Todo depende de cómo te tomes la vida. Yo me emparejé pronto (con 17) y con 21 ya vivía con mi pareja desde hacía tiempo y había terminado la carrera. Con 27 cambié de pareja y al siguiente año me mudé de ciudad con ella y compatibilicé nuevos estudios con trabajo. Pero es que ahora tengo 33 y estoy otra vez en una nueva ciudad, viviendo con mi actual pareja y con nuevos planes de estudio y trabajo. Para mí la vida son ciclos y la edad no me impide en absoluto cerrar unos e iniciar otros.
Si uno se estructura la vida como un "a X edad tengo que haber conseguido esto", está claro que el paso del tiempo es un agobio. Por ejemplo, hay gente que no estudia una carrera porque ya se siente vieja. Cuando en el caso de acabar con, qué sé yo, 45 años, sigues teniendo una veintena para poder trabajar en algo que te gusta. ¿Vas a pasar veinte años trabajando en algo que no te llena porque estudiar una carrera no es lo que toca en esa etapa de la vida? Pues no lo entiendo. Si te puedes permitir estudiar a edad avanzada, pues estupendo. Mucha gente puede querer hacerlo cuando sus hijos ya van a colegio y vuelven a tener tiempo libre, por ejemplo. O sin hijos, igual uno descubre tarde su vocación.
Con lo de emparejarse, más de lo mismo. Yo no he visto mayor dificultad a los 31 que a los 17. A partir de los 30 es cuando la gente ya tiene su vida encaminada y es mucho más fácil emparejarse, ya que sabes a qué atenerte. En relaciones que empiezan pronto es más complicado que todo salga bien, porque con la edad y la experiencia uno va madurando, cambiando, descubriendo cosas nuevas y planteándose más objetivos. E igual cada uno de los miembros de la pareja evoluciona en diferentes direcciones y no queda otra que romper la relación (es lo que me sucedió a mí).
El tema de tener hijos sí es más delicado, tenemos un tiempo de vida reproductivo limitado, así que hay que no es algo que se pueda aplazar indefinidamente. A partir de cierta edad surgen bastantes dificultades para lograr un embarazo exitoso, la biología es así. Pero el resto de las cosas son solo convenciones sociales a las que puedes adherirte o de las que puedes pasar olímpicamente. Yo hago lo segundo y soy bastante feliz así, la verdad.
Con todo esto, no quiero decir que sea más sencillo hacer todas estas cosas a partir de la treintena que antes. Es evidente que es más sencillo hacer algo si tienes mucho tiempo por delante que si tienes poco (tienes más oportunidades de enmendar tus errores, de cambiar de idea, etc.). Pero desde luego, no es imposible hacer esas cosas más adelante. Ni siquiera es especialmente difícil. Igual no te salen oportunidades a cada instante, ya que no estás en una etapa de la vida en la que todo el mundo hace lo mismo (estas en los mismos cursos con gente de tu edad, aspirar a las mismas metas, etc.). Pero con poner un poco de tu parte, es sencillo seguir disfrutando de la vida. A mí me va a durar el perseguir sueños e ilusiones mientras me duren las energías.