Por sorprendente que parezca hay desarrolladores que pierden lo más importante, el código original de sus videojuegos. El presidente de Square Enix así lo reconoció el pasado verano y ahora son Max Schaefer, Erich Schaefer y David Brevik, creadores de Diablo, quienes han recordado que estuvieron a punto de quedarse sin la secuela. De hecho, afirman que hay código y activos que nunca se recuperaron, motivo por el cual ven poco probable una remasterización de Diablo II.
Durante una conversación con GameSpot, los hermanos Schaefer explican que hacía al final del desarrollo de Diablo II vivieron unos días de terror cuando comprobaron que habían perdido las copias de seguridad, el código y los activos del juego. “No solo fue nuestro código, también todos los recursos. Quedaron total e irremediablemente dañados”, recuerda Max Schaefer. Su hermano Erich añade: “Todo se perdió. Se suponía que teníamos un respaldo, pero fuimos unos descuidados. Pasamos uno o dos días en pánico”.
Afortunadamente para los desarrolladores (y los jugadores) el equipo pudo reconstruir gran parte del código y los activos de Diablo II a partir del material que se habían llevado a casa para jugar. Sin embargo, el código original y muchos de los recursos aparentemente se han perdido, así que Blizzard Entertainment debería crearlos de nuevo si quiere sacar adelante un remaster de Diablo II.
Más de 20 años después, Diablo II aún recibe alguna actualización y reinicia el ladder.
“Finalmente, reconstruimos mucho con lo que la gente tenía en sus casas”, comenta Erich Schaefer siguiendo con la conversación. “Tenía una gran parte. Fui a casa y saqué el disco duro. Estuve varios días reconstruyéndolo y al final todo funcionó bien, pero lo perdimos para la historia. Los activos, recursos artísticos… A Blizzard le resultaría muy difícil hacer un remaster de Diablo II porque todos los activos que usamos ya no existen. Tendrían que hacerlos de nuevo”.
No es la primera vez que en Blizzard se pierde el código de un juego. Hasta hace un par de años la compañía no tenía el código original del primer StarCraft (1998), pero una persona que había comprado en eBay una caja con “cosas de Blizzard” encontró un CD llamado StarCraft Gold Master Source Code y lo devolvió a Irvine. Hace unas semanas corría el rumor de que Blizzard podría anunciar la remasterización de Diablo II durante la BlizzCon 2019, pero finalmente no fue así. Sin embargo, se presentó Diablo IV como heredero de Diablo II.
Diablo: 300.000 dólares y un estudio al borde de la bancarrota
Durante la conversación los hermanos Schaefer y David Brevik también recuerdan su época en Condor, el estudio independiente que creó el primer Diablo y que fue adquirido por Blizzard antes del lanzamiento del juego en 1996. Erich afirma que en esa época la situación financiera del estudio era extremadamente delicada y no tenían dinero para pagar los impuestos. “Fue duro y realmente aterrador”, comenta el desarrollador. “Juntamos algo de dinero [para abonar los tributos] y afortunadamente el acuerdo que nos transformó en Blizzard llegó justo a tiempo para salvar nuestros traseros”.
Max Schaefer reconoce que Condor acordó crear Diablo a cambio de 300.000 dólares, una cifra que considera “insuficiente”. “Siempre estábamos sin dinero”, recuerda Max. Los hermanos Schaefer imaginaron que Diablo terminaría vendiendo unas 20.000 copias y podrían sacar una secuela. No solo fueron algunas cuentas más, sino que el juego se convirtió en un fenómeno que ayudó a establecer el género de los ARPG que a día de hoy está en plena forma. En opinión Brevik el ARPG aún tiene mucho campo por recorrer y evolucionar.
Durante una conversación con GameSpot, los hermanos Schaefer explican que hacía al final del desarrollo de Diablo II vivieron unos días de terror cuando comprobaron que habían perdido las copias de seguridad, el código y los activos del juego. “No solo fue nuestro código, también todos los recursos. Quedaron total e irremediablemente dañados”, recuerda Max Schaefer. Su hermano Erich añade: “Todo se perdió. Se suponía que teníamos un respaldo, pero fuimos unos descuidados. Pasamos uno o dos días en pánico”.
Afortunadamente para los desarrolladores (y los jugadores) el equipo pudo reconstruir gran parte del código y los activos de Diablo II a partir del material que se habían llevado a casa para jugar. Sin embargo, el código original y muchos de los recursos aparentemente se han perdido, así que Blizzard Entertainment debería crearlos de nuevo si quiere sacar adelante un remaster de Diablo II.
“Finalmente, reconstruimos mucho con lo que la gente tenía en sus casas”, comenta Erich Schaefer siguiendo con la conversación. “Tenía una gran parte. Fui a casa y saqué el disco duro. Estuve varios días reconstruyéndolo y al final todo funcionó bien, pero lo perdimos para la historia. Los activos, recursos artísticos… A Blizzard le resultaría muy difícil hacer un remaster de Diablo II porque todos los activos que usamos ya no existen. Tendrían que hacerlos de nuevo”.
No es la primera vez que en Blizzard se pierde el código de un juego. Hasta hace un par de años la compañía no tenía el código original del primer StarCraft (1998), pero una persona que había comprado en eBay una caja con “cosas de Blizzard” encontró un CD llamado StarCraft Gold Master Source Code y lo devolvió a Irvine. Hace unas semanas corría el rumor de que Blizzard podría anunciar la remasterización de Diablo II durante la BlizzCon 2019, pero finalmente no fue así. Sin embargo, se presentó Diablo IV como heredero de Diablo II.
Diablo: 300.000 dólares y un estudio al borde de la bancarrota
Durante la conversación los hermanos Schaefer y David Brevik también recuerdan su época en Condor, el estudio independiente que creó el primer Diablo y que fue adquirido por Blizzard antes del lanzamiento del juego en 1996. Erich afirma que en esa época la situación financiera del estudio era extremadamente delicada y no tenían dinero para pagar los impuestos. “Fue duro y realmente aterrador”, comenta el desarrollador. “Juntamos algo de dinero [para abonar los tributos] y afortunadamente el acuerdo que nos transformó en Blizzard llegó justo a tiempo para salvar nuestros traseros”.
Max Schaefer reconoce que Condor acordó crear Diablo a cambio de 300.000 dólares, una cifra que considera “insuficiente”. “Siempre estábamos sin dinero”, recuerda Max. Los hermanos Schaefer imaginaron que Diablo terminaría vendiendo unas 20.000 copias y podrían sacar una secuela. No solo fueron algunas cuentas más, sino que el juego se convirtió en un fenómeno que ayudó a establecer el género de los ARPG que a día de hoy está en plena forma. En opinión Brevik el ARPG aún tiene mucho campo por recorrer y evolucionar.
No hombre no...
Una cosa es el código fuente y otra el ensamblado o ejecutable.
No tiene nada que ver.
Como tu dices eso de "descuajaringar" el juego y obtener el código no es trivial, para nada, y a veces imposible.
Tanto como hablar sin tener ni idea de conceptos básicos de programación.
Y esto es lo que pasa cuando no has programado en tu vida y crees que todo es así de fácil...
Y pasa absolutamente en cualquier ámbito de la vida, que parece que solo sucede en videojuegos. La BBC usó los soportes físicos donde se almacenaban los masters de la mítica serie Doctor Who para otras cosas y gran parte de las primeras temporadas (especialmente la segunda y tercera) se perdieron para siempre. Y hoy en día la BBC sigue haciendo dinero con la serie en base a chapuzas tremendas como montar el audio original (que sí se conserva) a fotografías del rodaje, crear animaciones cutrísimas para representar los capítulos y cosas así. Y de vez en cuando teniendo la suerte de que alguien grabara los capítulos en su día y quiera hacer dinero vendiendo emisiones en calidad de mierda.
En cuanto al código del juego es posible que se pudiera crear un Source Port de Diablo II en base al material que existe, pero seguramente habrán llegado a la conclusión de que no vale la pena el esfuerzo. GalaXyHaXz creó en 2018 un Source Port de Diablo (Devilution) en base a ejecutables debug de PC y código del port japonés de Playstation. Y gracias a ello el juego se puede jugar en PC, en el navegador, en Switch y pronto en XBOX.