"Que se dejen de pelear y se pongan a andar"... Antes de que se sea tarde. Ésa es el mensaje/exigencia que un juez de Córdoba ha trasladado a la clase política en una sentencia en la que confiesa sus simpatías con el movimiento de los 'indignados' que apadrinó y bautizó el filósofo francés Stéphane Hessel. El propio magistrado, Manuel Oteros Fernández, se autoproclama "indignado" y no ahorra críticas a los representantes públicos, a los que llega a llamar "burros".
Ya hasta a los jueces se les hinchan las pelotas, que se vaya poniendo a cubierto, que le va a caer.....