Elmundo.es publica hoy un estupendo artículo del abogado del navegante, Carlos Sánchez Almeida. En él responde a un internauta sobre la legalidad de los cartuchos flash para la Nintendo DS, extrapolándolo también a la modificación del resto de consolas. El argumento principal es el que ya conocemos, que estos dispositivos tienen muchas utilidades legales y no están específicamente destinados a desproteger programas de ordenador:
Para poder perseguir la modificación de consolas como "desprotección de programas de ordenador", debemos considerar la consola como un ordenador. Y por definición, un ordenador es un artilugio destinado a recibir órdenes del usuario, en forma de instrucciones. Un artilugio que se puede programar y reprogramar. El día que una videoconsola sólo pueda recibir instrucciones de su fabricante, dejará de ser un ordenador. Y en consecuencia, quedará definitivamente al margen de la ley con la que se pretende perseguir el 'hacking' de videoconsolas.
El artículo también analiza la utilización de la legislación sobre propiedad industrial para luchar contra la modificación de consolas, como ya está haciendo Microsoft y parece que quiere hacer también Nintendo ante el fracaso de usar el Código Penal. Para poner este razonamiento en evidencia puede compararse con las patentes de la industria automovilística: sería como pretender delictiva la instalación en un coche de cualquier accesorio que no fuese de la misma marca del vehículo. Pero Nintendo aun va más allá, porque con sus patentes pretende obtener protección jurídica para la silueta de los cartuchos, algo que no tiene cabida en nuestro ordenamiento jurídico.
Aun así como comenta el abogado todo esto no impedirá que se sigan instrumentalizando los mecanismos represores oficiales y el acoso policial a las tiendas continuará. Al menos sabremos a qué domicilios van cada año las cestas de Navidad.Gracias a Mobutu16 y Arkanoid por el aviso.
Apasionado de la informática y las nuevas tecnologías desde los 8 años, cuando un Amstrad PC1512 se convirtió en mi "juguete" preferido. Una década después descubrí la PSX y los PIC12C508, y de esa unión nació ElOtroLado.