Bien, esta es mi primera respuesta al hilo aquel llamado "Estudio sobre nosotros" en el que proponía hacer un estudio personal de los autores que quisieran. Por lo mucho que le debo y lo mucho que me agrada, empiezo por Prado. Ahí va lo que redacté aquella "maldita" madrugada en decidí indagar en aquellos versos.
----------------------------------------------------------------------
La voz de Prado en las letras suena de forma melódica pero agresiva. Me he dado cuenta de la sensación de vértigo que consigue arrancar de mi estómago cuando leo sus versos. Si bien es verdad que muchos poemas entran en la oscuridad propia de una poesía subjetiva hasta dañar, muchos otros son límpidos y claros, y dejan en el paladar de quien los lee una sensación dulce.
Mientras España, y el mundo, se mueven a ritmo de goles, tacos y guerras la poesía de Prado se mueve a ritmo de Jazz, con sus versos saliéndose de la norma, mirándote de forma pícara y haciendo que quieras o no termines moviéndote a su ritmo.
Son varias las imágenes que utiliza, pero creo que sin duda el mar es la que más llena sus versos, así como las calles de su ciudad o los olores y los colores que pueblan su tierra, su vida y su entorno. Pasea bohemio quizá, pero también moderno consumándo un extraño matrimonio entre ambas formas en principio incompatibles...pero que le dan muy buen resultado.
Decir que Prado enseña con sus versos es quedarse corto, y le saca el mismo jugo a un helado de limón, a un hecho importante en su vida, o la cosa más cotidiana como qué es lo que lleva en los bolsillos, que olor tiene cierta chica o su sensación una noche cualquiera...
Me gusta pasear con Prado por la poesía, termina convirtiéndose en una fiesta de color, de luces y de sonido al má puro estilo de aquellos fantásticos paseos que podías dar si Mary Poppins iba contigo...
He leído atentamente sus poemas, deteniéndome sobre todo en Restos de un naufragio, del cual, y para terminar, me gustaría extraer lo que para mí significa la más bella perla de ese collar...
TU VOZ
Tu voz
me acerca
las sirenas
de los barcos
cuando edulcora
el llanto
de las ballenas.
Tu voz es prodigiosa;
evoca
el poder de
la mente
y me recuerda
(aunque no la oiga)
que ha llegado
el momento
de pensar
en algo grande.
Espero que disfruteis de Prado como yo lo he hecho...y hasta la próxima entrega de "Demiurgo lee a..."