Un grupo de unas 60 personas con caretas de Ramoncín
irrumpió ayer en la sede madrileña de la SGAE. Se trata de una acción de protesta del grupo
Rompamos el Silencio, quien proclama que la Sociedad de Autores
mata la cultura libre.
La protesta consistió en lanzar fotocopias de billetes de 100 euros y pegar céntimos en las puertas y el suelo de la entrada, mientras gritaban proclamas como "Luchar, crear cultura popular", "La creación se defiende compartiéndola" o "La cultura no se vende". Además colgaron varias pancartas e intentaron acceder al despacho de Teddy Bautista, pero fueron expulsados.
Actualización: Como era de esperar la acción ha creado bastante
polémica en la red, con la mayoría de
representantes en contra, aunque también hay
fundamentos a favor. Y
aquí un vídeo.