Hoy es el día previsto para el estreno mundial de Mega, el nuevo servicio de almacenamiento en la nube de Kim Dotcom, con el que espera igualar el éxito conseguido con Megaupload. A pocas horas de su apertura ya se conocen todos los detalles, pero empezamos por el más decepcionante: de momento los usuarios premium del antiguo Megaupload no recuperarán sus cuentas, incumpliendo lo que había prometido el propio Kim Dotcom (en un un tweet que ha desaparecido).
De esta forma, tendrán que conformarse con el servicio básico y gratuito, que ofrece 50GB de almacenamiento, o pagar 10, 20 o 30 dólares mensuales por el nuevo servicio premium. Con estos planes de pago podrán almacenarse 500GB, 2TB y 4TB, con un ancho de banda máximo de 1TB, 4TB y 8TB respectivamente. No pinta nada mal la capacidad de almacenamiento, pero desde luego el ancho de banda se queda muy corto si la intención es compartir con muchos usuarios los archivos almacenados como se hacía con el viejo Megaupload.
Esta limitación en el ancho de banda de las cuentas y el propio funcionamiento del servicio, que requerirá siempre para descargar los archivos una contraseña conocida solamente por quien los subió, podría frenar bastante su difusión y situarse como una simple alternativa más a Dropbox, Google Drive o Sky Drive. De hecho, Mega quiere ofrecer también servicios de procesador de texto, hoja de cálculo, calendario o mensajería, los cuales se irán incorporando progresivamente.
Falta ver si Kim Dotcom conseguirá que confíen en él los usuarios que pagan por este tipo de servicios para almacenar sus archivos personales o profesionales, y no para compartir o difundir contenidos. De momento no empieza con muy bien pié para ganarse su confianza, ya que durante buena parte de la mañana la web de Mega ha estado caída o funcionando a trompicones.
