Es todo bastante confuso la verdad. Aun estoy esperando la publicación de informes provinientes de estudios que corroboren lo ocurrido durante el transcurso de los días clave.
Por otro lado, es una auténtica pena que este sector, al igual que cualquier otro, sufra tanto por la incertidumbre que ocasionan estas situaciones. Lo peor de todo es que nosotros, como simples ciudadanos, no podemos hacer nada para remediarlo. Lo mejor que podemos hacer es seguir afrontando la vida de tal forma que no afecte a nuestras emociones más profundas. Hablo, como no, de la sensación de angustia que tenemos por ejemplo al encender el televisor y ver las noticias. Al final lo mejor que puede hacer uno es dejar de informarse porque un dia de estos nos va a dar una enfermedad.
Y por último, introduciéndonos en el plano económico, diré que tampoco podíamos esperar menos a tenor de los prolegómenos. Un porcentaje aparentemente tan bajo, es realmente un número alto de personas. Y hasta aquí mi anal isis.