"Parece que hay esta facción natural que se crea alrededor de la consola que posee, y luego esto… lo llamaría 'aversión poco saludable' por la gente que posee la otra consola. Adoro a los fans que tenemos, pero ser un fan de Xbox no significa que no puedas ser un fan de otra cosa, o que tengas que ser un antifan de otra marca. Yo tengo una PlayStation 4. Juego a juegos en mi PlayStation 4. Poseo y juego a juegos en mi Wii U. Aprendo un montón de lo que ocurre en esas otras plataformas".
Spencer explica que la competencia entre compañías como Sony, Nintendo y Valve se limita al terreno del mercado mientras que el sector avanza con un propósito único: "Al final lo que queremos es coger esta forma de arte que es jugar a juegos y experimentar rompiendo la barrera entre la narrativa y la interacción […] y simplemente hacer una forma de entretenimiento mejor".
Respecto a la competencia en las tiendas, Spencer señaló que la gente reduce la "guerra" de números a un enfrentamiento entre Microsoft contra Sony, destacando el mérito individual de que Xbox One ha conseguido el mejor lanzamiento de cualquier consola Xbox. Del mismo modo, el jefe de Microsoft Studios explica que el verdadero triunfo de cualquiera de las dos plataformas es demostrar que el mercado de las consolas sigue siendo relevante.
Entre otros muchos temas, Spencer dejó caer la posibilidad de resucitar viejas franquicias utilizando a Killer Instinct como un ejemplo de éxito. "Creo que es importante para nosotros volver a revisitar de donde hemos venido, y creo que para mí es algo que nunca he apreciado lo suficiente, y estoy aprendiendo sobre ello todavía".
