No es la primera vez que Apple tiene problemas legales por el funcionamiento de sus DRM, incluidos en la música que vende a través del servicio iTunes. En particular, el impedir la interoperabilidad, al no permitir la reproducción con otros reproductores portátiles aparte del iPod, incumple la ley en determinados países. Por ello, Noruega, Suecia y Dinamarca han
denunciado de forma oficial esta ilegalidad, reclamando que Apple tome las medidas correctoras necesarias.
En Francia también se
juzgó un caso similar, e incluso se
intentó imponer por ley la interoperabilidad (aunque finalmente no se llevó a cabo). Y mientras tanto, este mismo sábado en Estados Unidos activistas anti-DRM se
manifestaban en las tiendas de Apple.