Sony ha vuelto a inutilizar los diferentes sistemas empleados para acceder a su servicio online con consolas no actualizadas con el último firmware. De esta forma ya no será posible utilizar el PS JailBreak o dispositivos similares y jugar online o realizar descargas, ya que la última actualización de PS3 impide su funcionamiento.
Al mismo tiempo su artillería legal continúa, también en Europa, donde ha denunciado a varias tiendas suecas. La compañía afirma además haber logrado detener la venta del PS JailBreak también en Alemania, Holanda y Hong Kong. Sin embargo todos sabemos que la vía legal servirá de poco, ya que se están extendiendo las soluciones caseras y también se están empezando a comercializar jailbreakers en blanco.