Eric Naierman, coleccionista por afición y dentista de profesión, compró el pasado septiembre una selección de cerca de 40 videojuegos clásicos por los que pagó un total de 1,02 millones de dólares, según informa el Washington Post. Esta es una de transacciones más grandes en la historia de los videojuegos de las que se tiene constancia.
Todos los juegos comprados por Naierman están conservados dentro del envoltorio original, la mayoría son primeras ediciones y algunos de ellos son únicos o solo existen dos o tres copias en todo el mundo. El catálogo que ahora posee Naierman fue reunido por tres coleccionistas, que de forma combinada invirtieron 52 años en conseguirlos. Antes de completar la transacción, todos los juegos pasaron por manos expertas e independientes.
Entre los títulos incluidos en la colección encontramos una versión arcade de Mario Bros. (1986), las dos únicas copias conocidas de Golf (1985) y las únicas unidades de las que se tiene constancia de Balloon Fight (1986) y Gumshoe (1986). Todos son obras para Nintendo Entertainment System (NES). El conjunto de juegos han sido tasados y valorados por expertos independientes, y varios de ellos consideran que ahora mismo la colección de Naierman es una de las más importantes del mundo tanto por su valor económico como por su rareza.
“Estos son algunos de los ‘santos griales’ y la crème de la crème por su valor histórico”, dice Deniz Kahn, presidente y director ejecutivo de Wata Games, compañía especializada en calificar videojuegos clásicos y una de las que ha valorado los títulos obtenidos por Naierman. Por su parte, Valarie McLeckie de Heritage Auctions, afirma que este mercado está viviendo un aumento de la demanda y más personas se están interesando en adquirir juegos que son difíciles de encontrar.
En cuanto a Naierman, empezó a coleccionar videojuegos después de desilusionarse con los cromos de béisbol. Se necesita demasiado dinero para comprar solo uno de ellos y él quería tener en posesión una colección que pudiese considerarse como una de las mejoras del mundo. A día de hoy una de las mayores transacciones por un solo videojuego son los 100.150 dólares que se pagaron por una copia de Super Mario Bros. para NES a principios de año.
La captura de cabecera es obra de Dya Pardo para el Washington Post.
Todos los juegos comprados por Naierman están conservados dentro del envoltorio original, la mayoría son primeras ediciones y algunos de ellos son únicos o solo existen dos o tres copias en todo el mundo. El catálogo que ahora posee Naierman fue reunido por tres coleccionistas, que de forma combinada invirtieron 52 años en conseguirlos. Antes de completar la transacción, todos los juegos pasaron por manos expertas e independientes.
Entre los títulos incluidos en la colección encontramos una versión arcade de Mario Bros. (1986), las dos únicas copias conocidas de Golf (1985) y las únicas unidades de las que se tiene constancia de Balloon Fight (1986) y Gumshoe (1986). Todos son obras para Nintendo Entertainment System (NES). El conjunto de juegos han sido tasados y valorados por expertos independientes, y varios de ellos consideran que ahora mismo la colección de Naierman es una de las más importantes del mundo tanto por su valor económico como por su rareza.
“Estos son algunos de los ‘santos griales’ y la crème de la crème por su valor histórico”, dice Deniz Kahn, presidente y director ejecutivo de Wata Games, compañía especializada en calificar videojuegos clásicos y una de las que ha valorado los títulos obtenidos por Naierman. Por su parte, Valarie McLeckie de Heritage Auctions, afirma que este mercado está viviendo un aumento de la demanda y más personas se están interesando en adquirir juegos que son difíciles de encontrar.
En cuanto a Naierman, empezó a coleccionar videojuegos después de desilusionarse con los cromos de béisbol. Se necesita demasiado dinero para comprar solo uno de ellos y él quería tener en posesión una colección que pudiese considerarse como una de las mejoras del mundo. A día de hoy una de las mayores transacciones por un solo videojuego son los 100.150 dólares que se pagaron por una copia de Super Mario Bros. para NES a principios de año.
La captura de cabecera es obra de Dya Pardo para el Washington Post.
[qmparto] [qmparto] [qmparto] [qmparto] [qmparto] [qmparto] [qmparto]
[plas] [plas] [plas] [plas] [plas] [plas] [plas] [plas] [plas]
Raspberry-Pi por la mitad del dinero... xDDDDDD que buena la troleada [oki]
Joder, por por ese dinero te montas un cluster con los mejores FPGAs del mercado y contratas a todos los mejore expertos de la scene durante años para que te monten el sistema definitivo que lo "emula" todo a la perfección, vamos.
Y hasta desarrollas un nuevo reemplazo de CRTs con láseres.
Francamente, vaya forma de tirar el dinero. 1 millon en 40 juegos.
Pero lo importante aquí y mensaje de la noticia es: Guarda tu colección de juegos que el día de mañana puede valer un pastizal XD
Eso sí...yo le criticaré mucho pero no me importaría tener esa colección... [chulito]
Pero no a esos precios [+risas]