Jeri Ellsworth y Rick Johnson, ex-trabajadores de la compañía Valve, quieren desarrollar sus propias gafas de realidad aumentada e ir un poco más allá que las diseñadas por Google. El dispositivo recibe el nombre de castAR y lo que quieren conseguir sus desarrolladores es algo más parecido a los hologramas que vimos todos en la saga Star Wars. Concretamente hacen referencia a la escena en la que Chewbacca y C3PO juegan una partida de algo similar al ajedrez, en la que las fichas son personajes holográficos.
Una de las diferencias de estas gafas de realidad aumentada respecto a las de Google es la inclusión de dos periféricos. Lo que sus creadores llaman la varita mágica, un nuevo tipo de controlador que permite colocar los objetos en el espacio mediante una palanca que se controla con una sola mano.
El otro periférico es la llamada red RFID, que permite identificar, seguir o aumentar de manera única los objetos físicos (tales como miniaturas, piezas de juegos de mesa, tarjetas, etc.) sobre esta superficie.
¿Cómo funcionan castAR?
Las gafas poseen dos microproyectores situados encima de cada lente, los cuales se encargan de proyectar las imágenes estereoscópicas 3D sobre una superficie específica reflectante (de un material parecido al de las señales de tráfico). También incluyen salida de vídeo mediante HDMI, conexión USB al ordenador y se está trabajando en otras formas de conectividad, sobre todo enfocadas a los dispositivos móviles.
Su peso rondará los 100 gramos y al parecer no requerirá calibración ni ajuste alguno, simplemente ponérselas y a jugar. Podéis ver toda la información (vídeo incluido) del proyecto en el siguiente enlace.
Estaremos atentos a este interesante proyecto que puede suponer una auténtica revolución sobre todo en el ámbito del ocio interactivo. ¿Podremos sentirnos en poco tiempo cómo si estuviésemos dentro de una película de Star Wars? Mientras escribo esta noticia la campaña va consiguiendo financiación de una forma espectacular, por lo que parece que la respuesta a la pregunta puede ser un rotundo sí.
Nacido en los maravillosos 80. Me considero un apasionado de la tecnología, la informática, los videojuegos y el cine. Siempre intentando vivir el futuro ahora.