El CES es un escenario tradicionalmente receptivo para MSI, a pesar de que dentro de unos meses el fabricante taiwanés tendrá la ocasión de jugar en casa con motivo de la feria Computex. Sea como fuere, MSI ha tenido a bien aprovechar su presencia en Las Vegas para anunciado dos de sus lanzamientos más destacados para el todavía lejano segundo semestre de este año: el discreto MSI GS66 Stealth y el más llamativo GE66 Raider.
El primero de ellos podría pasar fácilmente por un portátil empresarial o incluso una estación de trabajo de perfil reducido de no ser por su teclado RGB, mientras que el segundo extiende su iluminación multicolor por el resto de la carcasa (incluyendo una sección en el borde del propio chasis) y añade un puñado de puertos. Sus especificaciones son en cualquier caso bastante parecidas.
Amos modelos poseen pantallas IPS Full HD de 15,6 pulgadas que opcionalmente pueden alcanzar los 300 Hz, que es la tasa de refresco más elevada para un portátil comercial. El resto del hardware ha sido específicamente diseñado para explotar dicho refresco con unas tasas de FPS a juego, integrando procesadores Intel Core i9-H de décima generación y "las últimas" tarjetas GeForce RTX de Nvidia.
Otro aspecto destacable de estos portátiles es su batería, extraordinariamente generosa. Estamos hablando de una unidad de 99,9 Wh, por lo que entra por la más mínima de las diferencias en el límite de los 100 Wh, que es el máximo fijado por las autoridades estadounidenses para transportar en cabina baterías de iones de litio sin una autorización especial. Esto los sitúa en la órbita del MacBook Pro de 16 pulgadas.
Detalles más granulares como la RAM y las opciones de almacenamiento son por ahora un misterio (qué vamos a decir de los precios), aunque siendo MSI, posiblemente habrá un gran número de versiones distintas. Entre ellas figurará una edición especial firmada por el diseñador conceptual Colie Wertz, conocido por su trabajo en las películas de Star Wars y Marvel.
El primero de ellos podría pasar fácilmente por un portátil empresarial o incluso una estación de trabajo de perfil reducido de no ser por su teclado RGB, mientras que el segundo extiende su iluminación multicolor por el resto de la carcasa (incluyendo una sección en el borde del propio chasis) y añade un puñado de puertos. Sus especificaciones son en cualquier caso bastante parecidas.
Amos modelos poseen pantallas IPS Full HD de 15,6 pulgadas que opcionalmente pueden alcanzar los 300 Hz, que es la tasa de refresco más elevada para un portátil comercial. El resto del hardware ha sido específicamente diseñado para explotar dicho refresco con unas tasas de FPS a juego, integrando procesadores Intel Core i9-H de décima generación y "las últimas" tarjetas GeForce RTX de Nvidia.
Otro aspecto destacable de estos portátiles es su batería, extraordinariamente generosa. Estamos hablando de una unidad de 99,9 Wh, por lo que entra por la más mínima de las diferencias en el límite de los 100 Wh, que es el máximo fijado por las autoridades estadounidenses para transportar en cabina baterías de iones de litio sin una autorización especial. Esto los sitúa en la órbita del MacBook Pro de 16 pulgadas.
Detalles más granulares como la RAM y las opciones de almacenamiento son por ahora un misterio (qué vamos a decir de los precios), aunque siendo MSI, posiblemente habrá un gran número de versiones distintas. Entre ellas figurará una edición especial firmada por el diseñador conceptual Colie Wertz, conocido por su trabajo en las películas de Star Wars y Marvel.
O lo que es lo mismo, mientras uno parece bonito el otro es hortera [carcajad]
Pues hay gente puede ver como un favor eso que dices, si te avisan....
300 hz me parece a mi que está pensado para juegos tipo e-sports, con este portatil no vas a jugar al control a 300 fps.