enemigo que nos esté ajusticiando Max Payne conseguirá una subida de adrenalina y continuar con vida.
Gráficamente Max Payne 3 promete representar las favelas con todo tipo de detalles, incluyendo el precario estado de edificios y chabolas amontonados, con paredes desgatadas y rematadas con cualquier material auxiliar como palés de madera o planchas de aluminio. Además, la estructura caótica y laberíntica de las favelas ha incentivado el diseño jugable de Max Payne 3 de cara a presentar buenos tiroteos en los que los enemigos podrán aparecer desde cualquier rincón o tejadillo y dónde Max Payne tendrá que sortear todo tipo de obstáculos.
Pero no todo el juego tendrá lugar en las favelas, Rockstar pretende sacarle partido a todas las vertientes de Sao Paulo, una ciudad dónde los muy ricos se encuentran cerca de los extremadamente pobres generando todo tipo de tensiones y desencuentros. Para recrearlo de la forma más realista posible diez empleados del estudio se trasladaron hasta Sao Paulo realizando fotografías de los entornos, recogiendo información, percibiendo el vivir general de la ciudad e incluso escaneando a la población local para utilizarlos como modelos del juego.
Como último dato, es sabido que Max Payne 3 contará con algún tipo de modo multijugador, pero se desconocen los detalles. Del mismo, no tiene fecha de salida exacta, pero es posible que termine apareciendo a finales de este mismo año.