Venga, va otro de esos con habitaciones:
Nuestro protagonista fue de viaje a un país de África, y caminando, caminando se encontró con un hermoso árbol lleno de jugosos dátiles, ... no pudo resistir la tentación y empezó a comerlos. Pues bien, resultó que ese árbol era nada más y nada menos que el palmeral real, y por supuesto estaba prohibido coger sus dátiles. Fue condenado a quedar encerrado para siempre en la cárcel de alta seguridad del reino.
Esta cárcel, un tanto curiosa, no está totalmente cerrada, sino que tiene cuatro puertas que el prisionero puede abrir, claro está por su cuenta y riesgo.
En la primera puerta hay unos fieros leones dispuestos a comerse un hombre entero, y lo que haga falta. En la segunda puerta hay una sala llena de serpientes venenosas. En la tercera hay un techo fabricado con un enorme cristal a modo de lupa que multiplica los rayos del sol de forma inimaginable: colocarse debajo supone quedar peor que el pollo frito. Y en la última puerta hay 5 guardianes de una tribu antropófaga dispuestos a cocinarle si entra allí.
Ante esta perspectiva, el prisionero abandonó toda esperanza de escapar porque, ¿qué muerte hubiera sido peor?
Y la verdadera pregunta es, ¿tú serías capaz de escapar, sin morir en el intento? (y claro, otra pregunta ¿cómo?
)
Saludos