Si no tuviese ya la Wii, me tiraba como loco a por la roja. En cambio, la DS XL la prefiero en color cereza.
Pero de todas, todas, lo mejor de la noticia es que ya parece que, poco a poco, dejamos de ser el último mono en cuanto a estas ediciones especiales que hace nada, no salían de Japón o como mucho llegaban a USA.
Saludos