Entre un Mario Karts y un simulador hay un segmento donde caben 945845395845849 tipos de juegos. Decir que a este le veo demasiadas fantasías no quiere decir que quiera un simulador.
A mi me gustan más arcade que simulador, me gusta el tema este de caricaturas, simplemente me gustan con menos cosas típicas de este tipo de juegos como las rampas de aceleración o armas, solo eso. No me he quejado, sólo tenía la esperanza de que pudiera encajar en un segmento que nadie parece cubrir: Arcade gracioso pero que al final lo que prime sea la conducción, aunque puedas dar empujones, o aunque los circuitos y las físicas no sean reales al 100% (obvio).
Saludos.