La rama norteamericana de Atari se ha declarado en bancarrota, en un intento de separar sus finanzas de las de su matriz francesa Atari S.A, antiguamente conocida como Infogrames. Atari Inc. y todas sus filiales estadounidenses, incluyendo Atari Interactive Inc., Humongous, Inc. y California US Holdings, están buscando vender la totalidad de sus activos en los próximos 90-120 días. Su objetivo es dejar atrás el negocio tradicional para centrarse en el mercado digital y la concesión de licencias.
Aunque Atari S.A cuenta con beneficios en sus dos últimos ejercicios, después de casi una década de pérdidas, estos son pequeños (11 y 4 millones de dólares) y se cree que su mayoría proceden de la filial americana. En consecuencia, la filial afirma tener potencial para crecer, pero no bajo el yugo de Atari S.A y su deuda de 28 millones de dólares.
El presidente ejecutivo de Atari Inc., Jim Wilson, buscará dentro de los posibles compradores apoyos para poder seguir controlando la compañía. También es posible que la empresa encuentre nuevo propietario vendiéndose entera o por trozos.