Ahora, dos investigadores de la Universidad de Texas han decidido darle una oportunidad a la energía eólica. Pero lejos de tener que conectar nuestros smartphones a un "molino USB" la propuesta consiste en integrar el eólico en el propio móvil. Los ingenieros han desarrollado un modelo de micro-molino que mide 1,8 mm en su parte más larga, diez veces más pequeños que un grano de arroz.
Los diminutos dispositivos se podrán implementar por cientos en una funda conectada al teléfono o bien directamente en la carcasa del aparato. Esto nos permitiría recargar la batería dejando el móvil cerca de una ventana, delante de un ventilador o simplemente agitándolo en el aire durante unos minutos.
Los ingenieros responsables del proyecto destacan la durabilidad de los micro-molinos fabricados con una resistente aleación de níquel y siguiendo un diseño aerodinámico minimalista. La profesora Smitha Rao basó la forma de los eólicos en conceptos de origami, persiguiendo la máxima funcionalidad posible además de minimizar costes de fabricación.
Por supuesto, esta tecnología tiene muchas más aplicaciones que recargar teléfonos y podría ser muy útil para cualquier dispositivo electrónico en exteriores que requiera poca energía para funcionar. En estos momentos, la empresa WinMEMS ya se ha interesado por la investigación de la escuela texana y ha llegado a un acuerdo para explorar las oportunidades de comercialización de la tecnología.
"Es muy gratificante que te reconozca una compañía internacional y poder trabajar en algo así, donde puedes ver inmediatamente cuáles serían sus usos", comenta Rao. "Sin embargo, creo que solo hemos arañado la superficie de cómo podríamos usar los micro-molinos".
