Hola a todos, posiblemente algunos recordareis mi relato "
Primera vez ", pues unas amigas me pidieron que escriviera una version con un chico como protagonista .
Asi que...
Primera vez (version chico)
Aquel domingo llegue a ti, llegue a ti buscando consuelo, buscando un hombro donde llorar, un brazo amigo que me arropase. Me acogiste como siempre lo habías hecho. Me abrazaste contra tu pecho, podía sentir tu respiración y el tranquilizador ritmo de tu corazón y me pediste que te contara. Te mire, me sonreías con amor y yo te conté.
Días atrás Maria me había pedido que hiciéramos el amor, yo como cualquier joven había aceptado. Cuando tuvimos oportunidad nos vimos en su casa, ya la salude con un gran beso, ella me correspondió con un abrazo donde me quito la camisa, entre risas llegamos a su dormitorio, abrió la puerta y con un gesto me invito a pasar, yo la agarre fuertemente y la entre, cogida en brazos y la deposité sobre su lecho, lentamente me tumbe sobre ella y abrazados allí nos quedamos unos minutos, mirándonos intensamente, jugando con su cabello. No se como pero ya estábamos desnudos, con un largo suspiro la tome, ella se volvió loca, no se que paso, pero el ritmo se descontrolo, ella grito y yo termine. Maria intento consolarme:
-Para ser la primera ves no has estado tan mal -y me abrazaba- vamos! –intentando animarme- ya mejoraras…-
Yo no sabia que decir, creía que le había fallado a Maria, y la verdad es que no había estado a la altura. Me sentía avergonzado de mi mismo, de no haber sido capaz de complacerla. Cogi mi ropa, sin decir una palabra salí de su casa. No sabia a donde ir, entonces pensé en ti.
Me escuchaste en silencio mientras acariciabas mi cabello. Cuando termine de hablar, te quedaste ahí sentada, reflexionando, me contaste que lo que paso era completamente normal. Que un chico sin experiencia como yo era incapaz de contenerse. Me preguntaste:
- Pero vamos ver - y me miraste con tus cautivadores ojos verdes.- ¿Hicisteis juego previo?
-¿El que? –Pregunte desconcertado- ¿a que te refieres con juego previo?, Simplemente, llegué, la bese, nos tumbamos en la cama y… ya conoces el resto –dije cortado-
Entonces me miraste, se reflejo en tu cara una expresión de comprensión infinita. Me cogiste de las manos con ternura y me contaste tantas cosas. Yo te escuchaba anonadado, mientras me enseñabas como acariciar... como besar…, tantas cosas que desconocía. Gracias a ti aprendí de mis errores y me sentí preparado para volver a amar.
Volví a hablar con Maria, le pedí perdón por mi estupidez, ella me perdono y para mi felicidad, me dio una segunda oportunidad. Volvimos a estar juntos. Cuando nos sentimos preparados fuimos despacio, lleve a Maria a su cama, la tendí sobre su lecho. La desvestí despacio, acariciando su cuerpo lentamente. Aspirando su aroma y me deleite con sus sabores. Estuve sobre ella y ella sobre mí. Nos amamos sin pausa, conociéndonos mutuamente. Lo hicimos una, dos, tres veces… ¿Quién sabe ya? Acabamos extenuados sobre el empapado lecho, testigo mudo de nuestro amor. Maria abrió los ojos, me sonrió y tras darme un tímido beso me dijo que quería.
Han pasado ya 3 años desde aquella noche de pasión desenfada. Maria y yo acabamos por casarnos, somos muy felices juntos. Nos amamos a diario y nuestro amor ha tenido ya fruto, el pequeño marcos nos llego hace un año para colmarnos de felicidad. Todo esto te lo debo a ti y a todo lo que me enseñaste. Pero aun hoy, siendo ya un padre y un marido, me pregunto… me pregunto… si de verdad te amo…
Querida hermana.