Después de pormenorizar todas las especificaciones técnicas de Xbox Series X, Microsoft ha ofrecido las primeras novedades sobre el mando inalámbrico que acompañará a la consola cuando se ponga a la venta a finales de 2020. Debido al éxito de los anteriores modelos, a nadie le debería extrañar que la compañía haya decidido mantener el diseño del periférico, que sin embargo presenta un par de novedades importantes.
Los dos cambios más notables del mando de Xbox Series X respecto a sus antecesores los encontramos en el pad direccional (también conocido como D-pad o cruceta) y en el nuevo botón para compartir. También hay pequeños cambios que a primera vista cuestan más de ver como las nuevas texturas, el redondeo de los botones superiores o la reducción de los bordes de los gatillos.
“El nuevo D-pad está diseñado para impulsar el rendimiento y la accesibilidad para todas las formas de jugar diferentes (y es una de mis partes favoritas del nuevo diseño)”, explica Ryan Whitaker, diseñador sénior de Xbox. “Al ver la gran variedad de géneros y estilos de juego existentes, nos dimos cuenta de que el D-pad se utiliza de distintas maneras. Para algunos títulos, los jugadores necesitan tener direcciones cardinales claramente marcadas (arriba, abajo, izquierda, derecha) y con bordes bien definidos. La cruceta es perfecta para ello”.
“Tomando como base lo que aprendimos del mando Elite y viendo cómo las personas usan el D-pad, creamos un diseño híbrido para sacar lo mejor de ambos”, añade Whitaker. “La base ligeramente más profunda le brinda al pulgar un 'sitio' agradable donde descansar. Los ángulos han sido afinados delicadamente para ofrecer una buena respuesta con el mínimo de movimiento”.
Para diseñar el mando de Xbox Series X también se tuvo en cuenta el tamaño de las manos de todos los jugadores. En este sentido, los cambios van destinados a los usuarios con manos más pequeñas, que deberían sentir una mayor comodidad gracias al redondeo de los botones superiores y la reducción de los bordes de los gatillos. Asimismo, ambas partes del periférico ganan un patrón táctil de puntos, una mejora que hasta ahora solo se ofrecía en algunas ediciones especiales del mando de Xbox One.
Los mandos de Xbox siempre han sido algo más que el periférico de la consola, también se usan en PC y dispositivos móviles con Android y iOS. Por ese motivo, el mando de Xbox Series X cuenta con tecnología Bluetooth de baja energía (BTLE, por sus siglas en inglés), memoria para múltiples dispositivos y puerto USB-C. El mando aún no tiene precio, pero en caso de querer un segundo control sin gastar un céntimo adicional siempre se podrá usar el de Xbox One (incluyendo los Elite).
En cuanto al botón compartir, lo encontramos situado en el centro del mando y su función será muy similar al mismo que ya equipa DualShock 4. Eso significa que los jugadores de Xbox Series X tendrán la posibilidad de usarlo para capturar y compartir de forma instantánea momentos o experiencias que vivan dentro de un juego. Según explica Whitaker, será tan fácil como hacer una captura de pantalla o grabar un vídeo sin recurrir a menús en pantalla y después compartir el contenido en redes sociales o directamente con amigos.
Los dos cambios más notables del mando de Xbox Series X respecto a sus antecesores los encontramos en el pad direccional (también conocido como D-pad o cruceta) y en el nuevo botón para compartir. También hay pequeños cambios que a primera vista cuestan más de ver como las nuevas texturas, el redondeo de los botones superiores o la reducción de los bordes de los gatillos.
“El nuevo D-pad está diseñado para impulsar el rendimiento y la accesibilidad para todas las formas de jugar diferentes (y es una de mis partes favoritas del nuevo diseño)”, explica Ryan Whitaker, diseñador sénior de Xbox. “Al ver la gran variedad de géneros y estilos de juego existentes, nos dimos cuenta de que el D-pad se utiliza de distintas maneras. Para algunos títulos, los jugadores necesitan tener direcciones cardinales claramente marcadas (arriba, abajo, izquierda, derecha) y con bordes bien definidos. La cruceta es perfecta para ello”.
“Tomando como base lo que aprendimos del mando Elite y viendo cómo las personas usan el D-pad, creamos un diseño híbrido para sacar lo mejor de ambos”, añade Whitaker. “La base ligeramente más profunda le brinda al pulgar un 'sitio' agradable donde descansar. Los ángulos han sido afinados delicadamente para ofrecer una buena respuesta con el mínimo de movimiento”.
Para diseñar el mando de Xbox Series X también se tuvo en cuenta el tamaño de las manos de todos los jugadores. En este sentido, los cambios van destinados a los usuarios con manos más pequeñas, que deberían sentir una mayor comodidad gracias al redondeo de los botones superiores y la reducción de los bordes de los gatillos. Asimismo, ambas partes del periférico ganan un patrón táctil de puntos, una mejora que hasta ahora solo se ofrecía en algunas ediciones especiales del mando de Xbox One.
Los mandos de Xbox siempre han sido algo más que el periférico de la consola, también se usan en PC y dispositivos móviles con Android y iOS. Por ese motivo, el mando de Xbox Series X cuenta con tecnología Bluetooth de baja energía (BTLE, por sus siglas en inglés), memoria para múltiples dispositivos y puerto USB-C. El mando aún no tiene precio, pero en caso de querer un segundo control sin gastar un céntimo adicional siempre se podrá usar el de Xbox One (incluyendo los Elite).
En cuanto al botón compartir, lo encontramos situado en el centro del mando y su función será muy similar al mismo que ya equipa DualShock 4. Eso significa que los jugadores de Xbox Series X tendrán la posibilidad de usarlo para capturar y compartir de forma instantánea momentos o experiencias que vivan dentro de un juego. Según explica Whitaker, será tan fácil como hacer una captura de pantalla o grabar un vídeo sin recurrir a menús en pantalla y después compartir el contenido en redes sociales o directamente con amigos.
Saludos.
(imagen)
Todavía no entiendo a quienes no defienden las pilas recargables frente a soluciones propietarias para dispositivos donde no aporta nada un formato u otro, como es el caso.
Se ve en el video, lleva la tapa de pilas como en los anteriores.
al final el innovar con los mandos o te arriesgas al más puro estilo Nintendo o al final terminas con un mando caro, complejo y con añadidos que raramente se les saca provecho... si es que se llegan a usar para algo más que un botón.