Realmente creo que cuando una persona pone un reto a otra, lo hace esperando que haga lo que ella pensaba que haría cuando puso el reto. Que esto suceda es harto complicado, pues evidentemente los retos nomalmente quedan bastante ambiguos, aun nosotros teniendo una idea muy ajustada a la hora de ponerlos.
Lo bonito de algunos retos que he puesto y que han presentado es la sopresa de que aunque no sea lo que te esperabas, pues es muy poco probable que lo sea, es mucho mejor que lo que tu pensaste o te da una visión muy diferente de lo que tu creias que solo podría realizarse en un camino. Este es uno de esos restos y me ha encantado.