Viaje al campo de exterminio Auschwitz Birkenau
Voy a comenzar el hilo dando gracias a todos vosotros por la aceptación de los anteriores hilos sobre mis visitas a
Bergen-Belsen y a
Sachsenhausen.
Viaje al infierno de Auschwitz – Birkenau
Antes de nada quiero dar las gracias a dos compañeros de otro foro que me ayudaron a llegar al lugar: Nusba y ACeMaN.
Como los anteriores hilos, comienzo comentando la forma de llegar a Auschwitz.
En primer lugar hay que tener claro la distribución de Auschwitz, en realidad Auschwitz lo componen principalmente 3 subcampos, Auschwitz I, Auschwitz II también conocido como Birkenau y Auschwitz III conocido como Monowitz.
Nuestro viaje comenzó en Cracovia, sabiamos que era la forma más fácil de llegar a Auschwitz bien por medio de Tours guiados o bien por un autobús de línea, siempre más económico.
Los Tours guiados que ofrecían en la Stare Miasto (centro de Kraków) consistían en un guia que te llevaba hasta el pueblo de Oświęcim, a unos 30 Km de Kraków y te hacían la visita guiada por los subcampos Auschwitz I y Birkenau, actualmente no existen visitas guiadas y desconozco el estado de Monowitz.
Los Tours costaban alrededor de unos 420 PLN (Zlotys) que al cambio vienen a ser unos 120-130€ para 3 personas, yo prefiero hacer las cosas por mi cuenta sin tener a nadie que me esté esperando, por lo que optamos por ir por nuestra cuenta.
Vivíamos cerca de la Stare Miasto de Kraków, cerca de la basílica de Santa María.
Consultamos en la estación de autobuses central a qué hora salen los autobuses y vimos que a las 9:15 salía un autobús hacia Oświęcim, por lo que partimos hacia la estación.
El precio del viaje es de 2€ escasos ida y vuelta, el viaje dura aproximadamente 90 min y nos deja a escasos 100 metros de Auschwitz I. El viaje es demasiado largo para la distancia que hay, pero es necesario aclarar que las carreteras de las afueras de Krakow no son lo suficientemente fiables como para ir a mayor velocidad.
Cuando nos aproximabamos a Auschwitz, por el camino ya íbamos viendo desvios de los cuales podíamos empezar a intuir hacia donde ibamos.
Se pueden ver railes de tren abandonados, por donde probablemente transportarían a las víctimas del genocidio.
Mientras llegabamos al destino, iba mirando alrededor y observando que los edificios eran lo suficientemente antiguos como para que hace 66 años, cuando allí se mataba a miles de personas a diario, la gente que viviera en esos sitios no se diera cuenta de lo que realmente estaba pasando allí.
Una vez en la parada de autobuses comprobamos el horario de vuelta para poder encajar bien los horarios de visita, ya que como he comentado anteriormente el campo se divide en 3 subcampos y para la visita de Auschwitz I a Birkenau es necesario coger un autobus (gratuito) que nos desplaza hasta Birkenau (a unos 3Km).
Auschwitz I La ubicación en el mapa es la siguiente:
Antes de entrar se pueden apreciar una serie de mapas sobre la ubicación del resto de campos y lo que en aquel entonces era Auschwitz.
Para que podais ver cómo estaban distribuidos los 3 subcampos y la amplitud de los mismos:
El “A” es Auschwitz I, el memorial en donde ahora nos encontramos, “B” Birkenau, “C” Monowitz y “D” la fábrica IG-Farben, encargada de suministrar el gas Zyklon B que se utilizaba en las cámaras de gas.
Ahora un plano más cercano del campo Auschwitz I:
Nada más entrar al memoria, decir que es necesario pagar una entrada con guía de forma obligatoria si vas entre las 10 y las 15, después es gratuita, pero vamos son solo 75 PLN (12€ por persona con guía y cascos para oírle perfectamente).
Comienza la visita que durará 6 horas por un infierno que el ser humano creo hace 66 años.
No me gustaría crear polémica con el hilo sobre el número de víctimas, ni ningún tema así. Así que por favor, solo pido respeto.
A la entrada del campo de Auschwitz I, podemos ver el tristemente eslogan conocido de todos los campos de exterminio “Arbeit Macht Frei”, el trabajo os hará libres, comienza el engaño a todos los que entran a este campo de concentración.
Decir que este campo originariamente se creó como centro administrativo para llevar la gestión del campo de concentración, en este campo de concentración murieron unos 70.000 intelectuales polacos y prisioneros de guerra entre otros.
La entrada hace 70 años:
La entrada a día de hoy:
Detalle de la inscripción:
A continuación pasamos la entrada que miles de personas atravesaron una única vez y pudimos ver lo que a simple vista y para el que nada sepa de lo que aquí ha sucedido, pueda parecer un simple barrio de pueblo acogedor.
Cada “casa” tiene su propio número (este tipo de carteles y farolillos se siguen viendo en Krakow).
La primera parada es el bloque 4, en el cual hay un memorial a la entrada con imágenes pertenecientes a las elecciones de quién vivía y quien iba directamente a la cámara de gas. En una fila vemos mujeres, niños y ancianos, en la otra los hombres, que posteriormente pasarían por una rápida “inspección” médica que determina quién vive y quién muere en las cámaras de gas (viendo lo que sufrirían no sé cuál de los dos destinos es el mejor).
Detalle de la entrada del bloque:
Los vagones de la muerte llegan a su destino, donde las SS les esperan para formar las famosas filas.
Las SS ordenan ponerse en dos filas, en una de las cuales estarán las mujeres, niños y ancianos, en la otra los hombres.
Los Nazis tenían la idea de que Canadá era un país rico y a la zona de la rampa donde los judíos abandonaban sus pertenecías la llamaban Canadá, en teoría todas las pertenencias eran para el Tercer Reich, pero muchos guardias de las SS y posteriormente Sonderkommando (judíos que se encargaban de las tareas “sucias”, como por ejemplo la incineración de cuerpos y la extracción de dientes de oro antes de la incineración).
La niña del centro de la imagen, hoy podría tener 75 años:
Cifras de las víctimas que fallecieron en Auschwitz:
La lista de cada uno de los que entraban al campo, con su famoso número de identificación:
En esta siguiente imagen se puede ver donde descansan las cenizas de cientos de víctimas, procedentes de los siguientes lugares:
Salimos de esta habitación y entramos a otra en la que se puede apreciar latas vacías del famoso gas Zyklon B.
La fábrica IG-Farben se encargaba de fábricas productos químicos desinfectantes, la cual investigó que añadiendo un cierto componente a su producto se conseguía liquidar en unos minutos a miles de personas, ya que el gas al entrar en contacto con el oxígeno provocaba la asfixia. El procedimiento era el siguiente, desde la fábrica hasta Birkenau se transportaban las latas en un camión de la Cruz Roja, como si de algo médico se tratara para evitar así el pánico en el campo de concentración, los guardias de las SS con una máscara antigas abrían las latas y las dejaban caer sobre unos tubos con agujeros que llegaban hasta las “duchas” donde enviaban a los judíos a “desinfectar”.
Posteriormente llegamos a otra sección del bloque en el que se puede visualizar a través de una vitrina pelo humano que los Sonderkommando cortaban a las víctimas, después de haber sido gaseados. El pelo humano tuvo su uso en la fabricación de bombas, uso textil en el mundo del automóvil, etc.
Ante todo, tengo que pedir perdón por la calidad de las imágenes y por las propias imágenes, nos comentaron que por favor no sacásemos fotos en esta zona ya que por respeto a las víctimas está mal visto, pero lo quería compartir lo que yo pude ver.
Salimos del bloque número 4 y entramos al bloque número 5
En este bloque nos encontramos ante las pertenencias de los miles de personas que fueron deportadas y fallecieron en el campo. Desde ortopedias hasta gafas y maletas.
Continuamos por el bloque hacia el siguiente pasillo, la siguiente parada eran las famosas maletas de los deportados, la cantidad de maletas que se ven en la imagen y en el propio campo de concentración corresponden al último convoy de judíos que entró a Auschwitz.
Lo que más me sobrecogió fue ver la cantidad de zapatos:
Aquí podeis ver la cantidad de utensilios para el aseo personal:
Y latas de conserva:
Salimos del bloque y entramos en el número 7
En este bloque únicamente podemos ver la forma en la que vivían el día a día los prisioneros, los baños, las camas, aseos, etc.
Para que veáis cómo son los bloques por dentro, en este bloque se ponen nombres y apellidos y cara a cada una de las víctimas, la fecha de entrada en el campo y la fecha de muerte, en muchas ocasiones entre ambas fechas no había más de un mes.
Muchos de ellos dormían en habitaciones comunes como esta:
Los baños:
Los más privilegiados tenían más suerte:
Los que menos en cambio:
Llegaban a dormir hasta 8 personas en cada una de las “literas” entrecruzándose cabeza y piernas para mayor sitio:
Una vez visto este bloque procedemos a entrar al bloque 11, el conocido como bloque de la muerte en Auschwitz I.
Es un bloque en el que se impusieron durísimas penas a quienes intentaban fugarse del campo e incluso si cogían a polacos ayudando a un judío moriría el polaco y toda su familia como castigo.
La Gestapo impuso grandes castigos llegando en muchas ocasiones a matar a muchos de los prisioneros allí castigados.
De nuevo pedir disculpas por las fotos, estaban prohibidas y la guía ya me tenía el ojo encima:
Los metían a muchos aquí dentro en un espacio de 1 metro cuadrado tumbados a oscuras:
Salimos del bloque al patio, donde podemos encontrar la pared de fusilamiento, dicha pared la utilizaban para castigar duramente a los prisioneros con la muerte. Lo curioso de esta situación es que las ventanas de alrededor están tapadas con maderas, esto se hizo para que desde el interior no vieran las ejecuciones en masa que se producían a escasos metros en el exterior.
Como podéis ver en la imagen, las ventanas están selladas y se aprecia en la imagen que hay dos palos enormes, en los cuales colgaban a los prisioneros de los brazos atados a las espaldas que provocaban que con su propio peso se le salieran los hombros de su sitio y los mantenían colgados hasta que el SS decidiera bajarlo.
La pared de fusilamiento:
Salimos del patio de ejecuciones y vamos camino a las cámaras de gas y crematorios.
En el camino hacia las cámaras de gas pude ver (el guía se lo saltaba por alto) esto que me llamó la atención ya que lo pude ver en Sachsenhausen.
El rodillo que se ve en el suelo lo arrastraban los prisioneros cuesta abajo, de tal forma que se penaba prácticamente con la muerte el agotamiento, ya que si el prisionero se cansaba, el rodillo le pasaba por encima.
Seguimos hacia las cámaras y pudimos ver un memorial de Maximilian Kolbe, un prisionero que fue voluntario a la muerte. Uno de los que convivió con él y otros 2000 prisioneros en el pabellón no respondió a su nombre cuando pasaron la lista. Al no responder, el SS determinó que morirían 10 de ellos escogidos al azar por que el compañero no respondió a la llamada.
Eligieron a un compañero de Kolbe, que cuando salió de su fila preparado para la muerte lamentó la muerte acordándose de sus hijos, mujer y
padres. Kolbe al oírlo decidió sacrificar su propia vida por la suya ya que él no tenía familia, ni nadie que se acordara de él.
Torres de almacén y de castigo:
La diferencia entre la vida y la muerte era muy estrecha:
En esta horca fue sentenciado el comandante del campo de Auschwitz, Rudölf Höß, tras los juicios de Núremberg.
Ya estábamos en la última parada de Auschwitz I, antes de partir hacia Birkenau:
El detalle más de cerca:
Ahora nos encontramos en las famosas “duchas” donde en 20 minutos podían morir 2000 personas.
Arriba se puede apreciar un agujero por donde caía el Zyklon B.
Y los crematorios:
Detalle de la alambrada electrificada que limitaba todo el campo:
Abandonamos Auschwitz I y nos montamos en el autobús que nos llevará hasta Auschwitz II – Birkenau
BIRKENAU
Una vez nos montamos en el autobús en poco más de 5 minutos llegamos a Birkenau, la primera sensación es de estar en una película, algo increíblemente inmenso (2’5km x 2km), imposible llegar a imaginar que hasta donde te permite la vista, se seguían viendo barracones y más barracones.
A un lado de la vía se ve esto:
Pero al otro la tristemente conocida entrada:
Nada más pisar Birkenau nos dirigimos a uno de los barracones habilitados para su visita:
Dentro podemos ver las conocidas literas:
Para que veáis la distancia entre ellas:
En el centro del pabellón hay un horno que se utilizaba para calentar el barracón, algo que en Auschwitz en invierno a unos 20ºC bajo cero, es muy difícil conseguir hacerlo, vamos algo inútil.
Salimos del barracón y nos dirigimos hacia el siguiente, los urinarios:
La hilera de barracones:
La alambrada sigue limitando Birkenau al igual que lo hacía en Auschwitz I.
Este es uno de los vagones que utilizaban para transportar a cientos de personas en ellos durante varios días de sufrimiento sin agua y sin comida para llegar al campo donde en la bajada de esta explanada se hacía las selecciones:
Esto es lo que íbamos dejando atrás:
El campo de Birkenau estaba separado en 4 secciones: Hombres, mujeres y niños, gitanos y deficientes físicos/psíquicos.
Si miramos a la derecha de las vías, vemos el campo correspondiente a los gitanos, en esta zona del campo se encontraba la enfermería, donde el doctor Joseph Mengele practicaba sus atrocidades con seres humanos. Esta chimenea corresponde a lo que queda de las ruinas de la enfermería de Mengele.
Si miramos hacia la izquierda, vemos las ruinas de los crematorios y de las cámaras de gas:
En Birkenau se construyeron 4 crematorios.
Memorial que llama la atención:
Nos marchábamos ya del campo de concentración por la zona donde habitaban las mujeres en el campo:
Esta zona sigue estando vigilada, como cada una de ellas:
En su interior una vez más, literas:
Abandonamos el campo no sin antes pasar por la tienda donde pude comprar un libro que solo se edita en Auschwitz “Fui asistente de Mengele”, os lo recomiendo a todos que vayáis.
Este es mi pequeño homenaje a las víctimas del nazismo, espero que os guste.