ASIA | Primer discurso de Xi Jinping como jefe del Estado
China, en busca de su propio sueño
El nuevo presidente de China cerró la Asamblea Nacional Popular
En su proclama, apeló al patriotismo y a la unidad del pueblo
Construir una "sociedad modestamente acomodada", un país "rico y poderoso" y un pueblo "dinámico y feliz". Así ha definido el recién elegido presidente, Xi Jinping, "el sueño chino". En el discurso de clausura de la Asamblea Popular Nacional, más emotivo que concreto, Xi ha llamado a los líderes y a la sociedad a cooperar en la consecución de lo que ha denominado "el gran renacimiento de la nación china".
La Asamblea –la cámara legislativa del país asiático- se ha cerrado así esta mañana tras cerca de dos semanas de sesiones en las que se han renovado los cargos más importantes del Estado y del Gobierno.
Li Keqiang ha comparecido posteriormente por primera vez ante los medios como primer ministro, poniendo sobre la mesa datos y medidas concretas, en una rueda de prensa en la que ha especificado los objetivos prioritarios de su mandato. Li fue nombrado el pasado viernes jefe del Gobierno, mientras que el sábado se completó la selección del nuevo Ejecutivo. En el mismo, hay cuatro vice primeros ministros (Zhang Gaoli, Wang Yang, Ma Kai y Liu Yandong, esta última, la cuarta mujer desde 1949 en ocupar el cargo) y 25 ministros, nueve de ellos nuevas incorporaciones.
Li ha asegurado que la primera prioridad para su Gobierno será mantener un crecimiento económico sostenido, que ha cifrado en una media del 7,5% anual hasta 2020. El premier apostado por una liberalización paulatina del sector servicios, y de parte del sector financiero, así como crear un sistema de juego en que exista "una competencia justa para las empresas".
En segundo lugar, ha citado la mejora del nivel de vida de la población, especialmente de los más necesitados, y la creación de una red de seguridad social. Por último, ha afirmado que la consecución de la igualdad de oportunidades –ya sea entre los ciudadanos del campo y la ciudad, o entre las empresas privadas y públicas- será otra de las metas prioritarias de su mandato. Para alcanzar estos objetivos, el primer ministro ha dicho que es necesario construir un Gobierno transparente y regido por la ley.
Además, ha abogado por un Ejecutivo más pequeño, que delegue en el "mercado" y en la "sociedad" la gestión de ciertos espacios en los que hasta ahora se había involucrado. "Reformar consiste en refrenar el poder del Estado, es una revolución autoimpuesta y queremos hacer este sacrificio", ha enfatizado.
Li ha anunciado, además, medidas concretas para luchar contra la corrupción, incentivando la "transparencia" y aumentando la capacidad de fiscalización de los ciudadanos. El premier se ha comprometido a reducir los gastos de la Administración, disminuyendo el número de funcionarios, los gastos en comidas y coches oficiales, así como frenando la construcción de nuevas oficinas de la burocracia.
Fuente:
http://www.elmundo.es/elmundo/2013/03/1 ... 90883.htmlA mí personalmente me parece un lema precioso. Es muy evocador el paralelismo con Estados Unidos, nación a la que probablemente adelantará económicamente durante este siglo y con la que habrá de mantener relaciones armoniosas a todos los niveles por el bien del planeta. Para mí Estados Unidos y China constituyen, en su entorno geográfico, las culturas más representativas y también más laudables, una de Occidente y la otra de Extremo Oriente. Si le añadiéramos Israel como la más ínclita representante de Oriente Próximo y también de los pueblos semíticos, nos hallaríamos ante un triángulo capaz de garantizar la gobernación virtuosa del mundo. ¿Qué pensáis vosotros del lema? ¿Creéis que, en efecto, Xi Jinping hará que se cumpla el "sueño chino" y ejercerá su cargo de forma diligente y elogiable, acercando a China a la supremacía mundial de una forma que se gane la estima tanto de los chinos como del resto del mundo?
![[qmparto]](/images/smilies/net_quemeparto.gif "Que me parto!")
