Pues así recientemente, con
Gears of War Judgement. A saber, la campaña no está mal, pero la IA la han idiotizado hasta límites absurdos, la CPU te tiene al lado y no te levanta. Ellos avanzan por su cuenta, se te ponen enmedio, y hay una aire cutrísimo de dificultad arcade que se ve desde kilómetros, los enemigos
prácticamente ignoran a tus compañeros para abrir fuego casi exclusivamente sobre ti. Los nuevos enemigos rojos esos que envisten, solo te siguen a ti, y no puedes cooperar con una CPU que se niega a dispararles, porque están muy agusto tras una cobertura admirando el cosmos.
La cosa es que dices, bueno, pues está hecho para jugar en cooperativo y ya está. Si y no. Más bien no. Porque como pretendas jugarlo en serio, sacarte todas las estrellas y las desclasificadas, tienes que hacerlo SOLO, ya que si juegas con amigos la dificultad se multiplica una barbaridad. En "Locura" no caes al suelo, mueres directamente, y para mas cachondeo si uno muere, todos mueren. Es decir, que para sacarle la chicha al juego tienes que jugar SOLO y dejando que la CPU (que es rematadamente imbécil) haga el trabajo difícil y tu te dediques a no arriesgar. Yo así no me divierto, que quieres que te diga.
Y el multiplayer, otro que tal. El de gears 3 me encantaba, y aquí lo han cambiado de forma tan radical que no solo no me acostumbro, es que no me gusta. En duelo por equipos, todo es mas rápido, mas intenso, mas primitivo, pero es que el sistema gow de "jugar en coberturas" ya no funciona. Ya nadie se cubre. No te sirve de nada estar en una cobertura con el lancer en la mano, porque no vas a matar al que viene a por ti. Se resuelve todo a escopetazo si o si, el lancer dispara palomitas, y las fases las han hecho mucho mas verticales y laberínticas, para que siempre tengas el culo expuesto a uno que viene por detrás en plan ninja. Ya no se controlan posiciones como antes, ya no se colocan granadas en la pared... es otro juego, es otra mierda, y no tiene sentido porque es mas Quake que GOW.
La cosa es que me lo regaló mi novia, pero aún así me duele el dinero que gastó