Hola, buenas, tengo un amigo que desde hacía más de dos años, su objetivo (aparte de estudiar, trabajar y demases) era conseguir montarse un trío. Pues bien, la semana pasada lo consiguió y me ha contado la experiencia hoy, y no sabía si reirme o llorar. Está medio deprimido, pobre.
Os cuento;
Consiguió a las dos chicas, dos amigas, de unos 22-24 años en una disco, eran conocidas de una amiga suya. Tras mucho insistir consiguió que se fueran con él a tomar algo a su casa (vive solo).
Resulta que una vez allí, empezó a enrollarse con una en el sofá, mientras la otra había ido al baño. Al volver del baño, se quedó en la otra punta del sofá, sin saber qué hacer, y mi amigo decidió acercarse a ella de repente y empezar a besarla también, sin mediar palabra. El caso que hasta ahí bien.
Pero una vez en la cama:
-Ellas ni se tocaban, ni se besaban, nada.
-Cada vez que penetraba a una, tenía que cambiarse el condón de la otra. IMAGINAOS QUÉ ROLLAZO
-Nada de felación a dos bocas, porque no querían tocarse los labios ni la lengua.
-Una vez hecha la primera felación, por parte de la chica A, la chica B no quería besarle, le daba asquito.
-Nada de penetración anal a ninguna.
-Nada de eyaculación en ninguna de ellas, sino en el condón y gracias, y al final por pereza por no cambiar condón, ya terminó por terminar.
Total
cero morbo, me ha dicho.
Para qué sepáis que no es oro todo lo que reluce.
No sé ni qué aconsejarle, porque está hecho polvo, la verdad. Aunque me entraba risilla por debajo
cuando me lo contaba.
¿Algún consejo para superar su depresión?