Está claro que el núcleo de clásica está compuesto por treintañeros. Aunque es llamativo el número de chavales entre 18-25 años que hay. Eso demuestra un interés anacrónico por las clásicas, quizás proveniente del pujante sector indie y por reediciones como las Nes o Snes classic. Sin contar lo viva que está la scene.
Y también llamativo como a partir de los 40 no decae el interés, a pesar de que en casi todos los casos con esas edades ya se suele tener ocupaciones y responsabilidades que limitan el tiempo de ocio. Lógico también que apenas haya gente de 50 o más al ser los videojuegos un fenómeno de finales de los 70 en adelante.