Little Nightmares.
Una pasada de ambientación, de calidad gráfica, música... Lo único malo, que sospecho que se me va a hacer muy muy corto. Llevo unas cuatro horas (y eso que me he tomado mi tiempo) ya me he pasado tres de los cinco actos que tiene el juego.
Pero la verdad, yo prefiero un juego así, que te engancha aunque dure poco, a los típicos que se eterniza el gameplay porque te obligan a recorrer tres veces el mapeado o a recoger ochenta mil coleccionables.
No me arrepiento de haber pagado los treinta euros por la edición especial, y recomiendo a cualquiera que le gusten estos juegos de ambientación tan "especial" que lo juegue, merece la pena.