Dejando a un lado que cada uno puede meterla y que se la metan donde quiera, la verdad es que la redacción del artículo es una mierda pinchada en un palo porque parte de la premisa de que si te gusta practicar el strap-on eres un tío chachi y liberado pero si no eres un machista retrógrado que no pasa del misionero. Pues para nada, Una mujer con iniciativa puede conseguir que te sientas follado sin necesidad de que esta te introduzca falos de plástico por tu sacrosanto orificio.
Personalmente es una práctica que en principio no me atrae, aunque quien sabe si con el tiempo llegaré a planteármelo. Tal vez si a mi pareja le diera un morbo especial accedería a probarlo, pero por suerte para mi no es el caso.
Pero el artículo, insisto, es caca de ñu. Escrito para hacerse el guay o por oscuros intereses.