No tiene nada que ver ser ultraderecha, SJW o adorador del espaguetti volador, el tema es que la mierda o "pensamientos peligrosos" en las redes provocan que turbas te puedan joder la vida, y las empresas optan por lo barato y rapido que es darle la patada, pues porque es barato, rapido y quedas bien.
Antes de Gunn ya estaba Kevin Spacey, y antes de ellos el tipo que trabajaba en Google al que le filtraron post de foros exclusivos de empresa en los que en teoría había libertad de opinión sin miedo a represalias.
El problema no es de las empresas, es de las RRSS que han fomentado turbas y una nueva época de autos de fe digitales.