Este no está siendo el mejor año para GoPro. El conocido pero renqueante fabricante de cámaras de acción ha hecho público que despedirá al 15% de su plantilla en el marco de un amplio plan de restructuración con el que pretende atajar sus pérdidas. En total, la compañía recortará 200 empleados a jornada completa y se eliminará un número indeterminado de vacantes. Entre los despedidos se cuenta Tony Bates, el presidente de la compañía y antiguo jefe de Skype, que abandonará GoPro al finalizar 2016.
Pero GoPro no piensa poner freno a su hemorragia financiera únicamente con despidos. La firma también ha anunciado que eliminará su división de entretenimiento tras obtener unos resultados insuficientes. Este departamento formaba una pieza clave en los planes para convertir a GoPro en una compañía multimedia siguiendo la estela de marcas tan conocidas como Redbull, promocionando deportistas y eventos para estimular sus ventas y abrir nuevas vías de negocio.
La compañía no señala si la
retirada del dron Karma nada más salir al mercado ha tenido algo que ver en el alcance de la reestructuración, pero difícilmente ha podido tener efectos positivos.
Los últimos resultados financieros de GoPro no han sido positivos. En el último informe trimestral el fabricante de cámaras informó de un descenso en los ingresos del 40% con respecto al tercer trimestre del año pasado, generando unas pérdidas de 104 millones de dólares. El valor de la compañía en bolsa se ha depreciado
en casi un 90% con respecto a 2014, cuando su cotización alcanzó su máximo histórico.
A estas alturas parece evidente que el mercado de las cámaras de acción está ya demasiado saturado como para sostener los resultados de antaño, si bien desde GoPro se señala que la acogida del modelo HERO5 ha sido positiva y las ventas durante el
Black Friday y el
Cyber Monday fueron notablemente robustas, con alzas del 35% y el 33% respectivamente con respecto al año pasado.
Fuente: GoPro