Después de estrenos como La Casa del Dragón y El Señor de los Anillos: los Anillos de Poder, es difícil encontrar una nueva propuesta que pueda competir con su repercusión, pero eso no significa que octubre está huérfano de producciones interesantes. Más bien al contrario, tenemos por delante el debut de The Peripheral, una serie basada en el libro homónimo de William Gibson y The Bear, un drama culinario que llega a Disney+ avalado por la crítica.
Como añadido de última hora (HBO Max anunció ayer su calendario de octubre), tenemos Rogue Heroes, la nueva serie de Steven Knight (Peaky Blinders). El escritor mantiene la ambientación histórica, pero en lugar de una serie sobre una familia de gánsteres de Birmingham nos explicará, mediante una miniserie, la creación del SAS, una de las fuerzas especiales más conocidas y respetadas del mundo. En Apple TV+ tenemos otra adaptación, la de Shantaram, una novela de Gregory David Roberts, escritor que explica cómo escapó de una prisión australiana para terminar en los barrios más pobres de Bombay.
También echaremos un ojo a El club de la medianoche, la nueva serie de terror de Mike Flanagan para Netflix, y en Movistar+ tenemos El Inmortal, un thriller sobre la banda de narcotraficantes Los Miami. En octubre también regresan o se estrenan las series de los canales lineales. Eso significa que vuelven FBI, NCIS, The Good Doctor y compañía. No es un procedimental pero retorna por última vez The Walking Dead, que el 3 de octubre estrenará en AMC la tercera parte de la undécima y última temporada.
Sobre The Peripheral, que pondrá en marcha su primera temporada el 21 de octubre, se ha hablado bastante poco, como mínimo hasta ahora. Posiblemente esto se deba a que todos los titulares los acaparan La Casa del Dragón y El Señor de los Anillos: los Anillos de Poder. Además, Amazon no quiere desviar la atención que hay sobre su serie ambientada en el universo de J. R. R. Tolkien, pues su último capítulo se emitirá el 14 de octubre, justo una semana antes de que empiece The Peripheral, producción que cogerá el testigo.
The Peripheral es una serie de ciencia ficción ambientada en dos futuros diferentes. En el más cercano a nosotros tenemos a Flynne Fisher (Chloë Grace Moretz), una joven que a pesar de su inteligencia y ambición se encuentra atrapada en la América rural por la falta de posibilidades, las desigualdades y la necesidad de cuidar a su madre. Flynne se gana la vida como puede, trabaja en una tienda local de impresión en 3D y de vez en cuando consigue un ingreso extra jugando para los ricos a videojuegos y mundos virtuales.
Además de con su madre, Flynne vive con su hermano Burton Fisher (Jack Reynor), que recibe una ayuda económica del Departamento de Veteranos debido al daño neurológico que sufrió mientras servía en Reconocimiento Háptico, una unidad de élite del Cuerpo de Marines. Nos encontramos ante unos Estados Unidos transformados en un paraíso liberal, donde las grandes corporaciones han conseguido la privatización de todos los servicios.
En el futuro lejano, después de que la Tierra haya sufrido un proceso apocalíptico llamado jackpot que a lo largo de las décadas mató a la mayor parte de la raza humana, tenemos a Wilf Netherton (Gary Carr). En este mundo, donde solo sobreviven los más ricos, Netherton es un publicista afincado en Londres que trabaja para Daedra West, una artista, celebridad y diplomática, que está a punto de provocar un desastre diplomático debido a una extravagante performance que está llevando a cabo en la Gran mancha de basura en el Pacífico, una micronación cuyos ciudadanos han llevado la modificación corporal al extremo.
Estos dos mundos terminarán conectados y rápidamente la serie se convertirá en un thriller donde el misterio se centra en descubrir la autoría de un asesinato. A medida que avance la historia, veremos como el futuro juega con el pasado gracias a los viajes en el tiempo, un concepto que en la novela de William Gibson se realiza de una forma un poco novedosa. No se trata de viajar físicamente del futuro al pasado. En el mundo de Netherton echar un vistazo al pasado es una actividad relativamente frecuente gracias a los periféricos, unos dispositivos que permiten almacenar la mente humana en un cuerpo remoto.
The Peripheral no es un libro (o serie) sobre viajes en el tiempo, es más bien una novela sobre cómo el futuro ve y juega con el pasado. Con este libro Gibson no ha recuperado el cyberpunk más clásico, un subgénero del que es pionero gracias a Quemando cromo, un relato corto de 1982, y el libro Neuromancer (1984), pero sí que ha mantenido la inspiración en el cine negro para crear la atmósfera de un thriller. Gibson tampoco ha perdido su toque para construir mundos, en este caso dos futuros, que desde nuestro punto de vista pueden ser muy convincentes. Sus personajes también lo son, especialmente Flynne.
Como novela, el único problema que tiene The Peripheral es que cuesta mucho entrar en ella. Un servidor lo ha intentado dos veces y a la tercera he llegado a un punto donde por fin empiezo a entender algo. Se puede poner en duda la comprensión lectora, pero lo cierto es que Gibson no ofrece ningún tipo de introducción previa, así que te encuentras viajando por dos detallados futuros donde las cosas funcionan de manera diferente. Incluso el lenguaje cambia. ¿Qué es un polt? Gibson no os lo explicará, pero lo acabaréis descubriendo.
Este proceso de revelación puede ser un reto, pero si le das una oportunidad termina siendo placentero y ofrece una recompensa. Está por ver cómo abordará la serie este desafío. Llegados a este punto, hay dos buenas noticias. Entre los productores ejecutivos de la serie encontramos a Jonathan Nolan y Lisa Joy, responsables de Westworld (que ahora mismo ya trabajan en la serie de Fallout), mientras que el creador y guionista es Scott Smith, un escritor que en el pasado adaptó con éxito su propia novela llamada Un plan sencillo (1993). La cinta, dirigida por Sam Rami, fue nominada al Óscar al mejor guion adaptado.
El guiso de The Peripheral tiene muy buenos ingredientes y su fuego está alimentado con el dinero de Amazon, que no suele reparar en gastos. En un thriller donde la ciencia ficción es un elemento muy importante tener un presupuesto generoso es vital. Si nada falla, la serie tendrá más de una temporada. The Peripheral es la primera entrega de una trilogía llamada The Jackpot y el segundo libro, Agency (2020), ya se encuentra disponible en inglés. El tercero aún no tiene nombre final y se desconoce cuándo será publicado.
The Bear, una nueva producción de FX para Disney+, pondrá en marcha su primera temporada el 5 de octubre. Nos encontramos ante una serie que tampoco ha dado mucho que hablar, algo que en este caso es comprensible si tenemos en cuenta que se trata de un drama protagonizado por “un joven chef procedente del mundo de la alta cocina que regresa a Chicago para llevar el restaurante de bocadillos de su familia”. Detrás de esta descripción poco alentadora tenemos un producto alabado por crítica y público.
La historia de The Bear tiene como protagonista a Carmen "Carmy" Berzatto (Jeremy Allen White), un chef que deja el mundo de la alta cocina donde era una estrella en ascenso para volver a casa en Chicago y ponerse al frente de The Original Beef of Chicagoland, un local de bocadillos, después de que su hermano Mikey se suicide. La familia quiere abandonar el negocio, es un pozo de dinero y los recuerdos que lo rodean son dolorosos, pero Carmy lo ve como un nuevo comienzo. Nuestro cocinero quiere darle la vuelta a la tortilla, en parte porque considera que esto permitirá mantener viva la memoria de su hermano.
Para remontar la situación, Carmy está decidido a hacer grandes cambios que desde el principio no serán bien recibidos por Richard "Richie" Jerimovich (Ebon Moss-Bachrach), el mejor amigo del suicida. Entre las novedades que introduce el joven chef tenemos un menú revisado y la contratación de Sydney Adamu (Ayo Edebiri), una talentosa pero inexperta cocinera salida del The Culinary Institute of America, cuyo fichaje es recibido con recelo por Tina (Liza Colón-Zayas), una veterana del restaurante. Quien acepta mejor los cambios es Marcus (Lionel Boyce), que reorienta su trabajo gracias a la llegada del chef.
A medida que Carmy avanza en su deseo de mantener en funcionamiento The Original Beef of Chicagoland, se da cuenta de la deuda que arrastra el restaurante y de los compromisos que su problemático hermano tenía. A ello debemos sumarle los nuevos miembros de la plantilla y los cambios culturales que Carmy introduce en la cocina. Una serie de dificultades que llevarán al joven cocinero a enfrentarse a sus propios demonios personales y descubrir que la tarea que tiene por delante es mucho más complicada de lo que esperaba.
Los ocho episodios que componen la primera temporada de The Bear duran media hora, a excepción del último que sube a 50 minutos. A medida que el espectador avanza por los capítulos será testigo de las dinámicas cotidianas de cada uno de los personajes, sus problemas, miedos, conflictos… elementos que se mezclarán con las intensas escenas de la cocina, que es donde se desarrolla la mayor parte del metraje. Según la crítica, The Bear acierta de pleno a la hora de trasladar la tensión de una cocina a la pequeña pantalla y en su séptimo capítulo se atreve con un metraje filmado en un único plano secuencia.
La protagonista de la serie es la cocina y… Chicago. Cierto es que apenas se abandona el restaurante, pero la ciudad nos deja planos y música como la de Wilco, Serengeti y Sufjan Stevens. Jeremy Allen White, el protagonista de The Bear, no es hijo de la ciudad del viento, pero en la ficción vuelve a ella después de dar vida en Shameless a Phillip “Lip” Gallagher, un orgulloso vecino del barrio South Side de Chicago.
Rogue Heroes, una miniserie de seis capítulos que HBO Max estrenará el 30 de octubre, es una adaptación de Los hombres del SAS: Héroes y canallas en el cuerpo de operaciones especiales británico, un libro escrito por el historiador y columnista Ben Macintyre que se describe como “la primera historia autorizada de la más famosa y misteriosa organización militar del mundo”. El libro es fruto de un trabajo de investigación durante el cual Macintyre accedió a los archivos secretos del SAS. El encargado de adaptar el texto ha sido Steven Knight.
El SAS (Special Air Service) británico se concibió durante la Segunda Guerra Mundial en el Norte de África. La idea inicial, que puso sobre la mesa el teniente David Stirling, era la de crear un pequeño contingente de asalto para realizar misiones de sabotaje en territorio enemigo, causar el máximo daño posible y una vez completada la operación escapar por el desierto. Según la sinopsis del libro, entre los primeros miembros del SAS había militares tradicionales, “pero la mayoría de sus reclutas, de todas las nacionalidades y pelajes, eran inadaptados, granujas puestos a jugarse heroicamente la vida [...]”. También eran capaces de ejecutar acciones brutales y de cometer grandes errores.
“Los reclutas eran singulares, excéntricos incluso, gente que no encajaba fácilmente en las filas del ejército, inadaptados y depravados con instinto para la guerra encubierta y poco tiempo para convenciones, en parte soldados y en parte espías, guerreros rebeldes”, escribe Macintyre en su libro. “Eran, como decía un exalto mando del SAS, ‘los despojos de las escuelas públicas y las cárceles’”.
Lo que nació como un pequeño contingente de asalto, acabaría convirtiéndose en uno de los comandos más formidables de la Segunda Guerra Mundial, así como el prototipo para las fuerzas especiales de todo el mundo. En el momento de su creación, el SAS no fue bien recibido por los altos mandos británicos de mentalidad tradicional que aún pensaban en la guerra como un combate simétrico. Sin embargo, el tiempo demostró que la idea de Stirling no era tan descabellada como parecía. En la guerra moderna, las fuerzas especiales son vitales.
En la serie además de David Stirling (Connor Swindells), la historia de la creación del SAS británico se explica a través de otros dos fundadores, Paddy Mayne (Jack O’Connell) y Jock Lewes (Alfie Allen).
La apuesta de Apple TV+ por las series es fuerte y especialmente centrada en las basadas en libros. Un nuevo ejemplo de ello es Shantaram, que llegará a la plataforma de streaming el 21 de octubre. En esta ocasión quien cobra por la licencia es Gregory David Roberts, escritor australiano que se inspiró en su propia experiencia (a la que añadió un poco de inventiva) para dar vida a la novela Shantaram. El encargado de adaptar el libro es Steve Lightfoot, productor ejecutivo de Hannibal y responsable de The Punisher.
En 1978, Roberts (Charlie Hunnam) fue sentenciado a 19 años de prisión después de que un tribunal australiano lo declarase culpable de una serie de atracos a mano armada, actividad que realizaba para financiar su adicción a la heroína. En 1980 se escapa de la prisión de Pentridge y se convierte en uno de los hombres más buscados de Australia. Poco después, Roberts aparece en Bombay con un pasaporte falso y bajo el nombre de Lindsay “Lin” Ford. La India solo tenía que ser una escala de un viaje hasta Alemania, pero el fugitivo decide quedarse.
Durante su estancia en Bombay, Roberts/Lindsay entabla amistad con diferentes personajes y después de una serie de incidentes conoce de primera mano los barrios más pobres de la ciudad, lo que le permite eludir más fácilmente a las autoridades y entrar en contacto con la comunidad local, en la que se integrará e intentará ayudar. Vivir en las barriadas de Bombay durante los años 80 significa ser testigo de brotes de cólera, tratar con leprosos y conocer los conflictos étnicos de unos barrios densamente poblados donde vive gente muy diversa.
La vida de Lindsay en los barrios pobres de Bombay lo llevará a entrar en contacto con el mundo criminal y a conocer una de las más grandes y viejas prisiones de la ciudad, donde el trato a los reclusos dista de ser amable o mínimamente humanitario.
Los editores venden Shantaram como una “historia real de la transformación de un hombre”, pero lo cierto es que nos encontramos ante una novela, no una autobiografía. Lo contado en Shantaram parte de una experiencia real, es cierto que Roberts atracaba bancos, se fugó de la cárcel y terminó en Bombay, pero el propio escritor ha reconocido que en su narración hay mucha creación. Gran parte del mérito de Roberts ha consistido en escribir una novela de ficción que al leerla parece ser autobiográfica. Shantaram tiene una continuación llamada La sombra de la montaña.
Desde hace tres años (no consecutivos) Mike Flanagan ofrece a los suscriptores de Netflix una serie de terror con tintes sobrenaturales. Primero llegaron dos entregas de la antología The Haunting of con Hill House (2018) y Bly Manor (2020), ambas basadas en una novela, después fue el turno de Misa de medianoche (2021) y el 7 de octubre de 2022 le toca a El club de la medianoche, que adapta la serie de novelas homónima de Christopher Pike, un escritor de literatura juvenil conocido por sus thrillers de misterio y terror sobrenatural.
El club de la medianoche sigue a un grupo de ocho jóvenes terminales que residen en Brightcliffe, un hospicio dirigido por la enigmática doctora Georgina Stanton (Heather Langenkamp). Para lidiar con su condición, deciden crear el Midnight Club (Club de la medianoche), un círculo exclusivo que se reúne para explicar historias de miedo. Una noche hacen un pacto: el primero en morir debe enviar una señal desde el más allá. Después de que uno de ellos fallezca, se pondrán en marcha una serie de extraños sucesos.
El 27 de octubre llegará a Movistar+ El Inmortal, un drama criminal creado por José Manuel Lorenzo (La caza. Monteperdido) con un guion escrito por Diego Sotelo (Fariña) y David Moreno (Fariña), mientras que la dirección corre a cargo de David Ulloa (La Peste) y Rafa Montesinos (Parot). La serie está inspirada en la vida de Juan Carlos Peña, líder de la banda Los Miami, un grupo criminal dedicado a la extorsión, el control de las discotecas y el tráfico de drogas que operó en Madrid durante los años 90.
El Inmortal narra el ascenso y la caída de un reinado delictivo, pero no es una biografía. A pesar de ello, para dar vida a la serie José Manuel Lorenzo contactó con Juan Carlos Peña y consiguió que tanto él como otros miembros de Los Miami estuvieran abiertos a consultas para que todo lo narrado fuera lo más verídico posible. “No quería hacer una serie de narcos, sino de personajes que vivieron esa época y el ascenso de lo más bajo a lo más alto en ese mundo”, dice Lorenzo a El País. “Contar con cierto grado de empatía el recorrido vital de este personaje y su banda, y lo que supuso para la España de los noventa”.
Si Los Miami consiguieron levantar un imperio criminal fue en parte gracias a la España de los 90, aquella que en algunos aspectos pasó de la libertad al libertinaje. La banda que en aquel momento dirigía Juan Carlos Peña, alias El Inmortal, no se movía únicamente por los bajos fondos de Madrid. Su nombre era conocido gracias a su actividad, que incluía el ajuste de cuentas y labores de seguridad en locales distinguidos. Incluso eran famosos. Por ejemplo, gracias a unas escuchas policiales sabemos que Ana Obregón le pidió a su guardaespaldas que contratara a Los Miami para dar una paliza al presentador Jaime Cantizano.
Lo que empezó siendo una banda dedicada a la coacción, amenazas y ajustes de cuentas (asesinatos incluidos), evolucionó a partir del nuevo siglo al negocio de las drogas en los locales nocturnos, con especial atención a las discotecas de Madrid y el litoral levantino. Como suele pasar con la mayoría de estos imperios criminales, con el tiempo Los Miami sufrieron diferentes golpes policiales, pero su nombre aún no ha muerto del todo. O eso parece (en 2018 un antiguo miembro de la banda fue asesinado y no se descarta un ajuste de cuentas).
A continuación, el calendario de octubre y la lista con las series que durante el último mes han sido renovadas o canceladas:
Netflix (rojo), HBO (negro), Movistar (azul arándano), Disney+ (azul turquesa), Prime Video (verde), Apple TV+ (gris), Starz (gris topo), Filmin (morado intenso) y canales lineales (amarillo).
Como añadido de última hora (HBO Max anunció ayer su calendario de octubre), tenemos Rogue Heroes, la nueva serie de Steven Knight (Peaky Blinders). El escritor mantiene la ambientación histórica, pero en lugar de una serie sobre una familia de gánsteres de Birmingham nos explicará, mediante una miniserie, la creación del SAS, una de las fuerzas especiales más conocidas y respetadas del mundo. En Apple TV+ tenemos otra adaptación, la de Shantaram, una novela de Gregory David Roberts, escritor que explica cómo escapó de una prisión australiana para terminar en los barrios más pobres de Bombay.
También echaremos un ojo a El club de la medianoche, la nueva serie de terror de Mike Flanagan para Netflix, y en Movistar+ tenemos El Inmortal, un thriller sobre la banda de narcotraficantes Los Miami. En octubre también regresan o se estrenan las series de los canales lineales. Eso significa que vuelven FBI, NCIS, The Good Doctor y compañía. No es un procedimental pero retorna por última vez The Walking Dead, que el 3 de octubre estrenará en AMC la tercera parte de la undécima y última temporada.
Sobre The Peripheral, que pondrá en marcha su primera temporada el 21 de octubre, se ha hablado bastante poco, como mínimo hasta ahora. Posiblemente esto se deba a que todos los titulares los acaparan La Casa del Dragón y El Señor de los Anillos: los Anillos de Poder. Además, Amazon no quiere desviar la atención que hay sobre su serie ambientada en el universo de J. R. R. Tolkien, pues su último capítulo se emitirá el 14 de octubre, justo una semana antes de que empiece The Peripheral, producción que cogerá el testigo.
The Peripheral es una serie de ciencia ficción ambientada en dos futuros diferentes. En el más cercano a nosotros tenemos a Flynne Fisher (Chloë Grace Moretz), una joven que a pesar de su inteligencia y ambición se encuentra atrapada en la América rural por la falta de posibilidades, las desigualdades y la necesidad de cuidar a su madre. Flynne se gana la vida como puede, trabaja en una tienda local de impresión en 3D y de vez en cuando consigue un ingreso extra jugando para los ricos a videojuegos y mundos virtuales.
Además de con su madre, Flynne vive con su hermano Burton Fisher (Jack Reynor), que recibe una ayuda económica del Departamento de Veteranos debido al daño neurológico que sufrió mientras servía en Reconocimiento Háptico, una unidad de élite del Cuerpo de Marines. Nos encontramos ante unos Estados Unidos transformados en un paraíso liberal, donde las grandes corporaciones han conseguido la privatización de todos los servicios.
En el futuro lejano, después de que la Tierra haya sufrido un proceso apocalíptico llamado jackpot que a lo largo de las décadas mató a la mayor parte de la raza humana, tenemos a Wilf Netherton (Gary Carr). En este mundo, donde solo sobreviven los más ricos, Netherton es un publicista afincado en Londres que trabaja para Daedra West, una artista, celebridad y diplomática, que está a punto de provocar un desastre diplomático debido a una extravagante performance que está llevando a cabo en la Gran mancha de basura en el Pacífico, una micronación cuyos ciudadanos han llevado la modificación corporal al extremo.
Estos dos mundos terminarán conectados y rápidamente la serie se convertirá en un thriller donde el misterio se centra en descubrir la autoría de un asesinato. A medida que avance la historia, veremos como el futuro juega con el pasado gracias a los viajes en el tiempo, un concepto que en la novela de William Gibson se realiza de una forma un poco novedosa. No se trata de viajar físicamente del futuro al pasado. En el mundo de Netherton echar un vistazo al pasado es una actividad relativamente frecuente gracias a los periféricos, unos dispositivos que permiten almacenar la mente humana en un cuerpo remoto.
The Peripheral no es un libro (o serie) sobre viajes en el tiempo, es más bien una novela sobre cómo el futuro ve y juega con el pasado. Con este libro Gibson no ha recuperado el cyberpunk más clásico, un subgénero del que es pionero gracias a Quemando cromo, un relato corto de 1982, y el libro Neuromancer (1984), pero sí que ha mantenido la inspiración en el cine negro para crear la atmósfera de un thriller. Gibson tampoco ha perdido su toque para construir mundos, en este caso dos futuros, que desde nuestro punto de vista pueden ser muy convincentes. Sus personajes también lo son, especialmente Flynne.
Como novela, el único problema que tiene The Peripheral es que cuesta mucho entrar en ella. Un servidor lo ha intentado dos veces y a la tercera he llegado a un punto donde por fin empiezo a entender algo. Se puede poner en duda la comprensión lectora, pero lo cierto es que Gibson no ofrece ningún tipo de introducción previa, así que te encuentras viajando por dos detallados futuros donde las cosas funcionan de manera diferente. Incluso el lenguaje cambia. ¿Qué es un polt? Gibson no os lo explicará, pero lo acabaréis descubriendo.
Este proceso de revelación puede ser un reto, pero si le das una oportunidad termina siendo placentero y ofrece una recompensa. Está por ver cómo abordará la serie este desafío. Llegados a este punto, hay dos buenas noticias. Entre los productores ejecutivos de la serie encontramos a Jonathan Nolan y Lisa Joy, responsables de Westworld (que ahora mismo ya trabajan en la serie de Fallout), mientras que el creador y guionista es Scott Smith, un escritor que en el pasado adaptó con éxito su propia novela llamada Un plan sencillo (1993). La cinta, dirigida por Sam Rami, fue nominada al Óscar al mejor guion adaptado.
El guiso de The Peripheral tiene muy buenos ingredientes y su fuego está alimentado con el dinero de Amazon, que no suele reparar en gastos. En un thriller donde la ciencia ficción es un elemento muy importante tener un presupuesto generoso es vital. Si nada falla, la serie tendrá más de una temporada. The Peripheral es la primera entrega de una trilogía llamada The Jackpot y el segundo libro, Agency (2020), ya se encuentra disponible en inglés. El tercero aún no tiene nombre final y se desconoce cuándo será publicado.
The Bear, una nueva producción de FX para Disney+, pondrá en marcha su primera temporada el 5 de octubre. Nos encontramos ante una serie que tampoco ha dado mucho que hablar, algo que en este caso es comprensible si tenemos en cuenta que se trata de un drama protagonizado por “un joven chef procedente del mundo de la alta cocina que regresa a Chicago para llevar el restaurante de bocadillos de su familia”. Detrás de esta descripción poco alentadora tenemos un producto alabado por crítica y público.
La historia de The Bear tiene como protagonista a Carmen "Carmy" Berzatto (Jeremy Allen White), un chef que deja el mundo de la alta cocina donde era una estrella en ascenso para volver a casa en Chicago y ponerse al frente de The Original Beef of Chicagoland, un local de bocadillos, después de que su hermano Mikey se suicide. La familia quiere abandonar el negocio, es un pozo de dinero y los recuerdos que lo rodean son dolorosos, pero Carmy lo ve como un nuevo comienzo. Nuestro cocinero quiere darle la vuelta a la tortilla, en parte porque considera que esto permitirá mantener viva la memoria de su hermano.
Para remontar la situación, Carmy está decidido a hacer grandes cambios que desde el principio no serán bien recibidos por Richard "Richie" Jerimovich (Ebon Moss-Bachrach), el mejor amigo del suicida. Entre las novedades que introduce el joven chef tenemos un menú revisado y la contratación de Sydney Adamu (Ayo Edebiri), una talentosa pero inexperta cocinera salida del The Culinary Institute of America, cuyo fichaje es recibido con recelo por Tina (Liza Colón-Zayas), una veterana del restaurante. Quien acepta mejor los cambios es Marcus (Lionel Boyce), que reorienta su trabajo gracias a la llegada del chef.
A medida que Carmy avanza en su deseo de mantener en funcionamiento The Original Beef of Chicagoland, se da cuenta de la deuda que arrastra el restaurante y de los compromisos que su problemático hermano tenía. A ello debemos sumarle los nuevos miembros de la plantilla y los cambios culturales que Carmy introduce en la cocina. Una serie de dificultades que llevarán al joven cocinero a enfrentarse a sus propios demonios personales y descubrir que la tarea que tiene por delante es mucho más complicada de lo que esperaba.
Los ocho episodios que componen la primera temporada de The Bear duran media hora, a excepción del último que sube a 50 minutos. A medida que el espectador avanza por los capítulos será testigo de las dinámicas cotidianas de cada uno de los personajes, sus problemas, miedos, conflictos… elementos que se mezclarán con las intensas escenas de la cocina, que es donde se desarrolla la mayor parte del metraje. Según la crítica, The Bear acierta de pleno a la hora de trasladar la tensión de una cocina a la pequeña pantalla y en su séptimo capítulo se atreve con un metraje filmado en un único plano secuencia.
La protagonista de la serie es la cocina y… Chicago. Cierto es que apenas se abandona el restaurante, pero la ciudad nos deja planos y música como la de Wilco, Serengeti y Sufjan Stevens. Jeremy Allen White, el protagonista de The Bear, no es hijo de la ciudad del viento, pero en la ficción vuelve a ella después de dar vida en Shameless a Phillip “Lip” Gallagher, un orgulloso vecino del barrio South Side de Chicago.
Rogue Heroes, una miniserie de seis capítulos que HBO Max estrenará el 30 de octubre, es una adaptación de Los hombres del SAS: Héroes y canallas en el cuerpo de operaciones especiales británico, un libro escrito por el historiador y columnista Ben Macintyre que se describe como “la primera historia autorizada de la más famosa y misteriosa organización militar del mundo”. El libro es fruto de un trabajo de investigación durante el cual Macintyre accedió a los archivos secretos del SAS. El encargado de adaptar el texto ha sido Steven Knight.
El SAS (Special Air Service) británico se concibió durante la Segunda Guerra Mundial en el Norte de África. La idea inicial, que puso sobre la mesa el teniente David Stirling, era la de crear un pequeño contingente de asalto para realizar misiones de sabotaje en territorio enemigo, causar el máximo daño posible y una vez completada la operación escapar por el desierto. Según la sinopsis del libro, entre los primeros miembros del SAS había militares tradicionales, “pero la mayoría de sus reclutas, de todas las nacionalidades y pelajes, eran inadaptados, granujas puestos a jugarse heroicamente la vida [...]”. También eran capaces de ejecutar acciones brutales y de cometer grandes errores.
“Los reclutas eran singulares, excéntricos incluso, gente que no encajaba fácilmente en las filas del ejército, inadaptados y depravados con instinto para la guerra encubierta y poco tiempo para convenciones, en parte soldados y en parte espías, guerreros rebeldes”, escribe Macintyre en su libro. “Eran, como decía un exalto mando del SAS, ‘los despojos de las escuelas públicas y las cárceles’”.
Lo que nació como un pequeño contingente de asalto, acabaría convirtiéndose en uno de los comandos más formidables de la Segunda Guerra Mundial, así como el prototipo para las fuerzas especiales de todo el mundo. En el momento de su creación, el SAS no fue bien recibido por los altos mandos británicos de mentalidad tradicional que aún pensaban en la guerra como un combate simétrico. Sin embargo, el tiempo demostró que la idea de Stirling no era tan descabellada como parecía. En la guerra moderna, las fuerzas especiales son vitales.
En la serie además de David Stirling (Connor Swindells), la historia de la creación del SAS británico se explica a través de otros dos fundadores, Paddy Mayne (Jack O’Connell) y Jock Lewes (Alfie Allen).
La apuesta de Apple TV+ por las series es fuerte y especialmente centrada en las basadas en libros. Un nuevo ejemplo de ello es Shantaram, que llegará a la plataforma de streaming el 21 de octubre. En esta ocasión quien cobra por la licencia es Gregory David Roberts, escritor australiano que se inspiró en su propia experiencia (a la que añadió un poco de inventiva) para dar vida a la novela Shantaram. El encargado de adaptar el libro es Steve Lightfoot, productor ejecutivo de Hannibal y responsable de The Punisher.
En 1978, Roberts (Charlie Hunnam) fue sentenciado a 19 años de prisión después de que un tribunal australiano lo declarase culpable de una serie de atracos a mano armada, actividad que realizaba para financiar su adicción a la heroína. En 1980 se escapa de la prisión de Pentridge y se convierte en uno de los hombres más buscados de Australia. Poco después, Roberts aparece en Bombay con un pasaporte falso y bajo el nombre de Lindsay “Lin” Ford. La India solo tenía que ser una escala de un viaje hasta Alemania, pero el fugitivo decide quedarse.
Durante su estancia en Bombay, Roberts/Lindsay entabla amistad con diferentes personajes y después de una serie de incidentes conoce de primera mano los barrios más pobres de la ciudad, lo que le permite eludir más fácilmente a las autoridades y entrar en contacto con la comunidad local, en la que se integrará e intentará ayudar. Vivir en las barriadas de Bombay durante los años 80 significa ser testigo de brotes de cólera, tratar con leprosos y conocer los conflictos étnicos de unos barrios densamente poblados donde vive gente muy diversa.
La vida de Lindsay en los barrios pobres de Bombay lo llevará a entrar en contacto con el mundo criminal y a conocer una de las más grandes y viejas prisiones de la ciudad, donde el trato a los reclusos dista de ser amable o mínimamente humanitario.
Los editores venden Shantaram como una “historia real de la transformación de un hombre”, pero lo cierto es que nos encontramos ante una novela, no una autobiografía. Lo contado en Shantaram parte de una experiencia real, es cierto que Roberts atracaba bancos, se fugó de la cárcel y terminó en Bombay, pero el propio escritor ha reconocido que en su narración hay mucha creación. Gran parte del mérito de Roberts ha consistido en escribir una novela de ficción que al leerla parece ser autobiográfica. Shantaram tiene una continuación llamada La sombra de la montaña.
Desde hace tres años (no consecutivos) Mike Flanagan ofrece a los suscriptores de Netflix una serie de terror con tintes sobrenaturales. Primero llegaron dos entregas de la antología The Haunting of con Hill House (2018) y Bly Manor (2020), ambas basadas en una novela, después fue el turno de Misa de medianoche (2021) y el 7 de octubre de 2022 le toca a El club de la medianoche, que adapta la serie de novelas homónima de Christopher Pike, un escritor de literatura juvenil conocido por sus thrillers de misterio y terror sobrenatural.
El club de la medianoche sigue a un grupo de ocho jóvenes terminales que residen en Brightcliffe, un hospicio dirigido por la enigmática doctora Georgina Stanton (Heather Langenkamp). Para lidiar con su condición, deciden crear el Midnight Club (Club de la medianoche), un círculo exclusivo que se reúne para explicar historias de miedo. Una noche hacen un pacto: el primero en morir debe enviar una señal desde el más allá. Después de que uno de ellos fallezca, se pondrán en marcha una serie de extraños sucesos.
El 27 de octubre llegará a Movistar+ El Inmortal, un drama criminal creado por José Manuel Lorenzo (La caza. Monteperdido) con un guion escrito por Diego Sotelo (Fariña) y David Moreno (Fariña), mientras que la dirección corre a cargo de David Ulloa (La Peste) y Rafa Montesinos (Parot). La serie está inspirada en la vida de Juan Carlos Peña, líder de la banda Los Miami, un grupo criminal dedicado a la extorsión, el control de las discotecas y el tráfico de drogas que operó en Madrid durante los años 90.
El Inmortal narra el ascenso y la caída de un reinado delictivo, pero no es una biografía. A pesar de ello, para dar vida a la serie José Manuel Lorenzo contactó con Juan Carlos Peña y consiguió que tanto él como otros miembros de Los Miami estuvieran abiertos a consultas para que todo lo narrado fuera lo más verídico posible. “No quería hacer una serie de narcos, sino de personajes que vivieron esa época y el ascenso de lo más bajo a lo más alto en ese mundo”, dice Lorenzo a El País. “Contar con cierto grado de empatía el recorrido vital de este personaje y su banda, y lo que supuso para la España de los noventa”.
Si Los Miami consiguieron levantar un imperio criminal fue en parte gracias a la España de los 90, aquella que en algunos aspectos pasó de la libertad al libertinaje. La banda que en aquel momento dirigía Juan Carlos Peña, alias El Inmortal, no se movía únicamente por los bajos fondos de Madrid. Su nombre era conocido gracias a su actividad, que incluía el ajuste de cuentas y labores de seguridad en locales distinguidos. Incluso eran famosos. Por ejemplo, gracias a unas escuchas policiales sabemos que Ana Obregón le pidió a su guardaespaldas que contratara a Los Miami para dar una paliza al presentador Jaime Cantizano.
Lo que empezó siendo una banda dedicada a la coacción, amenazas y ajustes de cuentas (asesinatos incluidos), evolucionó a partir del nuevo siglo al negocio de las drogas en los locales nocturnos, con especial atención a las discotecas de Madrid y el litoral levantino. Como suele pasar con la mayoría de estos imperios criminales, con el tiempo Los Miami sufrieron diferentes golpes policiales, pero su nombre aún no ha muerto del todo. O eso parece (en 2018 un antiguo miembro de la banda fue asesinado y no se descarta un ajuste de cuentas).
A continuación, el calendario de octubre y la lista con las series que durante el último mes han sido renovadas o canceladas:
- Renovadas: Ciclos (T4), Harley Quinn (T4), Teletubbies (revivida por Netflix), Pretty Little Liars: Original Sin (T2), The Handmaid's Tale (T6 y última), Das Boot (T4), Reservation Dogs (T3), la nueva serie de Vince Gilligan (Breaking Bad, Better Call Saul) (T2), Hellbound (T2), Aggretsuko (T5), Entrevista con el vampiro (T2), Belgravia (T2), Desaparecidos (T3) y Dias mejores (T2).
- Canceladas: Paper Girls, Buscarse la vida en Brooklyn, Queer as Folk (el reinicio), Shenmue: The Animation.
Con la de "The Bear" estuve con el primer episodio, pero tenía un ritmo muy rápido (montones de diálogos de por medio) y la dejé porque me entró sueño. A ver si vuelvo que veo que hay un hype generalizado con esa serie.
Un saludo, y gracias por el resumen. [bye]
No puedo tener más ganas de ver qué es lo próximo de Vince Gilligan y que espero comparta muchas cosas pues la temática la tiene más que controlada.
A ver si tiene éxito y eso hace que publiquen en castellano la segunda parte, Agency
slaudos