Toda compañía del mundo de los videojuegos se tiene que estar frotando las manos ahora mismo, ganar varios cientos de millones de potenciales clientes no es moco de pavo, tiene que ser como el Santo Grial de las ventas. Lo que no controlo mucho es si el gusto del jugón chino es más próximo al occidental o al japonés, porque de este detalle puede depender bastante la estética y mecánica de muchos desarrollos de la next-gen.
Contando con que realmente levanten el veto...