El Guardián del Destino LVII: El agradecimiento de Edenma

Bueno, perdón por el retraso pero es que estoi retocando muchísimas cosas.
Antes de nada agradecer a Muad_Did su colaboración en este capítulo que lo ha adornado y puesto mu bonito. ASIAS MUADIDÍ


Resumen: Bolgar, tras derrotar a Satertel en un combate en el que tuvo ayuda de Karib y Vernarder, ha obligado al muchacho a ir a Chro tras poner en sus manos la vida de Derlander.
-----------------------------------------------------------------------------------

La noche cayó pronto. Bolgar había decidido acampar a la salida de aquel bosque ya que Derlander había empeorado. Durante toda la tarde había intentando aliviarle el dolor y por fin se había quedado dormido.
- Será mejor que le dejemos descansar – dijo Bolgar a Dalath -. Ha sido un día muy duro para él.
- ¿Podrá resistir hasta que lleguemos a Dulain? – le respondió el padre de Edenma.
- Eso espero – suspiró -. Mañana deberemos de cruzar el Elo y dirigirnos hacia el lago por el norte. Acortaremos unas horas de viaje.
- ¿No será demasiado para él? Creo que está bastante mal – ambos miraron el cuerpo yaciente de Derlander. La tranquilidad de ese momento no les dejaba apreciar la gravedad de sus heridas.
- Deberá aguantar si quiere vivir – pero en ese momento volvió Vernarder. EL ladrón había ido a por leña. Con una simple mirada los dos hombres decidieron no seguir con el tema delante del bandido.
Un largo silencio se hizo mientras Vernarder se acercaba a su hermano. Se arrodilló delante de él y le tomó la mano, queriendo tranquilizarle, pero no obtuvo ninguna respuesta por su parte. Permaneció junto a él un buen rato, y por fin se decidió a sentarse junto al fuego para cenar.

- Bolgar – dijo rompiendo el silencio Dalath -. ¿Por qué le haces esto al joven?
- No te importa – gruñó cortante el guerrero dejando ver que no le gustaba el nuevo tema de conversación.
- Sí que me importa – continuó con la voz temblorosa el padre de Edenma -. Él… ha salvado a mi hija allí dentro, y lo menos que le debo es intentar hacerte cambiar de opinión…
- No lo conseguirás – respondió Bolgar sin mirarle, mientras se entretenía con un palo que afilaba. Dalath suspiró.
- ¿Qué pinta un chaval como él en Chro?
- Esta conversación se ha acabado –respondió Bolgar elevando el tono. Alzó su cara hasta situar sus ojos a la misma altura que los de Dalath-. Tu sangre fría ha permitido que Derlander esté vivo, y por eso vienes con nosotros. No dudes en que si no fuese por ello no estarías aquí.
La conversación terminó ahí. Tal y como empezó, súbitamente, pero con un Dalath dolido en su orgullo y sintiendo no haber podido ayudar a Karib.

Karib había montado un buen rato a Odra. Prácticamente hasta el anochecer, cuando el potrillo comenzó a sentirse cansado. No lo quería forzar mucho, así que se bajó de él y volvieron junto a los demás a paso lento y los dos andando, aunque Karib tenía un dolor en la entrepierna que seguro el caballo no sentía.
Antes de llegar, el muchacho llevó al animal a beber agua aguas abajo, donde no había pendientes pronunciadas ni escalones para llegar al río.
La misma brisa que había comenzado a soplar a media tarde lo hacía ahora con un poco de más fuerza, y más refrescante, cosa que hizo Karib con su cara y el agua. Desde lejos se podía escuchar el movimiento de los árboles, y al muchacho le dio la sensación de que era como pasos que daban en busca del Elo. Con una sonrisa se quitó la idea de la cabeza por lo estúpida que parecía.
Mientras Odra bebía tranquilamente, Karib se quitó las sandalias de piel que llevaba y metió los pies en el agua perdiendo su mirada en el río. Después de todo un día caminando, corriendo luchando y montando a caballo aquello le dejó como nuevo. De no ser por el hambre que tenía, se hubiese quedado allí a dormir, sin importarle nada más, pero se tuvo que conformar con contemplar las estrellas que brillaban en el firmamento. Allí estaban todas, tal y como recordaba desde que las contempló con Galdián… ¡Galdián! Dónde estaría. ¿Le habría pasado algo? Desde que se encontró con los bandidos, no lo había vuelto a ver.
Estaba metido en esos pensamientos cuando un ruido detrás suya silenció el canto de los grillos y le sobresaltó. Rápidamente se giró y reconoció con alivio al intruso, que se trataba de Edenma. Le miraba con ojos de extrañeza, pero aún así le sonrió y se sentó a su lado. No dijo nada, tan sólo miró con Karib las estrellas hasta que Odra volvió con su dueño.
- Es muy bonito, ¿verdad? – dijo la muchacha, refiriéndose al animal.
- Sí, y además es muy listo… o lo parece. ¿Sabes? – dijo volviéndose a mirar a Edenma - Me da la impresión de que somos capaces de entendernos… de forma especial
- ¿Cómo? – la chica le miró con curiosidad, como se miraría a un animal extraño, pero tras ver la cara de vergüenza que puso Karib al comprobar su reacción continuó-. A veces ocurre, ¿sabes? Amo y bestia, acaban entendiéndose tarde o temprano. Y parece que lo habéis hecho muy pronto – terminó acariciando al caballo que respondió con un suave relincho de aprobación.
- Puede ser – dijo a la vez que suspiraba de alivio y volvía a tenderse en el suelo mirando al cielo-. Ya le he puesto un nombre que parece que le gusta. Desde hace poco se llama Odra.
- Hm, es apropiado… teniendo en cuenta lo que me has dicho. Hola Odra – se dirigió al caballo y ambos rieron. Tras un breve silencio la muchacha continuó mirando hacia el cielo.
- Son bonitas, ¿verdad?
- Sí. Galdian … un amigo – rectificó pensando nuevamente en el extraño personaje – me dijo que eran un plano o algo así. Que eran capaces de indicarnos el pasado, el presente y el futuro.
- ¿A, si? ¿Y cómo se lee ese plano?
- Pues si te digo la verdad, me lo explicó, pero no fui capaz de entender nada de nada – rió abiertamente, contagiándole la risa a la muchacha-. Dijo que alguien lo había escrito antes de todos los tiempos.
- ¿Quién pudo hacer algo así? ¿Un dios?
- Algo parecido.
- Entonces debió ser Kayn. Es el dios más poderoso de todos.
- No. Dijo que era alguien aún más poderoso.
- ¿Más poderoso que Kayn? No me lo creo.
- Es cuestión de opiniones. Mi familia me enseñó a adorar a Luna. Es más justa y sabia que Kayn, y es la protectora de Tirya.
- Los tiryanos sois muy raros.
- Jajaja, no digas eso. Los raros sois el resto del mundo.
- Y… ¿dónde está ahora ese amigo tuyo?
- No lo sé. Desapareció cuando me capturó Satertel y no lo volví a ver. Me pregunto si le habrá pasado algo. Espero que no.
El silencio se rehizo en aquel apartado lugar. Tan solo el fluir del Elo y el sonido de los grillos ambientaba la noche, aún joven.
- Todavía… no te he dado las gracias por salvarme – dijo Edenma tras unos minutos de silencio. Karib se incorporó y la miró sorprendido.
- ¿A qué te refieres?
- A que me sacaste de la mina.
- Yo… bueno… - carraspeó sonrojado -, no ha sido nada… de verdad…
- No seas tonto – susurró, como si no quisiese que el muchacho se enterase. Luego se volvió para mirarle de frente. Karib se dio cuenta entonces de que la muchacha se había lavado por completo, hasta el pelo, que lo tenía mojado, en cambio él, estaba lleno del barro y el polvo que había cogido con la explosión de la mina. Se sintió incómodo por ello-. Si no fuese por ti, aún estaría allí dentro, en esa oscura celda. Además, también ayudaste a ese maleducado a encerrar a aquel hombre enlatado – ambos rieron soltando un poco la tensión que tenían los dos.
La brisa corría y movía suavemente el pelo de Edenma mientras Karib la miraba fijamente. Intentó decir algo, pero no fue capaz y se sintió estúpido, muy estúpido. Bajó la mirada lentamente para escapar de la de la chica. Se sentía incómodo sin poder responderle, sin poder hablar, pero era ella misma la que le ponía nervioso, incluso sin saber porqué.
Ella también bajó la mirada, sin atreverse a decir nada y suspiró.
- No quiero… que digas nada – respondió a los temores silenciosos de Karib-. Tan sólo quería darte las gracias…y…
La muchacha se arrodilló delante del joven y le tomó suavemente la barbilla hasta que la puso a la altura de sus ojos. Le dedicó una sonrisa y le besó en la mejilla. Después se puso de pie y se marchó hacia el campamento dejando a Karib aún más confundido, y ruborizado, que antes.

----------------------------------------------------------------------------------------

poco más
Asias muadidí xD

Ah. ningu, has leido los cambios que he hecho por ahí (perdón por esos saltos)

nos e ves
Lo mejor, el final. [oki]

He leído tus cambios por encima... pero me suele gustar más lo que leo por primera vez, por segunda vez (aunque retocado) me hace perder interés.

A ver como sigues...
Por cierto, acabaste ya la parte que tenías escrita antes de empezar a postear los capítulos?
por partes xD
menos mal que te ha gustad el final ^^

ehm, lo de los cambios, pues sí, confieso que un cambio después de posteado 1º, no tiene tanto interés y 2º puede confundir, en fin, lo siento, pero lo veia necesario.
Ahor estoy retocando cosas del principio del todo, pq me he dado cuenta de que no ambiento demasiado la idea de los dioses (ya has visto aquí que empiezo a hablar de ellos) y en la historia general son muy importantes, así que meto matices, como expresiones referentes a Luna o Kayn u otros dioses, como Hadalaharo.

En cuanto a si me ha pillado el toro te digo que CASI (por eso este ha tardado tanto, además de por las mejoras y añadidos de Muad_did). Déjame mirar...sí, lo que pensaba. Lo que llevo escrito termina en la página 109. Este capítulo es el final de la página 100, por lo que qedan unas 8 o 9 páginas por postear, a partir de las cuales será todo nuevo (auqnue está casi estructurado del todo, falta plasmarlo). Esto me ha ocurrido pq he borrado casi por completo lo que llevaba de la parte 10ª (que no me gustaba NADA NADA NADA) y eran por lo menos 20 páginas, pero weno... creo que ha sido para mejorarlo. Ya verás lo que espera.

Si algún día le hago una portada a esto lo que aparecerá será lo que viene en los próximos capítulo: El Alcazar Dulain. ;) Asias por leerme
Pues sí, si los dioses van a ser importantes en el futuro haces bien en empezar a incluir pasajes sobre ellos, ya que los que has dicho me sonaban a chino. ;)
3 respuestas