Difundido por el propio Elon Musk a través de su cuenta de Twitter, el vídeo muestra la presencia de un pasajero en el asiento de conductor (como manda por ahora la ley) mientras el coche se desplaza por la carretera sin intervención humana hasta aparcar.
Junto a la vista desde el interior del coche se muestran otras tres cámaras integradas en el sistema de conducción autónoma de Tesla: una cámara delantera y dos cámaras traseras (una para el lado izquierdo de la carretera y otra para el derecho). Desde ellas se aprecia la forma y los colores con los que el sistema visualiza los objetos en movimiento y la carretera. De esta forma el vehículo es capaz de diferenciar líneas de carriles, objetos en trayectoria, luces, letreros, otros vehículos y por supuesto, personas.
Según ha explicado Tesla, los nuevos coches estará equipados con un ordenador de a bordo con una potencia de cálculo 40 veces superior a la generación anterior, lo que permitirá una gran mejora en cuanto al procesamiento de las imágenes capturadas tanto por las cámaras como por el radar y el sonar del vehículo.