Un solo día después de la multitudinaria protesta contra la legislación que prepara Estados Unidos para el control de Internet, el país ha dado un golpe en la mesa cerrando el servicio más utilizado para la descarga de archivos: Megaupload. Además de bloquear sus servidores y páginas web, ha coordinado internacionalmente el arresto de sus responsables, todos ellos ciudadanos extranjeros que no residen en suelo americano.
En total son siete los directivos y trabajadores imputados, por cargos de conspiración criminal, infracción de copyright y lavado de dinero entre otras acusaciones, enfrentándose a una pena máxima de 55 años de prisión cada uno; para lo que deberán ser extraditados y juzgados en los EEUU.
Nota de prensa del FBI escribió: [...] durante más de 5 años los conspiradores han operado páginas web que de forma ilegal reproducían y distribuían obras con copyright, incluyendo películas, música, programas de TV, ebooks y software a escala masiva. La web de almacenamiento de archivos de los conspiradores, megauplad.com, publicitaba que había recibido más de 1000 millones de visitas, tenía más de 150 millones de usuarios registrados y 50 millones de visitantes diarios, suponiendo el 4% del tráfico total de Internet. El daño causado estimado a los propietarios del copyright excede los 500 millones de dólares y los conspiradores habrían obtenido más de 175 millones de dólares en ingresos ilegales a través de publicidad y venta de cuentas premium.