Parásitos (2019). La moto de Maroto, Joker y ejecución de programa periódico en Matrix de control del rebaño.
Parece ser que este año, tocaba exaltar la diferencia de clases, como otros el racismo, el feminismo, la homosexualidad, etc, etc, etc...... y, para ello, qué mejor que dotar de críticas extratosféricas a un par de películas que, si bien son entretenidas, todo hay que decirlo, pues cumplen sobradamente para pasar el rato, se encuentran muy lejos de la genialidad y no pasan de ser, simplemente, eso, productos decentes para pasar el rato ..... como tantos otros; total, sólo con lo anterior, la ciencia ya constata un alto porcentaje de población haciendo la ola, a lo que se suman los frikis concretos que con todo el derecho del mundo darán su beneplácito, independientemente de que su nicho concreto sea Almodovar, el drama coreano, el rollito scifi o el pastelón (en este sentido, y para que se entienda, y nadie se sienta ofendido, todos somos frikis de uno u otro tipo de productos, pero el valor neto no deja de ser el que es). Yo, personalmente, prefiero que me dejen con mis Rambos & Tarantinos y demases, ya que no me suben tantos puntos los panfletos, que es, en este caso concreto, lo que, sin duda, al margen de su público objetivo concreto y reducido, ha hecho que Joker o Parásitos estén donde estén, es más, en mi caso concreto, cuando veo un panfleto con tanto marketing rodeado de tanta critica me siento más inteligente si cabe, lo que ya es decir para un tipo que acostumbra a tener la autoestima por los cielos o más allá.
Metiéndonos más en la película concreta, su contexto y procedencia, pues bien, la película ciertamente guarda una sorpresa, que se desvela a mitad de metraje y a la que le siguen los mejores, o más disfrutables, momentos de la película, los cuales recuerdan a "A hard day", película protagonizada por el que en ésta hace de padre, sólo que aquélla era un no parar, también era mejor película y todo su metraje era como lo mejor de ésta. En todo caso, vista la sorpresa, algo también típico en películas de esta nacionalidad, como también por ejemplo hacía "Forgotten", quien como yo está curtido en cine coreano puede prever casi al detalle el devenir de los acontecimientos, lo que da que pensar que, al margen del factor conspiración, algún criticucho muy pesado ha descubierto ahora el cine coreano, porque si no.....pues hombre, será porque no hay mil películas mejores de dicha procedencia.
En todo caso, todo lo anterior no hubiese sido culpable de ningún alboroto si no confluyera el fenómeno crítica social y qué nos apetece vender este año, y, en este punto, lo siento pero yo veo la película extremadamente forzada y poco creible hasta el punto incluso de poderse clasificar de mala en ese sentido; en ese punto, Joker estaba bastante mejor, por culpa de su ambientación oscura y Phoenix.
Por último, también tiene alguna conversación/rato que peca de pesada....y tampoco se la puede puntuar por fotografía, uno de los puntos fuertes de las películas coreanas.
Respecto a Bong Joon-ho, buena, buena no me parece ninguna de las películas que he visto de su filmografía, de hecho sólo salvaría Memories of Murder, mejor que ésta, y ésta y como películas entretenidas para pasar el rato, igual, por ejemplo, que cualquier comedia española con un mínimo de gracia o una random de acción decente. Decir que Rompenieves y The host me parecieron malas a rabiar es ser benevolente con ellas, y Mother no pasa de cutre y de ser la típica película de cuando el cine asiático tenía merecidamente la mala fama que tenía.
Valoración: 5/10.