Siento maldita envidia
del viento que sopla
y brilla entre tu rostro
con su tierno toque de canela.
mientras otro te tenga, no serás mía
Acaricio la verdad de serte ajeno
y maldigo el hombre
que te tenga entre sus brazos.
Cuantas veces te he deseado
y cuantas de ellas no has sido mía.
mientras no te tenga, nunca serás mía
Eres tan perfecta cuando
envidio tu suerte,
que maldito el destino
que no me dejó ser bueno
para tus ojos.
Envidia mis ojos porque ellos ven belleza