Quantum Break. Lo había dejado colgado tras el primer acto porque tenía mogollón de juegos acumulados, y me he puesto a darle caña a saco en plan recolectar todo lo posible en la primera pasada.
Decir que me parece uno de los tapados de Xbox One es decir poco.
Visualmente, aunque entiendo que hubiese gente que le costaba acostumbrarse al estilo de los gráficos, me parece una brutalidad. Precioso.
Un juego en el que la historia engancha (los que me gustan a mí), en el que cada coleccionable aporta un matiz, un detalle más al conjunto. Y luego la serie, que sirve para ir viendo la otra cara de la historia, desde dentro de Monarch.
Por la cagada del doblaje (yo lo estoy jugando en inglés) y sobre todo por la poca publicidad, otra joya de Remedy que la gente no va a conocer.
A este estudio deberían hacerle un monumento, coño. Cada juego, una joya.