Hijo de puta es un insulto bastante devaluado por su uso a trote y a moche, y desde luego el Sr. Presidente del Gobierno, con sus mentiras y acciones, no merece menos que eso, sino más.
Mariano Rajoy siempre me ha dado sensación de ser un manta, pero un manta mayúsculo; por ejemplo, Esperanza Aguirre, se tenga la opiníón que se tenga de ella, es puro nervio y no es una manta, pero Don Mariano, lo es.
Y desde luego, el hecho de haber ganado él y su partido unas elecciones mintiendo como bellacos, y luego diciendo el Sr. Presidente que iba a hacer lo que fuera aunque hubiera dicho que no lo iba a hacer, merece los mejores epítetos escarniantes del diccionario de la lengua castellana.