Cyborg de Van Damme.
No creo que tuviera mucho presupuesto. Pero es de lo más malo que he visto en mi vida. Y mira que me he tragado cada truñaco que lo flipas.
Las secuelas de Los inmortales invitan directamente al suicidio.
Recordemos que hay películas con un presupuesto ajustado y son auténticas joyas.
Por ejemplo, Aliens tenía un presupuesto de 36 millones de dólares y aunque parezca increíble, Cameron sólo gastó 18.
Ordenó filmar otra vez en los estudios Pinewood para contar con gran parte del personal de la primera parte y así ahorrar dinero.