Después de conquistar los cielos en PC, Microsoft Flight Simulator llega a Xbox Series y como buen juego de Xbox Game Studios desde el primer día se encuentra disponible en Xbox Game Pass. El título desarrollado por el equipo francés Asobo Studio destaca en numerosos frentes, pero la mayor parte de la comunidad está de acuerdo que la ambición del proyecto por recrear todo el planeta con simulación atmosférica en tiempo real y su factura gráfica sobresalen por encima del resto de sus características.
Microsoft Flight Simulator es una saga de simuladores de vuelo con más de 40 años de historia. Su última entrega, la primera en 14 años, se presenta como la más ambiciosa y lo puede hacer gracias a la tecnología que emplea. No solo hablamos de un motor gráfico y de físicas a la altura de la nueva generación, sino que también se trata del uso de Bing para lograr una representación visual del mundo y el empleo de datos satelitales para poder recrear en directo las condiciones climáticas de cualquier parte del planeta Tierra.
En total, Microsoft Flight Simulator cuenta con más de 37.000 aeropuertos, 2 millones de ciudades, 1.500 millones de edificios, montañas reales, carreteras, árboles, ríos, animales, tráfico… y si el juego no llega intervienen algoritmos de aprendizaje automático que definen dónde generar cualquier tipo de superficie y otros elementos que se obtienen de los datos de nuestro planeta. Mucha de esta información proviene de Azure y depende del ancho de banda, así que se ajustará de forma dinámica en función de la conexión.
Microsoft Flight Simulator es un juego bonito de ver que está apoyado por una generosa cantidad de tecnología, recursos e información (más de 2 petabytes o 1,6 millones de CDs gracias a Azure), pero ante todo es un simulador de vuelo. En este sentido, el título de Asobo Studio incluye decenas de aviones, desde aeronaves ligeras hasta aviones comerciales, cada uno con sus respectivos instrumentos de vuelo y con las Reglas de Vuelo Visual (VFR) vigentes. Que pilotar sea más o menos exigente dependerá de las ayudas que se activen. Algunas se han introducido con el lanzamiento del juego en Xbox Series.
También influye en el comportamiento del avión la meteorología, que se puede configurar mediante múltiples parámetros (velocidad y dirección del viento, temperatura, humedad, iluminación, lluvia...) o elegir una ubicación de la Tierra para recrear las condiciones en tiempo real. Las leyes de la física también intervendrán en el comportamiento del avión.
Debido al intenso uso que Microsoft Flight Simulator hace de Azure es recomendable jugar conectado a Internet con una conexión de como mínimo 5 Mbps, aunque lo recomendable son 20 Mbps y lo ideal 50 Mbps. Sin embargo, es posible jugar offline. De hecho, cuando el juego se descarga lo hace pensando en esta posibilidad e instala unos 100 GB de datos en el SSD de Xbox Series. Quien tenga confianza en su conexión a Internet puede desinstalar los casi 60 GB que ocupa el modo offline.
Para los jugadores de Microsoft Flight Simulator en PC también hay novedades con el lanzamiento de la Update 5, que mejora notablemente el rendimiento del juego al subir la tasa de fotogramas a la vez que se reduce el uso del procesador y memoria RAM. Por ejemplo, un equipo con un procesador Intel Core i7-9700K, tarjeta gráfica RTX 2060 Super y 16 GB de RAM llega a los 30 FPS y usa el 100 % de la CPU, pero una vez instalada la Update 5 los fotogramas subirán hasta 55/60, el uso del procesador bajará al 75 % y el de la RAM a la mitad.
Microsoft Flight Simulator es una saga de simuladores de vuelo con más de 40 años de historia. Su última entrega, la primera en 14 años, se presenta como la más ambiciosa y lo puede hacer gracias a la tecnología que emplea. No solo hablamos de un motor gráfico y de físicas a la altura de la nueva generación, sino que también se trata del uso de Bing para lograr una representación visual del mundo y el empleo de datos satelitales para poder recrear en directo las condiciones climáticas de cualquier parte del planeta Tierra.
En total, Microsoft Flight Simulator cuenta con más de 37.000 aeropuertos, 2 millones de ciudades, 1.500 millones de edificios, montañas reales, carreteras, árboles, ríos, animales, tráfico… y si el juego no llega intervienen algoritmos de aprendizaje automático que definen dónde generar cualquier tipo de superficie y otros elementos que se obtienen de los datos de nuestro planeta. Mucha de esta información proviene de Azure y depende del ancho de banda, así que se ajustará de forma dinámica en función de la conexión.
Microsoft Flight Simulator es un juego bonito de ver que está apoyado por una generosa cantidad de tecnología, recursos e información (más de 2 petabytes o 1,6 millones de CDs gracias a Azure), pero ante todo es un simulador de vuelo. En este sentido, el título de Asobo Studio incluye decenas de aviones, desde aeronaves ligeras hasta aviones comerciales, cada uno con sus respectivos instrumentos de vuelo y con las Reglas de Vuelo Visual (VFR) vigentes. Que pilotar sea más o menos exigente dependerá de las ayudas que se activen. Algunas se han introducido con el lanzamiento del juego en Xbox Series.
También influye en el comportamiento del avión la meteorología, que se puede configurar mediante múltiples parámetros (velocidad y dirección del viento, temperatura, humedad, iluminación, lluvia...) o elegir una ubicación de la Tierra para recrear las condiciones en tiempo real. Las leyes de la física también intervendrán en el comportamiento del avión.
Debido al intenso uso que Microsoft Flight Simulator hace de Azure es recomendable jugar conectado a Internet con una conexión de como mínimo 5 Mbps, aunque lo recomendable son 20 Mbps y lo ideal 50 Mbps. Sin embargo, es posible jugar offline. De hecho, cuando el juego se descarga lo hace pensando en esta posibilidad e instala unos 100 GB de datos en el SSD de Xbox Series. Quien tenga confianza en su conexión a Internet puede desinstalar los casi 60 GB que ocupa el modo offline.
Para los jugadores de Microsoft Flight Simulator en PC también hay novedades con el lanzamiento de la Update 5, que mejora notablemente el rendimiento del juego al subir la tasa de fotogramas a la vez que se reduce el uso del procesador y memoria RAM. Por ejemplo, un equipo con un procesador Intel Core i7-9700K, tarjeta gráfica RTX 2060 Super y 16 GB de RAM llega a los 30 FPS y usa el 100 % de la CPU, pero una vez instalada la Update 5 los fotogramas subirán hasta 55/60, el uso del procesador bajará al 75 % y el de la RAM a la mitad.
Ha saltado una actualización justo a la hora de salida. Está saturado el asunto. Pero no me digas que este juego no es una locura en series X…
Saludos
BOOOMMMM! [boma]