Pues me llevo genial con los cuatro (padre, madre, hermano y perro
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). Con cada uno tengo vínculos diferentes... mi padre era el que siempre jugaba conmigo cuando era pequeña, me llevaba a los sitios, pasaba horas conmigo enseñándome y explicándome cosas. Mi madre, por el contrario, no era muy dada a jugar conmigo, siempre me trató más como a una persona adulta. Pero hablábamos muchísimo, le contaba todo lo que me pasaba y a día de hoy somos grandes amigas, podemos pasarnos horas y horas charlando. Además, es la consejera perfecta, así que siempre he recurrido a ella cuando he tenido algún problema.
Respecto a mi hermano, qué voy a decir. Yo tenía casi ocho años cuando él nació, así que siempre lo he visto como el pequeñajo al que hay que cuidar. Nos pasábamos el día jugando juntos (bueno, más bien yo jugaba con él) y la verdad es que siempre hemos estado muy unidos. En cuanto tuvo edad para sostener un mando, compartimos vicios a mi Mega Drive. Posteriormente le fui descubriendo series de anime, libros, más juegos, música... era como tener un miniaprendiz que me adoraba
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Por último, Plinio el Joven. Cómo no adorarlo, si es la cosa más tierna, peluchosa y obediente del mundo.
Así que no puedo decidir... es una pregunta complicada