Samsung retiró hace apenas unas horas una filtración de imágenes de su teléfono que parecían más que convincentes y, poco después, hizo oficial el nuevo Galaxy. De momento el modelo parece estar destinado únicamente a Corea del Sur, donde se lanzará en varios colores (el que se muestra en las imágenes se denomina “Luxury Brown”). El terminal saldrá a la venta en el país asiático por 1,08 millones de wones, 743 euros al cambio nacional.
El Samsung Galaxy Round posee una pantalla Super Flexible AMOLED Full HD de 5,7 pulgadas curvada horizontalmente, mide 7,9 mm de grosor y pesa 154 g. En cuanto al corazón del aparato tenemos un Snapdragon 800 funcionando a 2,3 Ghz, 3 GB de RAM, 32 GB de almacenamiento interno (con posibilidad de tarjetas SD), cámara de 13 MP, LTE, Android 4.3 y todo alimentado por una batería de 2,800 mAh.
Según Samsung, el diseño curvo “permitirá a los usuarios aprovecharse de experiencias únicas de integración como el ‘Roll Effect’”, el cual mostrará las notificaciones, la batería restante o la hora tras balancear el teléfono sobre una superficie plana. Otra nueva función que facilita su forma es el llamado “Gravity Effect” que permite “crear interacciones visuales con la pantalla al inclinar el dispositivo”.
Dejando a un lado su pantalla curva, las características técnicas son prácticamente idénticas a las del Samsung Galaxy Note 3, salvo por el menor peso y grosor del nuevo teléfono. Con este anuncio se desmienten los rumores que apuntaban a un smartphone con pantalla totalmente flexible, parecida al prototipo presentado en el CES de este año. Tras este anuncio por parte de Samsung, se espera que LG corresponda a su competidora revelando imágenes y características del teléfono anunciado ayer.
